Renée Zellweger es la nueva (y más desconcertante) incorporación a la
plantilla de estrellas cuyas caras han quedado irreconocibles tras pasar
por el quirófano.
La reaparición en público de Renée Zellweger tras
unos años retirada de las cámaras está siendo uno de los temas más
comentados de la semana. Quizás más que cualquiera de sus últimas
actuaciones, incluso la galardonada por el Oscar en Cold Mountain. El
desconcierto del público ha sido notorio al ver en la prensa fotos de
la actriz con una cara muy diferente a la que se le recordaba. No era
sólo una cuestión de cambio de look, sino que el paso del bisturí parecía evidente.
En medio de toneladas de texto y columnas a analizar los pormenores
del cambio, denunciar el culto a la eterna juventud que se practica en
Hollywood, especialmente en el caso de las actrices, y diversas
variantes de la polémica hacia uno y otro lado, están las declaraciones
de Zellweger ante el revuelo. “Me alegra que la gente me vea
diferente. Estoy viviendo una vida distinta, alegre y más plena; me
encanta que quizás sea eso lo que se note”, ha dicho en la revista People. Como
es habitual, la actriz ni siquiera menciona el asunto de las
operaciones de cirugía plástica, para confirmarlo o desmentirlo, pero
las desconcertantes evidencias fotográficas inclinan a pensar que los
retoques faciales han existido y han sido severos. Hasta el punto de
que, comparada con su versión anterior, Zellweger parece otra persona
por completo.
Eso sí, aunque la transformación haya pillado a medio mundo con el
pie cambiado, el resultado de la cirugía plástica de Zellweger por lo
menos no pertenece a la constelación de retoques faciales a medio camino
entre lo escalofriante y lo chapucero que han presentado otras
estrellas del séptimo arte tras salir del quirófano. Significativo
resulta el caso de la francesa Emmanuelle Béart, que
después de comprobar el mal resultado final de sus operaciones decidió
encabezar una campaña contra la obsesión por la cirugía plástica y la
demanda de eterna juventud a las mujeres en el mundo del espectáculo.
Estos son otros ejemplos de retoques plásticos e inyecciones masivas de Botox con resultados, como poco, cuestionables.
Mickey Rourke.
Lara Flynn Boyle.
Nikki Cox.
Melanie Griffith.
Jennifer Gray.
Suzanne Somers.
Meg Ryan.
jueves, 23 de octubre de 2014
[Seminci 2014] La comedia de autor desembarca en Valladolid
'La fiesta de despedida' se convierte en la favorita del público,
mientras que Bong Joon-ho encandila en la primera 'master-class' del
Festival.
¿De qué se habla en Valladolid hoy? Del derroche de simpatía, generosidad y modestia del cineasta coreano Bong Joon-ho, homenajeado, jurado y programador de la 59ª SEMINCI, que ayer brindó la primera de las clases magistrales del Festival a más de doscientos profesionales, cinéfilos y estudiantes en el Aula Mergelina de la Facultad de Derecho de la Universidad de Valladolid. Durante más de dos horas, el director de Memories of Murder y Mother relató cuáles fueron sus comienzos, desveló alguna de las claves de su oficio y compartió sus filiaciones cinematográficas con los allí presentes.
A petición de Javier Angulo, Bong empezó hablando de su infancia y juventud dentro de la dictadura, lo que determinaría el contenido y la naturaleza de los personajes de sus películas más representativas. Como joven cinéfilo en los años 70 y 80, sin escuelas ni filmoteca, solo veía cine en televisión, clásicos europeos los domingos por la tarde, y las películas prohibidas de la AFKN, el canal televisivo de la Base Aérea Norteamericana en Seúl, donde se pasaban films de alto contenido violento y sexual. La otra influencia decisiva en Bong llegaría en su época universitaria, con el acceso a las películas japonesas prohibidas en Corea por la ocupación hasta el final de la 2ª G. M. Estas películas, entre las que se encuentran Onibaba, de Kaneto Shindô, Deseos impuros, de Shôei Imamura, o Cure, de Kiyoshi Kurosawa, pueden verse dentro de la programación del Festival con el título contenedor de “El cine que le inspiró”, y han estado seleccionadas directamente por Bong.
En otro de los momentos más perdurables de este encuentro, y al ser interpelado acerca del final cut de su última película, Snowpiercer, el coreano desveló que se las tuvo tiesas con Harvey Weinstein (en Hollywood se le conoce por Harvey “Manostijeras”) cuando se propuso recortarle veinte minutos del filme. Al reservarse el productor el corte definitivo, solo un test screening favorable con “la versión del director” impidió que la película se estrenase mutilada.
Entre sus últimos proyectos, el cineasta coreano ha producido Haemoo, la primera película de su co-guionista y asistente en Memories of murder, Shim Sung-bo, ya que dice, en Corea del Sur es muy habitual ese tipo de relación y de mecenazgo entre productores y jóvenes directores. A diferencia de España, y pese a que allí también se está sufriendo una crisis económica, las salas de cine siguen llenándose y son los patrocinios y las grandes empresas privadas (propietarias de las multisalas) las que están invirtiendo en nuevas películas.
Pese a que con cada nueva película suya se erige un clásico, el realizador coreano reconoció humildemente no contar todavía con un estilo ni un género propio, y elogió a aquellos artistas que como Hitchcock, Miyazaki o Almodóvar crean películas con un estilo único, difícil de suplir. Sí que reconoció participar en casi todas las decisiones creativas de cada una de sus películas, desde el storyboard, la composición del plano, el diseño de los escenarios, pero todo ello encaminado a crear un entorno de rodaje adecuado para el actor, en el que se puedan llegar a producir esas dos o tres revelaciones interpretativas que dotan de vida interior al filme.
Por último, y haciendo gala de un humor muy coreano o shojo manga, dijo que llevaba varios días con el pelo erizado como los gatos, debido a que, desde que llegó a España en un viaje de 13 horas en avión, está reescribiendo el argumento de la que será su próxima película, protagonizada por una chica con una personalidad peculiar (¿una My Sassy Girl al estilo Bong?)
También, tras el estreno de las películas de los grandes directores, el público de Valladolid se felicita por la llegada del humor a la programación oficial del Festival, ya que aunque el nivel de los cortos seguía siendo altísimo (Árbol y Saludos cordiales han vuelto a sorprender, uno en clave trágica y el otro como sketch cómico), los últimos largometrajes no habían respondido del todo a las expectativas creadas. Con Grietas en el hormigón, La fiesta de despedida y Parking, que se estrenará mañana en el Teatro Calderón, el Festival entra de la mejor manera posible en su recta final, emocionando y, lo que es más difícil, haciendo reir.
¿Qué hemos visto? Ayer fue día de óperas primas o de segundas películas, cuyos directores optarán por lo tanto al Premio Pilar Miró al Mejor Nuevo Director. Empezó la mañana a guantazo limpio con Risse im Beton (Grietas en el hormigón), la película del director austríaco de origen turco Umut Dag (La segunda mujer), quien ambienta su historia en una Viena desconocida de inmigración y delincuencia, despertando ecos de películas como American History X, Un profeta, o la española Alacrán enamorado, aunque por el tono de la violencia a veces la película se aproxima más a un chernuka del tipo Brother, de Balabanov. Aviso para navegantes: la sinopsis del catálogo de Seminci contiene spoilers.
Cambiando completamente de tercio, La fiesta de despedida, es una película germano-israelí protogonizada por un hilarante “quinteto de la muerte” con una media de edad rondando los 75 años. Dirige la pareja artística formada por Tal Granit y Sharon Maymon, reconocidos en Valladolid por sus cortometrajes Summer Vacation y Matar un abejorro (Espiga de Oro al Mejor Corto en el 2010), quienes logran encontrar la medida justa entre drama y comedia –es una historia sobre la eutanasia-, enriqueciendo la propuesta con gags y diálogos chispeantes desde el minuto uno. Podría verse como el anverso optimista de la desesperanzadora Arrugas.
La “tirisia” es la ausencia de espíritu, es la vida congelada, el último paso antes de la muerte. En su segundo largometraje tras Espiral, Jorge Pérez Solano rueda esta road movie rural sobre madres que abandonan a sus hijos para encontrar pareja. Así de paradójico, pero tan real como la historia en la que se inspira, ambientada en una zona que se conoce como mixteca baja, cuyo paisaje de cactus alargados fue el metafórico punto de partida para un director que rehuye de lugares comunes y no deja de explorar paisanajes como esa plaza expectante ante la llegada de un candidato electoral…
LA TIRISIA trailer from TIRISIA CINE on Vimeo.
¿Qué vino hemos catado? Un tinto de Pesquera cosechero, esto es, sin etiqueta, para celebrar el buen ojo de la Seminci a la hora de apostar por los nuevos realizadores. Lo hemos acompañado de unas patatas picantonas y de un surtido de croquetas variadas y contundentes que hicieron un poco más pesada la digestión de La tirisia, una película sobre la que no me importaría caer de nuevo.
Espigadera: Como pensamos que la comedia no es un género menor, sino el más grande todos, ahí está La fiesta de despedida optando a las principales espigas (aunque el que se lleva seguro es el del Público, vistas las puntaciones que se dejaban en las hurnas, y el de Mejor Guión). Grietas en el hormigón podría optar también al Premio al Mejor Director. Y no hay que descartar que el cineasta mejicano Jorge Pérez Solano se lleve el Premio Pilar Miró.
¿Qué nos espera mañana? Alguien a quien amar, o el cine escandinavo, apuesta segura, entrando en las quinielas del festival. La película turco alemana El corderito dentro de la Sección Oficial y una Mesa Redonda de Cine Turco participada por Nando Salvá, Javier H. Estrada, Gianni Ottone y Ahmet Baciglou. Y además, una nueva clase magistral abierta al público, en esta ocasión la del cineasta Pablo Berger (Blancanieves, Torremolinos 73).
vIA:cinemania
¿De qué se habla en Valladolid hoy? Del derroche de simpatía, generosidad y modestia del cineasta coreano Bong Joon-ho, homenajeado, jurado y programador de la 59ª SEMINCI, que ayer brindó la primera de las clases magistrales del Festival a más de doscientos profesionales, cinéfilos y estudiantes en el Aula Mergelina de la Facultad de Derecho de la Universidad de Valladolid. Durante más de dos horas, el director de Memories of Murder y Mother relató cuáles fueron sus comienzos, desveló alguna de las claves de su oficio y compartió sus filiaciones cinematográficas con los allí presentes.
A petición de Javier Angulo, Bong empezó hablando de su infancia y juventud dentro de la dictadura, lo que determinaría el contenido y la naturaleza de los personajes de sus películas más representativas. Como joven cinéfilo en los años 70 y 80, sin escuelas ni filmoteca, solo veía cine en televisión, clásicos europeos los domingos por la tarde, y las películas prohibidas de la AFKN, el canal televisivo de la Base Aérea Norteamericana en Seúl, donde se pasaban films de alto contenido violento y sexual. La otra influencia decisiva en Bong llegaría en su época universitaria, con el acceso a las películas japonesas prohibidas en Corea por la ocupación hasta el final de la 2ª G. M. Estas películas, entre las que se encuentran Onibaba, de Kaneto Shindô, Deseos impuros, de Shôei Imamura, o Cure, de Kiyoshi Kurosawa, pueden verse dentro de la programación del Festival con el título contenedor de “El cine que le inspiró”, y han estado seleccionadas directamente por Bong.
