Cualquier persona que haya tenido relación con 'Star Wars'
tiene por fuerza que ser consultada sobre su posible vuelta a la saga.
Uno de ellos y además alguien muy importante es John Williams,
compositor de una de las piezas más reconocibles del siglo XX como es el
tema original de Star Wars. Durante un concierto con la fundación de
Jóvenes Músicos, el compositor se dirigió al público en los siguientes
términos justo antes de interpretar el clásico tema musical.
“Estamos apunto de interpretar el tema de Star Wars [aquí la sala
interrumpe el discurso para aplaudir]. Me acuerdo de la primera vez que
la tocamos hace décadas. Por entonces, ni George [Lucas] ni yo éramos
conscientes de lo que ocurriría años más tarde, con nuevas secuelas... y
después otra trilogía. Ahora estamos escuchando que habrá una nueva
serie de películas que llegarán en 2015, 2016... así que tengo que
asegurarme de que todavía estoy listo para trabajar unos cuantos años.
Espero continuar trabajando con George... [más aplausos]”.
Con estas palabras John Williams dejó claro que no le faltan ganas ni
ilusión para seguir con la saga, aunque se le escapa un "pequeño"
detalle y es que J.J. Abrams ha trabajado casi en exclusiva con Michael
Giacchino, así lo hizo incluso en la producción de Steven Spielberg, 'Super 8'.
Además, el compositor no parece ser consciente de que George Lucas no
será partícipe (al menos de manera directa) en las nuevas películas.
'Star Wars. Episode VII' llegará a los cines en 2015 siendo escrita por Michael Arndt y dirigida por J.J. Abrams.
Robert De Niro, Katherine Heigl, Diane Keaton, Amanda Seyfried, Topher
Grace, Ben Barnes, Patricia Rae, Susan Sarandon y Robin Williams son los
protagonistas de la comedia 'La gran boda',
debut del director y guionista Justin Zackham que llegará a los cines
norteamericanos finalmente el próximo 26 de abril (3 de mayo a los
españoles) después de haber sido retrasada en octubre de 2012. La cinta
cuenta, básicamente, la historia de cómo Elle Griffin (Keaton) y su ex
marido Don Griffin (De Niro) tienen que pasar el fin de semana de la
boda de su hijo adoptado, Alejandro, aparentando que aún están casados
ante los ojos de Madonna Soto (Rae), la madre biológica de estrictas
creencias religiosas de Alejandro. .
Ya en diciembre se avanzó el que será próximo proyecto del realizador Baltasar Kormakur, 'Everest',
una película que será rodada a lo largo de tres meses en un glaciar,
usando además como localización la famosa montaña donde rodarán lo más
alto posible. En palabras del propio cineasta: “Será una película muy grande con un presupuesto medio”.
Desde Deadline informan ahora que Christian Bale será quien sufra tales
condiciones meteorológicas, en una historia que estará basada en la
desastrosa expedición a la montaña de 1996 que dejase ocho escaladores
muertos.
Jon Krakauer, periodista