En otro de los momentos más perdurables de este encuentro, y al ser interpelado acerca del final cut de su última película, Snowpiercer, el coreano desveló que se las tuvo tiesas con Harvey Weinstein (en Hollywood se le conoce por Harvey “Manostijeras”) cuando se propuso recortarle veinte minutos del filme. Al reservarse el productor el corte definitivo, solo un test screening favorable con “la versión del director” impidió que la película se estrenase mutilada.
Entre sus últimos proyectos, el cineasta coreano ha producido Haemoo, la primera película de su co-guionista y asistente en Memories of murder, Shim Sung-bo, ya que dice, en Corea del Sur es muy habitual ese tipo de relación y de mecenazgo entre productores y jóvenes directores. A diferencia de España, y pese a que allí también se está sufriendo una crisis económica, las salas de cine siguen llenándose y son los patrocinios y las grandes empresas privadas (propietarias de las multisalas) las que están invirtiendo en nuevas películas.
Pese a que con cada nueva película suya se erige un clásico, el realizador coreano reconoció humildemente no contar todavía con un estilo ni un género propio, y elogió a aquellos artistas que como Hitchcock, Miyazaki o Almodóvar crean películas con un estilo único, difícil de suplir. Sí que reconoció participar en casi todas las decisiones creativas de cada una de sus películas, desde el storyboard, la composición del plano, el diseño de los escenarios, pero todo ello encaminado a crear un entorno de rodaje adecuado para el actor, en el que se puedan llegar a producir esas dos o tres revelaciones interpretativas que dotan de vida interior al filme.
Por último, y haciendo gala de un humor muy coreano o shojo manga, dijo que llevaba varios días con el pelo erizado como los gatos, debido a que, desde que llegó a España en un viaje de 13 horas en avión, está reescribiendo el argumento de la que será su próxima película, protagonizada por una chica con una personalidad peculiar (¿una My Sassy Girl al estilo Bong?)
También, tras el estreno de las películas de los grandes directores, el público de Valladolid se felicita por la llegada del humor a la programación oficial del Festival, ya que aunque el nivel de los cortos seguía siendo altísimo (Árbol y Saludos cordiales han vuelto a sorprender, uno en clave trágica y el otro como sketch cómico), los últimos largometrajes no habían respondido del todo a las expectativas creadas. Con Grietas en el hormigón, La fiesta de despedida y Parking, que se estrenará mañana en el Teatro Calderón, el Festival entra de la mejor manera posible en su recta final, emocionando y, lo que es más difícil, haciendo reir.
¿Qué hemos visto? Ayer fue día de óperas primas o de segundas películas, cuyos directores optarán por lo tanto al Premio Pilar Miró al Mejor Nuevo Director. Empezó la mañana a guantazo limpio con Risse im Beton (Grietas en el hormigón), la película del director austríaco de origen turco Umut Dag (La segunda mujer), quien ambienta su historia en una Viena desconocida de inmigración y delincuencia, despertando ecos de películas como American History X, Un profeta, o la española Alacrán enamorado, aunque por el tono de la violencia a veces la película se aproxima más a un chernuka del tipo Brother, de Balabanov. Aviso para navegantes: la sinopsis del catálogo de Seminci contiene spoilers.
Cambiando completamente de tercio, La fiesta de despedida, es una película germano-israelí protogonizada por un hilarante “quinteto de la muerte” con una media de edad rondando los 75 años. Dirige la pareja artística formada por Tal Granit y Sharon Maymon, reconocidos en Valladolid por sus cortometrajes Summer Vacation y Matar un abejorro (Espiga de Oro al Mejor Corto en el 2010), quienes logran encontrar la medida justa entre drama y comedia –es una historia sobre la eutanasia-, enriqueciendo la propuesta con gags y diálogos chispeantes desde el minuto uno. Podría verse como el anverso optimista de la desesperanzadora Arrugas.
La “tirisia” es la ausencia de espíritu, es la vida congelada, el último paso antes de la muerte. En su segundo largometraje tras Espiral, Jorge Pérez Solano rueda esta road movie rural sobre madres que abandonan a sus hijos para encontrar pareja. Así de paradójico, pero tan real como la historia en la que se inspira, ambientada en una zona que se conoce como mixteca baja, cuyo paisaje de cactus alargados fue el metafórico punto de partida para un director que rehuye de lugares comunes y no deja de explorar paisanajes como esa plaza expectante ante la llegada de un candidato electoral…
LA TIRISIA trailer from TIRISIA CINE on Vimeo.
¿Qué vino hemos catado? Un tinto de Pesquera cosechero, esto es, sin etiqueta, para celebrar el buen ojo de la Seminci a la hora de apostar por los nuevos realizadores. Lo hemos acompañado de unas patatas picantonas y de un surtido de croquetas variadas y contundentes que hicieron un poco más pesada la digestión de La tirisia, una película sobre la que no me importaría caer de nuevo.
Espigadera: Como pensamos que la comedia no es un género menor, sino el más grande todos, ahí está La fiesta de despedida optando a las principales espigas (aunque el que se lleva seguro es el del Público, vistas las puntaciones que se dejaban en las hurnas, y el de Mejor Guión). Grietas en el hormigón podría optar también al Premio al Mejor Director. Y no hay que descartar que el cineasta mejicano Jorge Pérez Solano se lleve el Premio Pilar Miró.
¿Qué nos espera mañana? Alguien a quien amar, o el cine escandinavo, apuesta segura, entrando en las quinielas del festival. La película turco alemana El corderito dentro de la Sección Oficial y una Mesa Redonda de Cine Turco participada por Nando Salvá, Javier H. Estrada, Gianni Ottone y Ahmet Baciglou. Y además, una nueva clase magistral abierta al público, en esta ocasión la del cineasta Pablo Berger (Blancanieves, Torremolinos 73).
vIA:cinemania
‘Into the Woods’: Nuevas fotos con Johnny Depp y Meryl Streep
Primer vistazo de cerca a Johnny Depp como el lobo feroz en esta unión
musical de cuentos de hadas de Stephen Sondheim que Rob Marshall
('Chicago') ha llevado al cine.
El nuevo número de la revista Entertainment Weekly cuenta con cuatro portadas diferentes dedicadas a los distintos personajes de Into the Woods y nos permite ver más de cerca por primera vez a alguno que hasta ahora había sido muy escurridizo en el tráiler y fotos oficiales: Johnny Depp caracterizado como el Lobo Feroz. Un lobo feroz con sombrero y corbata que este Halloween ya puedes incluir a tu disfraz con todos los personajes de Johnny Depp.
El oscarizado Rob Marshall (Chicago) dirige esta adaptación de uno de los musicales más queridos de Stephen Sondheim (Sweeney Todd). “No quería que tuviera el aspecto de un mundo de dibujos animados”, dice sobre su película en EW. “No es luminosa, luminosa, luminosa… queríamos que tuviera cierto sentido de peligro”. En Into the Woods se funden e interrelacionan varios cuentos de hadas tradicionales —Caperucita Roja, La Cenicienta, Rapunzel, Jack y las habichuelas mágicas— para contar la historia de un matrimonio de panaderos (Emily Blunt y James Corden) que desean tener hijos y entran en contacto con una malvada bruja (Meryl Streep).
El multitudinario reparto del filme lo completan Anna Kendrick como Cenicienta, Chris Pine como su Príncipe Azul, Mackenzie Mauzy como Rapunzel y Lila Crawford como Caperucita, entre otros. Los puedes ver a cotinuación en las distintas portadas de EW.
Into the Woods se estrenará el 27 de febrero de 2015.
El nuevo número de la revista Entertainment Weekly cuenta con cuatro portadas diferentes dedicadas a los distintos personajes de Into the Woods y nos permite ver más de cerca por primera vez a alguno que hasta ahora había sido muy escurridizo en el tráiler y fotos oficiales: Johnny Depp caracterizado como el Lobo Feroz. Un lobo feroz con sombrero y corbata que este Halloween ya puedes incluir a tu disfraz con todos los personajes de Johnny Depp.
El oscarizado Rob Marshall (Chicago) dirige esta adaptación de uno de los musicales más queridos de Stephen Sondheim (Sweeney Todd). “No quería que tuviera el aspecto de un mundo de dibujos animados”, dice sobre su película en EW. “No es luminosa, luminosa, luminosa… queríamos que tuviera cierto sentido de peligro”. En Into the Woods se funden e interrelacionan varios cuentos de hadas tradicionales —Caperucita Roja, La Cenicienta, Rapunzel, Jack y las habichuelas mágicas— para contar la historia de un matrimonio de panaderos (Emily Blunt y James Corden) que desean tener hijos y entran en contacto con una malvada bruja (Meryl Streep).
El multitudinario reparto del filme lo completan Anna Kendrick como Cenicienta, Chris Pine como su Príncipe Azul, Mackenzie Mauzy como Rapunzel y Lila Crawford como Caperucita, entre otros. Los puedes ver a cotinuación en las distintas portadas de EW.
Into the Woods se estrenará el 27 de febrero de 2015.
La película de ‘Super Mario Bros.’ que nunca veremos
En 2004, el guionista Max Landis proyectó una adaptación de la legendaria franquicia de Nintendo. Aquí te contamos su historia.
Cuando pensamos en Nintendo, nuestra primera reacción es pensar en Mario, el fontanero bigotudo que Shigeru Miyamoto se sacó de la manga en 1981 para protagonizar su programa Donkey Kong y que (tras unas cuantas metamorfosis, amén de una ristra de títulos memorables) acabó convirtiéndose en la mascota de la compañía japonesa y en una de las presencias más reconocibles del mundo pixelado. Cuando pensamos en la relación de Mario con la gran pantalla, el panorama se vuelve más espinoso: toca recordar Super Mario Bros., un filme protagonizado por Bob Hoskins en 1993 (cuando media humanidad andaba enganchada al Super Mario Bros. 3, y la otra media al Super Mario Land) al que adjetivos tales como “desastroso”, “intragable” o “cataclísmico” le vienen muy cortos. Cortísimos, de hecho: se trata de una de las adaptaciones de videojuegos al cine más bochornosas jamás rodadas, y mira que hay donde elegir. Ahora bien: si nos fiamos de Max Landis, hijo del director John Landis y guionista de la aclamada Chronicle, a comienzos de este siglo se incubó una segunda adaptación, la cual podría haber sido peor aún que la primera. ¿Cómo sabe eso Landis? Muy sencillo: porque él era el guionista.
En realidad, Super Mario World (que así se hubiera titulado el filme) no fue impulsado por ningún gran estudio, ni contó jamás con el respaldo de Nintendo. El libreto, que Landis ha puesto a disposición del público en su página web, fue un empeño totalmente amateur emprendido por el guionista cuando contaba con 19 años escasos. Porque, claro, cuando uno es un cineasta en ciernes, aficionado a los videojuegos y al que el oficio le viene de familia, ¿cómo resistirse a pergeñar una epopeya sobre el Reino Champiñón y la guerra contra Bowser, el rey de las tortugas? A estas alturas, Landis no está nada orgulloso de su trabajo: por algo su introducción al texto contiene en al menos dos ocasiones la frase “Esta película apesta” (negrita y cursiva en el original). Pero, aun así, anima a tuitear sobre él usando el hashtag #LandisMario, a través del cual ya le ha llegado alguna invectiva socarrona que otra.
Múltiples son los defectos que el autor reconoce en su trabajo de juventud, y entre ellos destacan problemas de índole comercial (“Es un guión basado en una marca registrada: ningún estudio compraría eso”), verbosidad excesiva (“Los bloques de texto son tan gordos que resultan casi ilegibles: es como la jodida La casa de hojas”) y otros pozos en los que suelen caer los guionistas novatos. Pero, sobre todo, lo que pone de los nervios al Max Landis de 2014 es la duración: su guión ocupa nada menos que 436 páginas. Y, si seguimos la ley según la cual una página de guión equivale a un minuto de metraje, tendríamos entre manos el esbozo de una película de 7 horas y 26 minutos.
Por otra parte, y por mucho que juegue con el autodesprecio cómico, Max Landis reconoce que no todo en Super Mario World podría haber sido un desastre: por mucho que la acción se multiplique sin necesidad (“Como si George R. R. Martin [Juego de tronos] escribiera fanfiction mierdosa”) y que, en general, el trabajo dé un poco de vergüenza ajena, el guionista reconoce valores como “reinvenciones graciosas de los personajes y su mitología, algunos diálogos divertidos, y ocasionales escenas de acción muy guays”. A los cuales podemos añadir otros de nuestra cosecha: si bien el propio Landis acepta que, a estas alturas, ni siquiera él puede leerse entero semejante monstruo, ojearlo es un placer si se está puesto en la materia.
Y, entre las virtudes que uno encuentra mediante ese procedimiento, la que más destaca es que no estamos ante otra puñetera historia de origen. Tras un par de someros prólogos, encontramos a Mario ya instalado como héroe oficial del Reino del Champiñón. El cual, por otra parte, no aparece revestido con esas pretensiones de verosimilitud que tanta vergüenza ajena daban en el filme de 1993, sino que queda como una dimensión paralela cuyos aspectos ridículos, ilógicos e irrisorios son respetados al dedillo. Incluso hay un leve intento de explicar (pseudo)científicamente por qué el protagonista se vuelve gigante cuando come según qué setas, por qué salta tan alto o por qué sus movimientos muestran esa inercia que tanto ha irritado a los jugones durante décadas.
Por otra parte, los personajes principales también tienen su encanto: mientras que el héroe aparece como un sujeto acomplejado que gana autoestima a base de ejecutar proezas, Luigi (su hermano alto y delgado, eterno segundón de la historia) queda único hombre cuerdo del cuento, amén de como álter ego del espectador. La princesa Peach, por su parte, aparece como una joven humana (según expresión de Landis, “un pibón”) que se ha criado entre setas antropomorfas, de modo que “sus gestos, expresiones faciales y forma de hablar son los de una niña de diez años”. En cuanto al villano principal, no es otro que Wario, el álter ego oscuro del héroe, por entonces en plena boga gracias a los juegos que protagonizó para las consolas Gamecube y Game Boy Advance. Vamos, que Landis se esforzó en no perder el tiempo narrativo… Aunque sí le resultara fácil perderlo en otras cosas.
Y es que el guión resulta tan inacabable debido, entre otras cosas, a una inacabable sucesión de cameos y apariciones estelares. Personajes asociados a la franquicia de Mario como Bowser, Donkey Kong y familia, la princesa Daisy (en realidad, Daisuko Miyamoto, la novia de Luigi), Toad, los Goomba y los Koopa aparecen en la historia, encajados de mejor o peor manera. Y eso es sólo el principio, porque también encontramos a los protagonistas de otros títulos nintenderos como Samus Aran (la guerrera espacial de Metroid, aquí convertida en oficinista con malas pulgas), Ness (Earthbound) y Kirby, el duende blanquecino y comilón. Como nadie es perfecto, Mega Man y su parentela robótica brillan por su ausencia, pero el censo de personajes es ya lo suficientemente grande como para que las comparaciones con Juego de tronos resulten paradójicamente adecuadas.
Tras este repaso, debemos darle la razón a Max Landis: el guión de Super Mario World es francamente malo. Aun así, sus aspectos redentores revelan que está dotado con aquello de lo cual, justamente, carecen casi todas las películas basadas en juegos: auténtica pasión de fan y conocimiento (exhaustivo) del material adaptado. La inclusión de personajes al por mayor, sin ir más lejos, recuerda a ¡Rompe Ralph! (un título que llegaría a los cines nueve años más tarde). Por otra parte, el jovencito Landis se comprometió lo bastante con su proyecto como para encargarle a un amigo, el dibujante Darren Calvert, una completa colección de diseños conceptuales que puedes ver como ilustraciones en este artículo.
Ahora, once años después de sacarse de la manga este disparate, Max Landis es un guionista cotizado y respetado: según IMDb, en 2015 veremos nada menos que cinco películas con su firma en el guión, entre ellas la adaptación de Frankenstein con Daniel Radcliffe y James McAvoy, el drama American Ultra (protagonizado por Kristen Stewart) y Mr Right, un híbrido de thriller y romance que dirige el español Paco Cabezas y con Sam Rockwell en el papel principal. Un currículum de lo más apañado, en el que sin duda intervienen sus relaciones familiares (eso de tener por padre al director de Granujas a todo ritmo, que además es el mejor amigo de David Cronenberg, debe ser interesante cuanto menos), pero cuyo ritmo de trabajo también delata ese entusiasmo que le llevó a pergeñar Super Mario World… aunque la cosa saliera como saliera. En las quijotescas palabras del propio escritor: “Hoy en día sigo luchando contra gigantes. Sólo que, ahora, los gigantes tienen 120 páginas”.
Cuando pensamos en Nintendo, nuestra primera reacción es pensar en Mario, el fontanero bigotudo que Shigeru Miyamoto se sacó de la manga en 1981 para protagonizar su programa Donkey Kong y que (tras unas cuantas metamorfosis, amén de una ristra de títulos memorables) acabó convirtiéndose en la mascota de la compañía japonesa y en una de las presencias más reconocibles del mundo pixelado. Cuando pensamos en la relación de Mario con la gran pantalla, el panorama se vuelve más espinoso: toca recordar Super Mario Bros., un filme protagonizado por Bob Hoskins en 1993 (cuando media humanidad andaba enganchada al Super Mario Bros. 3, y la otra media al Super Mario Land) al que adjetivos tales como “desastroso”, “intragable” o “cataclísmico” le vienen muy cortos. Cortísimos, de hecho: se trata de una de las adaptaciones de videojuegos al cine más bochornosas jamás rodadas, y mira que hay donde elegir. Ahora bien: si nos fiamos de Max Landis, hijo del director John Landis y guionista de la aclamada Chronicle, a comienzos de este siglo se incubó una segunda adaptación, la cual podría haber sido peor aún que la primera. ¿Cómo sabe eso Landis? Muy sencillo: porque él era el guionista.
En realidad, Super Mario World (que así se hubiera titulado el filme) no fue impulsado por ningún gran estudio, ni contó jamás con el respaldo de Nintendo. El libreto, que Landis ha puesto a disposición del público en su página web, fue un empeño totalmente amateur emprendido por el guionista cuando contaba con 19 años escasos. Porque, claro, cuando uno es un cineasta en ciernes, aficionado a los videojuegos y al que el oficio le viene de familia, ¿cómo resistirse a pergeñar una epopeya sobre el Reino Champiñón y la guerra contra Bowser, el rey de las tortugas? A estas alturas, Landis no está nada orgulloso de su trabajo: por algo su introducción al texto contiene en al menos dos ocasiones la frase “Esta película apesta” (negrita y cursiva en el original). Pero, aun así, anima a tuitear sobre él usando el hashtag #LandisMario, a través del cual ya le ha llegado alguna invectiva socarrona que otra.
Múltiples son los defectos que el autor reconoce en su trabajo de juventud, y entre ellos destacan problemas de índole comercial (“Es un guión basado en una marca registrada: ningún estudio compraría eso”), verbosidad excesiva (“Los bloques de texto son tan gordos que resultan casi ilegibles: es como la jodida La casa de hojas”) y otros pozos en los que suelen caer los guionistas novatos. Pero, sobre todo, lo que pone de los nervios al Max Landis de 2014 es la duración: su guión ocupa nada menos que 436 páginas. Y, si seguimos la ley según la cual una página de guión equivale a un minuto de metraje, tendríamos entre manos el esbozo de una película de 7 horas y 26 minutos.
Por otra parte, y por mucho que juegue con el autodesprecio cómico, Max Landis reconoce que no todo en Super Mario World podría haber sido un desastre: por mucho que la acción se multiplique sin necesidad (“Como si George R. R. Martin [Juego de tronos] escribiera fanfiction mierdosa”) y que, en general, el trabajo dé un poco de vergüenza ajena, el guionista reconoce valores como “reinvenciones graciosas de los personajes y su mitología, algunos diálogos divertidos, y ocasionales escenas de acción muy guays”. A los cuales podemos añadir otros de nuestra cosecha: si bien el propio Landis acepta que, a estas alturas, ni siquiera él puede leerse entero semejante monstruo, ojearlo es un placer si se está puesto en la materia.
Y, entre las virtudes que uno encuentra mediante ese procedimiento, la que más destaca es que no estamos ante otra puñetera historia de origen. Tras un par de someros prólogos, encontramos a Mario ya instalado como héroe oficial del Reino del Champiñón. El cual, por otra parte, no aparece revestido con esas pretensiones de verosimilitud que tanta vergüenza ajena daban en el filme de 1993, sino que queda como una dimensión paralela cuyos aspectos ridículos, ilógicos e irrisorios son respetados al dedillo. Incluso hay un leve intento de explicar (pseudo)científicamente por qué el protagonista se vuelve gigante cuando come según qué setas, por qué salta tan alto o por qué sus movimientos muestran esa inercia que tanto ha irritado a los jugones durante décadas.
Por otra parte, los personajes principales también tienen su encanto: mientras que el héroe aparece como un sujeto acomplejado que gana autoestima a base de ejecutar proezas, Luigi (su hermano alto y delgado, eterno segundón de la historia) queda único hombre cuerdo del cuento, amén de como álter ego del espectador. La princesa Peach, por su parte, aparece como una joven humana (según expresión de Landis, “un pibón”) que se ha criado entre setas antropomorfas, de modo que “sus gestos, expresiones faciales y forma de hablar son los de una niña de diez años”. En cuanto al villano principal, no es otro que Wario, el álter ego oscuro del héroe, por entonces en plena boga gracias a los juegos que protagonizó para las consolas Gamecube y Game Boy Advance. Vamos, que Landis se esforzó en no perder el tiempo narrativo… Aunque sí le resultara fácil perderlo en otras cosas.
Y es que el guión resulta tan inacabable debido, entre otras cosas, a una inacabable sucesión de cameos y apariciones estelares. Personajes asociados a la franquicia de Mario como Bowser, Donkey Kong y familia, la princesa Daisy (en realidad, Daisuko Miyamoto, la novia de Luigi), Toad, los Goomba y los Koopa aparecen en la historia, encajados de mejor o peor manera. Y eso es sólo el principio, porque también encontramos a los protagonistas de otros títulos nintenderos como Samus Aran (la guerrera espacial de Metroid, aquí convertida en oficinista con malas pulgas), Ness (Earthbound) y Kirby, el duende blanquecino y comilón. Como nadie es perfecto, Mega Man y su parentela robótica brillan por su ausencia, pero el censo de personajes es ya lo suficientemente grande como para que las comparaciones con Juego de tronos resulten paradójicamente adecuadas.
Tras este repaso, debemos darle la razón a Max Landis: el guión de Super Mario World es francamente malo. Aun así, sus aspectos redentores revelan que está dotado con aquello de lo cual, justamente, carecen casi todas las películas basadas en juegos: auténtica pasión de fan y conocimiento (exhaustivo) del material adaptado. La inclusión de personajes al por mayor, sin ir más lejos, recuerda a ¡Rompe Ralph! (un título que llegaría a los cines nueve años más tarde). Por otra parte, el jovencito Landis se comprometió lo bastante con su proyecto como para encargarle a un amigo, el dibujante Darren Calvert, una completa colección de diseños conceptuales que puedes ver como ilustraciones en este artículo.
Ahora, once años después de sacarse de la manga este disparate, Max Landis es un guionista cotizado y respetado: según IMDb, en 2015 veremos nada menos que cinco películas con su firma en el guión, entre ellas la adaptación de Frankenstein con Daniel Radcliffe y James McAvoy, el drama American Ultra (protagonizado por Kristen Stewart) y Mr Right, un híbrido de thriller y romance que dirige el español Paco Cabezas y con Sam Rockwell en el papel principal. Un currículum de lo más apañado, en el que sin duda intervienen sus relaciones familiares (eso de tener por padre al director de Granujas a todo ritmo, que además es el mejor amigo de David Cronenberg, debe ser interesante cuanto menos), pero cuyo ritmo de trabajo también delata ese entusiasmo que le llevó a pergeñar Super Mario World… aunque la cosa saliera como saliera. En las quijotescas palabras del propio escritor: “Hoy en día sigo luchando contra gigantes. Sólo que, ahora, los gigantes tienen 120 páginas”.
Vía libre para nuevas películas de John Carter
Disney pierde los derechos del personaje creado por Edgar Rice
Burroughs, cuyos herederos esperan vender a otro estudio cinematográfico
con la intención de hacer nuevas películas.
Disney dedicó mucho esfuerzo, años y dinero —unos 250 millones de dólares, ehem— a la realización de John Carter, la adaptación de la legendaria saga de ciencia-ficción escrita por Edgar Rice Burroughs. Como sabes, el resultado a nivel económico fue lamentable. Quizás sea una palabra dura para definir una película que amasó más de 284 millones de dólares en todo el mundo, pero teniendo en cuenta el desorbitado desembolso del presupuesto —sin contar la multiplicación de los gastos de márketing y publicidad— y que el filme dirigido por Andrew Stanton tenía la labor asumida de iniciar una franquicia millonaria… sus escasos 73 millones de recaudación doméstica fueron un golpe letal a toda la viabilidad del proyecto. Así que a la Casa del Ratón no es que le importe demasiado haber perdido los derechos del personaje y las novelas de la serie marciana de Burroughs esta semana, que han pasado de vuelta a sus herederos.
Los responsables de Edgar Rice Burroughs Inc. han publicado un comunicado en el que informan de la nueva situación y, además de recordar que ahora mismo hay en desarrollo una nueva película de Tarzán en Warner Bros., aprovechan para lanzar el anzuelo del aventurero espacial a ver si otro gran estudio pica y decide probar suerte de nuevo con más películas suyas. “John Carter de Marte fue el estímulo creativo detrás de clásicos como Superman, Star Wars y Avatar. Edgar Rice Burroughs fue el Maestro de la Aventura y su obra literaria continúa gozando de seguidores alrededor del mundo. Buscaremos un nuevo socio para ayudarnos a desarrollar nuevas aventuras cinematográficas de lo relatado en las once novelas marcianas de Burroughs. Esta aventura nunca se detiene”, expresa el presidente James Sullos en la nota de prensa.¿A ti qué te pareció John Carter? ¿Crees que el enfoque de Stanton cometió algún fallo que pueda explicar su fracaso? ¿Era Taylot Kitsch el más indicado para interpretar al héroe? ¿Qué errores no deberían repetirse en alguna futura adaptación del material espacial de Burroughs?
Via:cinemania
Disney dedicó mucho esfuerzo, años y dinero —unos 250 millones de dólares, ehem— a la realización de John Carter, la adaptación de la legendaria saga de ciencia-ficción escrita por Edgar Rice Burroughs. Como sabes, el resultado a nivel económico fue lamentable. Quizás sea una palabra dura para definir una película que amasó más de 284 millones de dólares en todo el mundo, pero teniendo en cuenta el desorbitado desembolso del presupuesto —sin contar la multiplicación de los gastos de márketing y publicidad— y que el filme dirigido por Andrew Stanton tenía la labor asumida de iniciar una franquicia millonaria… sus escasos 73 millones de recaudación doméstica fueron un golpe letal a toda la viabilidad del proyecto. Así que a la Casa del Ratón no es que le importe demasiado haber perdido los derechos del personaje y las novelas de la serie marciana de Burroughs esta semana, que han pasado de vuelta a sus herederos.
Los responsables de Edgar Rice Burroughs Inc. han publicado un comunicado en el que informan de la nueva situación y, además de recordar que ahora mismo hay en desarrollo una nueva película de Tarzán en Warner Bros., aprovechan para lanzar el anzuelo del aventurero espacial a ver si otro gran estudio pica y decide probar suerte de nuevo con más películas suyas. “John Carter de Marte fue el estímulo creativo detrás de clásicos como Superman, Star Wars y Avatar. Edgar Rice Burroughs fue el Maestro de la Aventura y su obra literaria continúa gozando de seguidores alrededor del mundo. Buscaremos un nuevo socio para ayudarnos a desarrollar nuevas aventuras cinematográficas de lo relatado en las once novelas marcianas de Burroughs. Esta aventura nunca se detiene”, expresa el presidente James Sullos en la nota de prensa.¿A ti qué te pareció John Carter? ¿Crees que el enfoque de Stanton cometió algún fallo que pueda explicar su fracaso? ¿Era Taylot Kitsch el más indicado para interpretar al héroe? ¿Qué errores no deberían repetirse en alguna futura adaptación del material espacial de Burroughs?
Via:cinemania
[Seminci 2014] ‘El arca de Noé’ divide, Zhang Yimou convence
El director chino, uno de los habituales del certamen, conmueve con una
crónica familiar que se desarrolla tras la Revolución Cultural.
¿De qué se habla en Valladolid hoy? De la entrega de la Espiga de Honor del festival a Imanol Arias, naturalmente. En su encuentro previo con la prensa, el actor de Riaño estuvo locuaz, generoso y agradecido, y dejó multitud de perlas, algunas de las cuales reproducimos:
— “Me han dado el premio demasiado pronto. Espero no verme Seducido y abandonado” (como cuenta Scorsese en el documental de James Toback).
— “Siempre me consideré un asilvestrado. No he sido un actor del método, pero he probado todos los métodos”.
— “No he sido un gran lector de guiones”.
— “La televisión me parece lenta, me cuesta mucho más entender los tiempos”.
— “José Sacristán es uno de los actores más orgullosos que he conocido y tiene un orgullo muy alentador”.
— “Un galán tiene que tener cara de hambre”.
— “En los años 80 y 90 pasaron muchas cosas buenas para el cine español, aunque también fue cuando se empezaron a permitir ciertos vicios como la venta fraudulenta de entradas, el abuso con las subvenciones, etc.”.
— “Identificando a los culpables y personificando los problemas, no se resuelve el conflicto”.
— “Anacleto (su próxima película) es como si a James Bond le metes en Resacón en Las Vegas”.
— “Los jóvenes no levantan la voz, que es lo que se hacía antes en los rodajes”.
De la rueda de prensa posterior al primer pase de El arca de Noé, la única película española a concurso en esta Sección Oficial, en la que los codirectores Adán Aliaga y David Valero bromearon acerca de que habían encontrado distribuidor para su película, y que esta se iba a estrenar con doscientas copias. Más allá de la dificultad de estrenar un tipo de película que solo puede obtener respuesta a través del apoyo de influyentes lobbies mediáticos y culturales (en nuestro país, la definición y el reparto de lo que es cultura cinematográfica está en pocas manos), se encuentra el hecho de que los principales festivales de España, en pos de la sostenibilidad del circuito, han cambiado parcialmente el modelo de selección de las películas concursantes. Así, a los patrocinios que cubren el agujero económico que ha dejado la crisis en los organismos públicos, se une la realidad de que un gran número de las películas que se presentan en nuestros festivales más reconocidos se encuentran ya licenciadas en España o, lo que es lo mismo, tienen previsto su estreno comercial en salas, la mayoría de las veces en fecha inminente. Por lo que el plus de prestigio, promoción y márketing que implica la selección en alguno de estos festivales se incorpora a la propia campaña de distribución de la película. En Valladolid, de las 18 películas que concursan en la Sección Oficial, solo siete de ellas han llegado al festival sin tener cerrado un acuerdo de distribución. Incluso en festivales con mercado para filmes o Sales Office, como es el caso de San Sebastián, la pelea por el Palmarés muchas veces se libra no solo entre películas, sino entre modelos de distribución, como fue lo que ocurrió este año entre Magical Girl y La isla mínima, distribuidas por Avalon (cine independiente) y la división española de Warner Bros., respectivamente.
¿Qué hemos visto? Regreso a casa: lo primero que hay que advertir al lector/ espectador, es que no debe confundirse esta película con otra de título similar de Zhang Yimou, la también excelente El camino a casa. En su último trabajo, el director chino vuelve a trabajar con la que fuera su musa entre finales de los 80 y las dos décadas siguientes, Gong Li, y lo hace en una historia intimista en la que se atreve a seguir hablando de las consecuencias que sobre las familias acarreó la Revolución Cultural China. En Gui lai (así es el título original), Gong Li interpreta a Feng, una mujer que tras muchos años sin saber de su marido, deportado a un campo de prisioneros tras la delación de su hija, es incapaz de reconocerle cuando este es rehabilitado y vuelve a casa, debido al deterioro de su memoria. La película está contada con una sensibilidad extrema (lo que impide que el espectador se haga preguntas) y fue recibida con una calurosa ovación por el público, quizás la mayor desde la película de inauguración.
El arca de Noé se parece a Seguridad no garantizada, pero en plan indie pobre, como la realidad española. Está ambientada en un inminente 2020, en el que se escucha por la radio a los políticos de ahora alentando sobre la recuperación económica. El mismo cuento chino para un realidad palpable de desolación, paro y sexo de extrarradio, del tipo Carlos Reygadas. Pero la película es más optimista que las del mejicano, un poco funambulista diríase incluso (como el cine anterior de Adán Aliaga, el del co-director David Valero lo desconozco). Porque el “lobo”, el “oso”, y el “avestruz” son personajes con la melancolía y el encanto suficientes para cambiar la desoladora percepción del mundo que les rodea, de ahí esas imágenes volcadas. Pese al interés de la propuesta, el público recibió El arca de Noé con opiniones enfrentadas. Y quizás para próximas ediciones, uno de los desafíos del equipo de trabajo del festival sea encontrar películas de habla hispana que conecten con su público, como ha ocurrido en ediciones anteriores de Seminci.
Continúa el festival sin desfallecer en su programación de cortos, ayer fue El corredor, de José Luis Montesinos, otra lectura con mucho humor y ritmo de la crisis que nos asola, y de cómo los pobres no tienen reparos en aprovecharse de los miserables. Homo, homini, lupus, en fin.
Dentro de la Sección Oficial, se presentó también La tirisia, otra película mejicana, pero por cuestiones de agenda dejaremos su comentario para más adelante.
Y nos asomamos por la sección de documentales del festival, la pionera Tiempo de Historia, para dar un visionado a la francesa Vendages (Vendimia), de Paul Lacoste, el retrato coral de una cuadrilla de vendimiadores durante el periodo de recogida en el Sur de Francia. Gracias a la banda sonora de Olivier Cussac y a una estupenda fotografía, la película puede definirse como un adagio otoñal protagonizado por temporeros sin horizonte más allá que el de su propia supervivencia.
¿Qué vino hemos catado? Como el pan y el vino para andar el camino corre de nuestro bolsillo, un Atalaya D.O. Almansa Garnacha Tintorera, una de las uvas más difíciles de domar, y de vendimiar también, ya que los racimos cuelgan a ras de suelo.
Espigadera: Mayúscula sería la sorpresa si El arca de Noé recogiera algún galardón, pero designios más raros se han visto por estos festivales. En cambio, si Regreso a casa obtuviese cualquiera de las espigas principales, no nos extrañaría lo más mínimo, aunque Amor bajo el espino blanco queda muy próxima.
Via:cinemania
¿De qué se habla en Valladolid hoy? De la entrega de la Espiga de Honor del festival a Imanol Arias, naturalmente. En su encuentro previo con la prensa, el actor de Riaño estuvo locuaz, generoso y agradecido, y dejó multitud de perlas, algunas de las cuales reproducimos:
— “Me han dado el premio demasiado pronto. Espero no verme Seducido y abandonado” (como cuenta Scorsese en el documental de James Toback).
— “Siempre me consideré un asilvestrado. No he sido un actor del método, pero he probado todos los métodos”.
— “No he sido un gran lector de guiones”.
— “La televisión me parece lenta, me cuesta mucho más entender los tiempos”.
— “José Sacristán es uno de los actores más orgullosos que he conocido y tiene un orgullo muy alentador”.
— “Un galán tiene que tener cara de hambre”.
— “En los años 80 y 90 pasaron muchas cosas buenas para el cine español, aunque también fue cuando se empezaron a permitir ciertos vicios como la venta fraudulenta de entradas, el abuso con las subvenciones, etc.”.
— “Identificando a los culpables y personificando los problemas, no se resuelve el conflicto”.
— “Anacleto (su próxima película) es como si a James Bond le metes en Resacón en Las Vegas”.
— “Los jóvenes no levantan la voz, que es lo que se hacía antes en los rodajes”.
De la rueda de prensa posterior al primer pase de El arca de Noé, la única película española a concurso en esta Sección Oficial, en la que los codirectores Adán Aliaga y David Valero bromearon acerca de que habían encontrado distribuidor para su película, y que esta se iba a estrenar con doscientas copias. Más allá de la dificultad de estrenar un tipo de película que solo puede obtener respuesta a través del apoyo de influyentes lobbies mediáticos y culturales (en nuestro país, la definición y el reparto de lo que es cultura cinematográfica está en pocas manos), se encuentra el hecho de que los principales festivales de España, en pos de la sostenibilidad del circuito, han cambiado parcialmente el modelo de selección de las películas concursantes. Así, a los patrocinios que cubren el agujero económico que ha dejado la crisis en los organismos públicos, se une la realidad de que un gran número de las películas que se presentan en nuestros festivales más reconocidos se encuentran ya licenciadas en España o, lo que es lo mismo, tienen previsto su estreno comercial en salas, la mayoría de las veces en fecha inminente. Por lo que el plus de prestigio, promoción y márketing que implica la selección en alguno de estos festivales se incorpora a la propia campaña de distribución de la película. En Valladolid, de las 18 películas que concursan en la Sección Oficial, solo siete de ellas han llegado al festival sin tener cerrado un acuerdo de distribución. Incluso en festivales con mercado para filmes o Sales Office, como es el caso de San Sebastián, la pelea por el Palmarés muchas veces se libra no solo entre películas, sino entre modelos de distribución, como fue lo que ocurrió este año entre Magical Girl y La isla mínima, distribuidas por Avalon (cine independiente) y la división española de Warner Bros., respectivamente.
¿Qué hemos visto? Regreso a casa: lo primero que hay que advertir al lector/ espectador, es que no debe confundirse esta película con otra de título similar de Zhang Yimou, la también excelente El camino a casa. En su último trabajo, el director chino vuelve a trabajar con la que fuera su musa entre finales de los 80 y las dos décadas siguientes, Gong Li, y lo hace en una historia intimista en la que se atreve a seguir hablando de las consecuencias que sobre las familias acarreó la Revolución Cultural China. En Gui lai (así es el título original), Gong Li interpreta a Feng, una mujer que tras muchos años sin saber de su marido, deportado a un campo de prisioneros tras la delación de su hija, es incapaz de reconocerle cuando este es rehabilitado y vuelve a casa, debido al deterioro de su memoria. La película está contada con una sensibilidad extrema (lo que impide que el espectador se haga preguntas) y fue recibida con una calurosa ovación por el público, quizás la mayor desde la película de inauguración.
El arca de Noé se parece a Seguridad no garantizada, pero en plan indie pobre, como la realidad española. Está ambientada en un inminente 2020, en el que se escucha por la radio a los políticos de ahora alentando sobre la recuperación económica. El mismo cuento chino para un realidad palpable de desolación, paro y sexo de extrarradio, del tipo Carlos Reygadas. Pero la película es más optimista que las del mejicano, un poco funambulista diríase incluso (como el cine anterior de Adán Aliaga, el del co-director David Valero lo desconozco). Porque el “lobo”, el “oso”, y el “avestruz” son personajes con la melancolía y el encanto suficientes para cambiar la desoladora percepción del mundo que les rodea, de ahí esas imágenes volcadas. Pese al interés de la propuesta, el público recibió El arca de Noé con opiniones enfrentadas. Y quizás para próximas ediciones, uno de los desafíos del equipo de trabajo del festival sea encontrar películas de habla hispana que conecten con su público, como ha ocurrido en ediciones anteriores de Seminci.
Continúa el festival sin desfallecer en su programación de cortos, ayer fue El corredor, de José Luis Montesinos, otra lectura con mucho humor y ritmo de la crisis que nos asola, y de cómo los pobres no tienen reparos en aprovecharse de los miserables. Homo, homini, lupus, en fin.
Dentro de la Sección Oficial, se presentó también La tirisia, otra película mejicana, pero por cuestiones de agenda dejaremos su comentario para más adelante.
Y nos asomamos por la sección de documentales del festival, la pionera Tiempo de Historia, para dar un visionado a la francesa Vendages (Vendimia), de Paul Lacoste, el retrato coral de una cuadrilla de vendimiadores durante el periodo de recogida en el Sur de Francia. Gracias a la banda sonora de Olivier Cussac y a una estupenda fotografía, la película puede definirse como un adagio otoñal protagonizado por temporeros sin horizonte más allá que el de su propia supervivencia.
¿Qué vino hemos catado? Como el pan y el vino para andar el camino corre de nuestro bolsillo, un Atalaya D.O. Almansa Garnacha Tintorera, una de las uvas más difíciles de domar, y de vendimiar también, ya que los racimos cuelgan a ras de suelo.
Espigadera: Mayúscula sería la sorpresa si El arca de Noé recogiera algún galardón, pero designios más raros se han visto por estos festivales. En cambio, si Regreso a casa obtuviese cualquiera de las espigas principales, no nos extrañaría lo más mínimo, aunque Amor bajo el espino blanco queda muy próxima.
Via:cinemania
Kim Basinger vuelve al crimen de Los Ángeles
Mini-reunión de 'L.A. Confidential' en marcha con 'The Nice Guys', de
Shane Black, donde la actriz se reencontrará con Russell Crowe en otro
relato criminal con aroma retro
Shane Black (Iron Man 3) sigue añadiendo talento de primera a The Nice Guys, su próxima película prevista para 2016. Un regreso al thriller policiaco que el cineasta llevaba varios años intentando sacar adelante y que tras el éxito de su trabajo con Marvel Studios no sólo ha conseguido financiación en Warner Bros. sino que cuenta con Ryan Gosling y Russell Crowe como protagonistas. Además, The Hollywood Reporter adelanta que Kim Basinger también se apunta al reparto, reencontrándose así con Crowe en otra historia criminal en Los Ángeles y con sabor retro tras L.A. Confidential (1997). Sólo que The Nice Guys no está ambientada en la década de los 50 del Hollywood dorado, sino en los mucho más sucios —todavía— años 70 del siglo pasado.
Basinger interpretará a una jueza de intereses turbios, cuya hija Margaret Qualley (The Leftovers) ha desaparecido. Un detective privado (Gosling) y un matón profesional (Crowe) colaboran para resolver el caso, que quizás esté vinculado con la muerte de una famosa actriz porno llamada Misty Mountains. Black también firma el guión junto a Anthony Bagarozzi, mientras que el reparto se va completando poco a poco con las incorporaciones de Keith David y Beau Knapp como villanos, y de Matt Bomer en un papel sin determinar.
Via:cinemania
Shane Black (Iron Man 3) sigue añadiendo talento de primera a The Nice Guys, su próxima película prevista para 2016. Un regreso al thriller policiaco que el cineasta llevaba varios años intentando sacar adelante y que tras el éxito de su trabajo con Marvel Studios no sólo ha conseguido financiación en Warner Bros. sino que cuenta con Ryan Gosling y Russell Crowe como protagonistas. Además, The Hollywood Reporter adelanta que Kim Basinger también se apunta al reparto, reencontrándose así con Crowe en otra historia criminal en Los Ángeles y con sabor retro tras L.A. Confidential (1997). Sólo que The Nice Guys no está ambientada en la década de los 50 del Hollywood dorado, sino en los mucho más sucios —todavía— años 70 del siglo pasado.
Basinger interpretará a una jueza de intereses turbios, cuya hija Margaret Qualley (The Leftovers) ha desaparecido. Un detective privado (Gosling) y un matón profesional (Crowe) colaboran para resolver el caso, que quizás esté vinculado con la muerte de una famosa actriz porno llamada Misty Mountains. Black también firma el guión junto a Anthony Bagarozzi, mientras que el reparto se va completando poco a poco con las incorporaciones de Keith David y Beau Knapp como villanos, y de Matt Bomer en un papel sin determinar.
Via:cinemania
'El hobbit: La batalla de los cinco ejércitos', último cartel para el final de la trilogía
Continúa llegando material publicitario
sobre la tercera parte de 'El Hobbit', por si quedara alguien que aún
no sabe de su existencia... Arriba tenéis el aparentemente definitivo cartel de 'El Hobbit: La Batalla de los Cinco Ejércitos'
('The Hobbit: The Battle of the Five Armies', 2014), un diseño en la
línea de los anteriores de la saga, con los rostros de todos los
protagonistas, las criaturas más destacadas y varias escenas de acción.
Sé que es impensable tal como funciona la industria pero, ¿no creéis que
con el primer póster ya era suficiente?
Como sabéis de sobra, 'El Hobbit: La Batalla de los Cinco Ejércitos' es la última entrega de la extensa y carísima (ha sido presupuestada en 745 millones de dólares) adaptación a la gran pantalla de la obra fantástica de J.R.R. Tolkien, que funciona como precuela de la otra trilogía dirigida por Peter Jackson, 'El señor de los anillos' ('The Lord of the Rings', 2001-2003). El 17 de diciembre se estrena, en 3D y HFR 3D, la película con la que nos despediremos de la Tierra Media... al menos, por unos años. Os recuerdo que el primer tráiler lo tenéis aquí.
Guillermo del Toro, Fran Walsh, Philippa Boyens y Jackson firman el guion mientras que el reparto vuelve a estar encabezado por Martin Freeman, Ian McKellen, Cate Blanchett, Luke Evans (el nuevo Drácula), Richard Armitage, Evangeline Lilly, Orlando Bloom, Lee Pace, Hugo Weaving y Benedict Cumberbatch, entre otros. El último es el encargado de dar vida al dragón Smaug, abajo tenéis un curioso vídeo del rodaje donde podéis ver cómo lo interpreta.
PD: Se comenta que el cartel parece haberse inspirado en el famoso "photobomb" de Cumberbatch a U2 en la pasada edición de los Oscar. ¿Qué os parece?
Como sabéis de sobra, 'El Hobbit: La Batalla de los Cinco Ejércitos' es la última entrega de la extensa y carísima (ha sido presupuestada en 745 millones de dólares) adaptación a la gran pantalla de la obra fantástica de J.R.R. Tolkien, que funciona como precuela de la otra trilogía dirigida por Peter Jackson, 'El señor de los anillos' ('The Lord of the Rings', 2001-2003). El 17 de diciembre se estrena, en 3D y HFR 3D, la película con la que nos despediremos de la Tierra Media... al menos, por unos años. Os recuerdo que el primer tráiler lo tenéis aquí.
Guillermo del Toro, Fran Walsh, Philippa Boyens y Jackson firman el guion mientras que el reparto vuelve a estar encabezado por Martin Freeman, Ian McKellen, Cate Blanchett, Luke Evans (el nuevo Drácula), Richard Armitage, Evangeline Lilly, Orlando Bloom, Lee Pace, Hugo Weaving y Benedict Cumberbatch, entre otros. El último es el encargado de dar vida al dragón Smaug, abajo tenéis un curioso vídeo del rodaje donde podéis ver cómo lo interpreta.
PD: Se comenta que el cartel parece haberse inspirado en el famoso "photobomb" de Cumberbatch a U2 en la pasada edición de los Oscar. ¿Qué os parece?
'The Prince', aquel cine de acción de hace 25 años
‘The Prince’ (id, Brian A. Miller, 2014) es una película que seguramente pase por nuestra cartelera sin pena ni gloria, imagino que aproximándose más a lo primero que a lo segundo. Sólo tenemos que tomar prestada la figura de Bruce Willis, aquí en un importante papel secundario intentando cambiar su imagen en el subvalorado cine de acción, para ver que el personaje al que da vida Jason Patric entra de lleno en el modelo de action hero implantado en aquellos años por actores como Willis y compañía —póngase aquí el nombre del actor que se quiera y relacionado con el thriller de acción—.
En aquellos años, determinados actores clave en este subgénero, siempre injustamente infravalorado, eran dirigidos por nombres aún más imprescindibles. Apellidos como McTiernan, Cameron o Donner dotaban de personalidad productos que en manos de otros habrían caído en el olvido. Brian A. Miller es un completo desconocido con una filmografía también desconocida por el gran público. ‘The Prince’ evoca sin tapujos aquel cine ochentero y noventero sin demasiada pasión ni cariño por lo que se narra. Y desaprovecha un reparto interesante.
Jason Patric, uno de esos guaperas que habiendo participado en algunas películas destacables, jamás obtuvo la fama que otros consiguieron con menos esfuerzo, da vida a Paul, un hombre que vive tranquilamente de su trabajo en un taller mecánico, propiedad suya. Un día de tranquilidad, llamando a su hija vía móvil, descubre que ésta ha desaparecido, probablemente secuestrada, y nosotros nos enteramos de que Paul es un exasesino, o exagente del gobierno, o ex tipo muy peligroso con el que es mejor no meterse porque tienen un pasado atroz lleno de muertes. Y ahora se han metido con su hijita.
Se ve y se olvida
Bruce Willis, con una perilla de esas que parece le dan mayor seriedad o pinta de más cabrón, interpreta al villano de la función. Conectado con el protagonista a tenor de una mala vida y un error de aquél cuando quería asesinarle, no descansará hasta ver colmadas sus ansias de venganza. Una némesis para nuestro protagonista cuyo gran valor es llevar el rostro de un actor al que muchos admiramos por su inolvidable John McClane; y nada más. Willis no está precisamente bien con su personaje, mal dibujado y con frases realmente horribles. Todo suena a cobro de cheque y punto.Pero peor resulta la pinta de un despeinado John Cusack —quién lo ha visto y quién lo ve en sus films noventeros—, como asesino profesional echando una mano a Paul en el desempeño de su misión suicida. Un par de frases lapidarias, un poco de vieja amistad, de alcohol, y unas ganas que brillan por su ausencia, interpretativamente hablando. Otro cheque justificado únicamente con la presencia. Y en el caso de Cusack es doblemente triste; no recuerdo a un actor tan carismático y que caiga tan bien al público, caer tan bajo, profesionalmente hablando, apareciendo últimamente en multitud de películas, todas muy olvidables.
Hay que agradecerle a Miller el no caer en la actual moda de narración frenética a lo loco, con miles de cámaras captando todos los ángulos e infinidad de planos por segundo en el montaje. Eso y lo atractivo que puede resultar el personaje de Paul en determinados momentos —destacando aquel en un pub en el que se narra a modo de leyenda una anécdota muy sangrienta de su pasado, una especie de Kayser Sozé del lado de los “buenos”, aunque la inexpresividad de Patric en muchos instantes no ayuda— ayudan a soportar una película que no aburre, pero se olvida en menos tiempo que lo que se tarda en verla.
'Los Vengadores 2: La Era de Ultrón', tráiler y primer cartel
Aquí os traigo, antes de lo esperado, el primer y espectacular tráiler de 'Los Vengadores 2: La Era de Ultrón' ('Avengers 2: Age of Ultron', Joss Whedon, 2015), próximo estreno de Marvel después de 'Los Guardianes de la Galaxia' ('Guardians of the Galaxy', James Gunn, 2014), uno de los mayores éxitos comerciales del estudio y también una de las películas más divertidas del año.
El esquema del tráiler es similar al teaser de 'Los Vengadores' (J. Whedon, 2012) que vimos hace tres años, con la amenazante voz del villano, la gente asustada y los superhéroes en apuros. Hay planos convencionales y aburridos (explosiones, carreras a cámara lenta, miradas de asombro...) y algunos que en principio resultan absurdos (¿a qué vendrá esa escena de las bailarinas?) pero está logrado el tono dramático y la aparición de Ultrón o la pelea de Hulk contra Hulkbuster consiguen despertar entusiasmo por una secuela que conducirá a la Guerra Civil de Marvel.
Robert Downey Jr., Chris Evans, Mark Ruffalo, Chris Hemsworth, Scarlett Johansson, Jeremy Renner, Samuel L. Jackson, Cobie Smulders, Paul Bettany, Don Cheadle, Aaron Taylor Johnson, Elizabeth Olsen, James Spader y Andy Serkis encabezan el estelar reparto de este lujoso blockbuster orquestado por Joss Whedon. Disney estrenará 'Los Vengadores: La Era de Ultrón' a finales de abril en varios países y el 1 de mayo en España; es uno de los tres títulos de superhéroes que podremos ver el año que viene junto a 'Ant-Man' y el reboot de 'Los 4 Fantásticos'.
Las Tortugas Ninja logran un muy flojo estreno
La taquilla española logra este fin de semana un dato global a priori decente, 6,82 millones de € vía Rentrak Spain, pero poco espectacular si se valora la cantidad de producto fuerte que llegaba (Ninja Turtles y Equalizer) y el que estaba (Torrente, Perdida, Annabelle,
etc). Si la pasada semana se veían descensos poco agudos pese a los 2,5
millones que generaban los dos estrenos, los menos 2,1 millones de las
dos grandes novedades sí afectan al conjunto. Con todo, aún hay producto
que tiene continuidad y opciones de seguir sumando buenas cantidades.
La franquicia de Transformers en España – y como pasa con mucho producto de súperhéroes – no ha tenido el éxito que en otros países. El primer film estrenó con 2,53 millones y casi 3 durante los 4 días de estreno, y en la siguientes secuelas, el dato fue de 2,21 millones para el film de 2009 (3,1 con el día extra) y 2,51 millones para la tercera en 2011 (3,4 millones con el día extra), pero ha sido la cuarta película, Age of Extinction, que solo ha generado 1,97 millones.
Este mismo año, Godzilla también se quedó en el millón de € pelado, pese al despliegue mediático de Warner y el interés que a priori se esperaba.
En este caso Ninja Turtles tenía el interés extra del sector familiar, pero como en los casos de G.I. Joe o incluso Real Steel, la propuesta no parece haber estado enmarcada en lo que este sector espera. Ahora el recorrido toca ver que sucede y pese a la Fiesta del cine no se espera que la película vaya a irse más allá de los 3,5 millones.
En Italia la película estrenó con 1,7 millones de €, lo cual indica que el dato en España es verdaderamente flojo. Por fortuna la cinta ha logrado en el resto del mundo buenos datos y le faltan mercados importantes como Alemania o Francia por lo que terminará su carrera en los 317 millones de €.
El otro estreno era The Equalizer, con Denzel Washington al que Sony se trajo a San Sebastián, le dieron un premio a la carrera y esto se ha transformado en una apertura de 931.000€ en 344 salas. La media se queda en los 2.700€ y se han vendido 136.00 entradas. La cifra deja un mejor regusto que las Tortugas de Paramount-Michael Bay porque el dato se queda cerca de la cifra italiana, 993.000€, que es un buen referente ante las similitudes de los dos mercados. En Francia generó 1,6 millones (cifra más floja en comparación) y Alemania generó 1,83 millones en su estreno.
La cifra es mejor que las apuestas recientes de Tripictures, Tres días para matar o Non-Stop, y logra un mejor dato que 2 Guns, última película del actor estrenada hace justo un año también por Sony y en un número similar de cines. Este sí es un producto que se beneficiará de la Fiesta del Cine, de los días de entre semana, pero es cierto que la competencia que tenía encima, tanto Perdida como las españolas Relatos Salvajes, La isla mínima, Torrente o El niño, le afectaban bastante. Tiene potencial para irse cerca de los 4 millones de € y un total de 635.000 espectadores.
El tercer estreno de la semana era Relatos Salvajes, película de gran relevancia y nombre desde su paso por Cannes, y que llegaba a España de la mano de Warner. El estreno ha ido muy en la línea de las 195 copias como en el caso de La isla mínima, pero la diferencia de no tener a Atresmedia detrás le ha dejado unas cifras decentes pero no espectaculares: 512.180€ para una media de 2.613€ y casi 70.000 espectadores.
La gran ventaja de Relatos Salvajes es que ha entrado bien si valoramos que la competencia esta semana era muy dura y la cantidad potencial de espectadores ansiosos de cine es muy reducida comparada con hace 4-5 años. Ante esto Relatos entra con solidez suficiente como para esperar un mantenimiento no solo excelente, sino que lleve a la sorpresa.
El pasado año Tesis de un asesinato lograba 604.000€ saliendo con 25 pantallas más de la mano de Fox, lo cual dejaba una media bastante similar a Relatos. En aquella ocasión la comercialidad del film también residía en el claro recuerdo de El secreto de sus ojos, algo que aquí no pasaba. El filme logró terminar en los 1,62 millones y en esta ocasión los comentarios de Relatos son muy superiores. Séptimo estreno con casi 1 millón de € pero con el remolque no solo de Belén Rueda sino también Telecinco.
Durante 2013 el cine sin una gran cadena detrás se quedó en cifras regulares (Quién mató a Bambi?, Justin y la espada del valor, Alacrán enamorado) y las excepciones fueron Mama y Los amantes pasajeros. Tesis se quedó en medio.
En 2011 Un cuento chino logró 2,28 millones de €, 353.000 espectadores, y Una pistola en cada mano 1,94 millones. De momento Relatos Salvajes debería moverse incluso por encima de los datos de Un cuento chino y poder aspirar a los 2,5 millones.
En Argentina Relatos lleva 12,5 millones de €, casi 7 veces el dato inicial.
En el lado español, esta semana los otros tres filmes fuertes, Torrente, La isla mínima y El niño, han seguido activos en el top10 con un dato de 1,6 millones – por lo que junto con Relatos y otras películas dejan la cuota del cine español esta semana en un 33%.
Torrente 5 suma 950.000€, un 52% menos que la pasada semana y ya llega a los 8,6 millones de €. El filme lleva vendidos 1,37 millones de entradas, y es de esperar que con la fiesta del cine pueda rozar los 1,5 millones y de ahí terminar sobre los 1,8-1,9 millones por lo que llegaría a superar los 11,1 millones y puede que alcance los 12 pero dependerá de como le afecte la competencia.
La isla cae un decente 41% hasta los 427.000€ en cuarta emana en 261 cines – 66 más que en su estreno – para ya alcanzar los 3,95 millones de €. La venta de entradas supera ya los 600.000 espectadores, y es de esperar que junto con otros títulos de renombre (Perdida, Niño) pueda rascar buenas cifras en la Fiesta del cine. De momento el objetivo de superar el millón de espectadores está ahí, aunque tendrá que sudar mucho.
El niño por su cuenta lleva 15,48 millones de €, 2,57 millones de entradas y sumaba esta semana 229.000€, un 49% menos que la pasada semana. Llegará a los 16 millones de € y de ahí lo que venga, será bienvenido. Es el segundo mayor éxito del año tras Ocho apellidos vascos.
El mantenimiento más interesante esta semana es probable que sea Annabelle, que en segunda semana solo cae un 36% pese a ser un producto que tradicionalmente cae de forma más aguda. Suma 736.000€ y 2,3 millones en total. La cercanía de Halloween puede darle un extra de gas y los 4 millones los superaría, lo cual sería un triunfo para Warner comparado que Insidious 2 hizo 3,7 millones de € hace un año.
Perdida se ven más afectada por la lluvia de estrenos fuertes y cae un 41% hasta los 760.000€ y un total de 2,54 millones, podría remontar pero el éxito en España no irá a la par del visto en Estados Unidos por el colapso general que hay.
Fuera del top10 el cine español se queda cojo con los datos de Lasa y Zabala, 74.400€ en 89 salas, y Magical Girl no logra traducir la Concha de Oro en cifras espectaculares. En este caso, la película entra con 40.400€ en 37 cines por lo que es de esperar que más o menos a atraído al sector habitual de este tipo de cine. Caníbal recaudó 48.700€ (61 cines), La herida 32.000€ (27 cines) y 10.000 Km 39.500€ (27 cines).
Datos vía: Rentrak Spain
Pau Brunet
Meryl Streep y Hugh Grant protagonizarán lo nuevo de Stephen Frears
Nadie en su sano juicio duda del talento interpretativo de Meryl Streep,
por lo que la noticia de que va a hacer una nueva película siempre
debería ser motivo de alegría para todo cinéfilo. Su siguiente proyecto
se titulará 'Florence', compartirá el protagonismo de la función con Hugh Grant y tras las cámaras encontraremos a Stephen Frears. No suena nada mal, ¿verdad? Pues atentos a su historia.
Streep dará vida a Florence Foster Jenkins, una mujer que se puso como objetivo ser una estrella de la ópera pese a su, siendo generosos, limitado talento para ello. Sin embargo, Florence consiguió lo que parecía imposible gracias a la generosa herencia que recibió de su padre y se convirtió en una soprano de éxito. Eso sí, dicho triunfo se basaba sobre todo en la curiosidad del público por comprobar si era tan mala como se decía. Grant dará vida a su agente, la persona que logró convencerla de que tenía talento para la música.
El guión corre a cargo de Nicholas Martin, quien se centrará específicamente en el concierto que Foster Jenkins dio en el Carnegie Hall un mes antes de su muerte, pero también abordará todas las etapas anteriores de su vida. Poco más hay que añadir por ahora, pero ya puedo deciros que cuentan con mi entrada, ¿y con la vuestra?
Vía | Deadline
Streep dará vida a Florence Foster Jenkins, una mujer que se puso como objetivo ser una estrella de la ópera pese a su, siendo generosos, limitado talento para ello. Sin embargo, Florence consiguió lo que parecía imposible gracias a la generosa herencia que recibió de su padre y se convirtió en una soprano de éxito. Eso sí, dicho triunfo se basaba sobre todo en la curiosidad del público por comprobar si era tan mala como se decía. Grant dará vida a su agente, la persona que logró convencerla de que tenía talento para la música.
El guión corre a cargo de Nicholas Martin, quien se centrará específicamente en el concierto que Foster Jenkins dio en el Carnegie Hall un mes antes de su muerte, pero también abordará todas las etapas anteriores de su vida. Poco más hay que añadir por ahora, pero ya puedo deciros que cuentan con mi entrada, ¿y con la vuestra?
Vía | Deadline
'The Gambler', tráiler y cartel del interesante remake con Mark Whalberg
A pesar del muy mejorable cartel, con el que Paramount Pictures necesita dejarnos claro que Mark Wahlberg es el protagonista, esta película pinta bastante bien. Podéis comprobarlo echando un vistazo al primer tráiler de 'The Gambler', esperado segundo trabajo de Rupert Wyatt, el director de la estupenda ‘El origen del planeta de los simios‘ (‘Rise of the Planet of the Apes’, 2011).
Como ya informamos antes del comienzo del rodaje, esta producción de Paramount Pictures es una nueva versión de ‘El jugador' (‘The Gambler’, Karel Reisz, 1974) que ha escrito William Monahan, guionista de uno de los mejores remakes que se han hecho jamás: 'Infiltrados' ('The Departed', Martin Scorsese, 2006). John Goodman, Brie Larson, Michael K. Williams y Jessica Lange completan el reparto encabezado por Wahlberg, quien adelgazó cerca de 30 kilos para este papel (¿a la caza del Oscar?).
La historia de este thriller se centra en un respetado profesor de literatura cuya adicción al juego amenaza con destruir su vida, sobre todo cuando se mete en líos con la mafia... ‘The Gambler’ se estrena en Estados Unidos el 19 de diciembre; de momento no hay fecha para nuestro país.
Via:blog de cine
Como ya informamos antes del comienzo del rodaje, esta producción de Paramount Pictures es una nueva versión de ‘El jugador' (‘The Gambler’, Karel Reisz, 1974) que ha escrito William Monahan, guionista de uno de los mejores remakes que se han hecho jamás: 'Infiltrados' ('The Departed', Martin Scorsese, 2006). John Goodman, Brie Larson, Michael K. Williams y Jessica Lange completan el reparto encabezado por Wahlberg, quien adelgazó cerca de 30 kilos para este papel (¿a la caza del Oscar?).
La historia de este thriller se centra en un respetado profesor de literatura cuya adicción al juego amenaza con destruir su vida, sobre todo cuando se mete en líos con la mafia... ‘The Gambler’ se estrena en Estados Unidos el 19 de diciembre; de momento no hay fecha para nuestro país.
Via:blog de cine
Matthew McConaughey defiende sus comedias románticas
Desde 2011 venía dejando interpretaciones sorprendentes para alguien que hasta no hace mucho era famoso por lucir físico en olvidables comedias románticas, pero el éxito de la serie 'True Detective' y el Oscar por 'Dallas Buyers Club' han supuesto un lavado de cara para McConaughey, ahora reconocido como un excelente intérprete. Lejos de arrepentirse de su pasado, de protagonizar títulos como 'Planes de boda' ('The Wedding Planner', 2001) o 'Novia por contrato' ('Failure to Launch', 2006), ha defendido tanto su trabajo como el género en una reciente entrevista. Os dejo sus declaraciones:
Estas cosas no son fáciles. Lo difícil es hacer que parezcan fáciles. Esa clase de películas son lo que son. Reciben el desprecio de los críticos. Reciben el desprecio de los propios actores. Y por un lado lo entiendo, pero por otros es completamente injusto. Hay un dinamismo que necesitas para hacerlas funcionar. Creo que les di ese dinamismo. Y algunos de los planos fueron muy difíciles, conmigo luchando por las pelotas del tío.
¿Qué es una comedia romántica? Chico conoce a chica. Se juntan. Algo pasa. La chica se marcha. El chico la persigue. Vuelven juntos. Fin. Muchas veces el hombre es castrado de alguna forma, esto es, tiene que arrastrarse y decir: "No soy nadie sin ti. Si no me aceptas de nuevo, no soy nada". Y yo siempre decía: "¿Qué chica quiere a ese chico?". No tengo problema en decir: "Lo siento. ¿Quieres dar a esto otra oportunidad?". Pero tengo que volver con alguna integridad, incluso si es sobre una motocicleta con un velo en la cabeza. Mira, me alegra si piensas que he "pasado a través" de eso. Hice mi trabajo.
Vía | Joblo
Truffaut, el director que mejor habló del amor
Ayer, 21 de octubre, se celebraba el 30 aniversario del fallecimiento de François Truffaut. En Blogdecine hemos querido, sobre todo un servidor, rendirle homenaje al día siguiente, porque cualquier día es bueno para ponerse a recomendar películas de Truffaut, o revisar alguna.
Crítico, y muy bueno, antes de ser director, el apellido de Truffaut empezó a hacerse conocido en el séptimo arte después de uno de los travellings emocionales —tal y como decía su amigo/némesis Godard— más imponentes que ha dado el cine, el que transcurre en el final de 'Los 400 golpes' ('Les quatre cents coups', 1959), film considerado por muchos como el mejor de su autor, el inicio de la saga Antoine Doinel, que daría para cuatro títulos más.
Enmarcado de lleno en la Nouvelle Vague, afortunadamente se fue distanciando de dicho movimiento, causando el enfado de elitistas, y hasta ese instante amigo suyo, como Jean-Luc Godard. Profundo admirador de cineastas franceses de la talla de Max Ophüls o Jean Renoir, que según él, poseían una forma muy personal de hacer cine, el cine de Truffaut huele a verdad por todos lados, con esa cámara siempre cercana a los personajes, y su peculiar dibujo de situaciones incómodas, siendo muy incisivo y directo con los personajes femeninos.
En Richard Linklater o Martin Scorsese, por poner dos ejemplos conocidos, podemos ver ecos del estilo de un cineasta francés que elevó la categoría de su cine a dónde antes sólo habían soñado llegar. Heredero director de los cineastas clásicos a los que admiraba —entre los que se encuentra Alfred Hitchcock, quien tuvo el placer de concederle entrevistas, recogidas en uno de los mejores libros sobre cine jamás escritos—, su visión sobre el amor y las mujeres permanece como la más certera, al menos para quien esto firma, de todas las vertidas en una gran pantalla.
A Fanny Ardant no se le pueden hacer preguntas sobre Truffaut en una entrevista, pero recomiendo verle hablando de él en algún que otro documental dedicado al director. Hay algo en su forma de hablar, en sus ojos, que sugieren un secreto, algo que hace pensar en Truffaut como alguien único e insustituible, que tal vez sabía algo que los demás desconocían, como la mano que tenía para conocer el universo femenino como pocos.
Un tumor cerebral, sobre el que el propio director no quería ser informado, nos lo arrebató demasiado pronto, con 52 años de edad. Demasiado joven. Sólo nos queda recordarle viendo sus películas las veces que queramos. Yo las tengo absolutamente todas, porque ni una sola me parece mala —lo cual no quiere decir que todas me parezcan geniales—, así que si tuviera que recomendar cinco títulos de una filmografía indispensable y obligada como la de Truffaut, creo que serían los siguientes:
'Jules y Jim' ('Jules et Jim', 1962)
Uno de los triángulos amorosos, muy del gusto de su director, más famosos y prestigiosos de la historia del cine, con los dos personajes masculinos del título enamorados de Jeanne Moreau. Cómo para no estarlo. Muchos seguiríamos a Catherine hasta el fin del mundo, compartiéndola con quien fuese necesario. Real, triste, emocionante y dura. Inolvidable banda sonora de Georges Delerue.
'Fahrenheit 451' (1966)
Tomando como base el relato del gran Ray Bradbury, Truffaut firma su primera película en color y la única de toda su carrera hablada en inglés. El director nunca consideró la ciencia-ficción un género interesante hasta que leyó la obra de Bradbury y durante años luchó para conseguir financiación para este proyecto. Un futuro devastador en el que los bomberos en lugar de apagar fuegos queman libros.
'Besos robados' ('Baisers volés', 1968)
Segunda secuela de la ópera prima de Truffaut, con la que iniciaría la saga de Antoine Doinel adulto y sus desventuras amorosas. De toda la saga, excepcional como pocas —que se lo digan a Linklater, que recurre a ella continuamente en su cine—, me quedo con este título en el que Doinel —Jean-Pierre Léaud, lo que se dice no un buen actor, pero de un carisma arrollador— cae en las redes de ese amor primerizo en sus primeros años de juventud. Atención a la declaración de amor cerca del final por parte de sus desconocido. Para enmarcar.
'La sirena del Mississippi' ('La sirène du Mississipi', 1969)
Si creyéramos que el amor, tal y como ha sido representado infinidad de veces en poemas y películas, no existiese, esta película sería la demostración de lo contrario. En ella un hombre —Belmondo en uno de los mejores papeles de su carrera— cae en las redes de una mujer que hará con él LO QUE QUIERA. Y él, por amor, se dejará. Subversión del Film Noir y maravillosa Catherine Deneuve.
'La noche americana' ('La nuit américaine', 1973)
El reconocimiento por parte de la Academia de Hollywood, que le otorgó el Óscar a la mejor película de habla no inglesa. La lucha de un director por terminar una película, teniendo que lidiar con una crisis personal y demás problemas derivados de la producción. Un manjar para cinéfilos con secuencias inolvidables.
Via:blog de cine
'Dead Rising: Watchtower', primera imagen de la película basada en el popular videojuego
Aquí tenéis la primera imagen oficial de 'Dead Rising: Watchtower', basada en el popular videojuego de zombis, entrañables criaturas
que por lo visto nunca pasan de moda. Junto a la fotografía, Legendary
Digital Media y Crackle confirmaron el reparto definitivo de la
película, .
Virginia Madsen, Rob Riggle, Jesse Metcalfe, Meghan Ory, Dennis Haysbert, Harley Morenstein, Aleks Paunovic y Keegan Connor Tracy son los protagonistas de una producción de que, a pesar del éxito del juego de Capcom, no tiene previsto pasar por las carteleras. 'Dead Rising: Watchtower' se estrenará el año que viene en plataformas digitales (Crackle, de Sony, será la primera en ofrecerla), en formato DVD y en canales de televisión y cable. Supongo que si los fans se ponen pesados, no sería descartable algún que otro pase en salas de cine...
Dirigida por Zach Lipovsky a partir de un guion de Tim Carter, la película de 'Dead Rising' adapta la historia del primer título de esta franquicia del género "survival horror". El personaje principal es un periodista que se encuentra encerrado en un gigantesco centro comercial plagado por miles de muertos vivientes... El mismo escenario que usaron antes (con intenciones muy diferentes) George A. Romero y Zack Snyder, espero que esta nueva propuesta aporte algo diferente.
Vía | Darkhorizons
Virginia Madsen, Rob Riggle, Jesse Metcalfe, Meghan Ory, Dennis Haysbert, Harley Morenstein, Aleks Paunovic y Keegan Connor Tracy son los protagonistas de una producción de que, a pesar del éxito del juego de Capcom, no tiene previsto pasar por las carteleras. 'Dead Rising: Watchtower' se estrenará el año que viene en plataformas digitales (Crackle, de Sony, será la primera en ofrecerla), en formato DVD y en canales de televisión y cable. Supongo que si los fans se ponen pesados, no sería descartable algún que otro pase en salas de cine...
Dirigida por Zach Lipovsky a partir de un guion de Tim Carter, la película de 'Dead Rising' adapta la historia del primer título de esta franquicia del género "survival horror". El personaje principal es un periodista que se encuentra encerrado en un gigantesco centro comercial plagado por miles de muertos vivientes... El mismo escenario que usaron antes (con intenciones muy diferentes) George A. Romero y Zack Snyder, espero que esta nueva propuesta aporte algo diferente.
Vía | Darkhorizons
James Wan vuelve al terror: dirigirá 'The Conjuring 2'
James Wan da marcha atrás y regresará al cine de terror. Como recordaréis, el director decidió tomarse un descanso del género tras 'Insidious: Capítulo 2'
('Insidious: Chapter 2', 2013) e iniciar una nueva etapa con 'Fast
& Furious 7' (2015), pero la experiencia no ha debido ser de su
agrado (la muerte de Paul Walker y todo el lío posterior ha tenido que influir) porque se ha arrependido de su decisión y va a ocuparse de la puesta en escena de 'The Conjuring 2'.
La noticia da sentido al retraso del estreno anunciado recientemente por New Line y Warner Bros. Los estudios habían previsto que la segunda parte de 'Expediente Warren: The Conjuring' (2013) llegara a los cines el 23 de octubre de 2015 pero la han pospuesto a 2016, sin fecha concreta, ahora que Wan vuelve a estar al mando; todavía está ocupado con la post-producción de su último trabajo así que el rodaje de 'The Conjuring 2' no comenzará hasta el próximo verano.
Patrick Wilson y Vera Farmiga repetirán como protagonistas de la secuela, que también vuelve a contar con Chad y Carey Hayes como guionistas. Recordemos que el spin-off de esta nueva franquicia, 'Annabelle' (2014), se encuentra actualmente en cartelera y es uno de los mayores éxitos del año (costó 6,5 millones de dólares y de momento lleva recaudados 166 en taquilla). Los sustos siguen siendo muy rentables.
Vía | ComingSoon
La noticia da sentido al retraso del estreno anunciado recientemente por New Line y Warner Bros. Los estudios habían previsto que la segunda parte de 'Expediente Warren: The Conjuring' (2013) llegara a los cines el 23 de octubre de 2015 pero la han pospuesto a 2016, sin fecha concreta, ahora que Wan vuelve a estar al mando; todavía está ocupado con la post-producción de su último trabajo así que el rodaje de 'The Conjuring 2' no comenzará hasta el próximo verano.
Patrick Wilson y Vera Farmiga repetirán como protagonistas de la secuela, que también vuelve a contar con Chad y Carey Hayes como guionistas. Recordemos que el spin-off de esta nueva franquicia, 'Annabelle' (2014), se encuentra actualmente en cartelera y es uno de los mayores éxitos del año (costó 6,5 millones de dólares y de momento lleva recaudados 166 en taquilla). Los sustos siguen siendo muy rentables.
Vía | ComingSoon
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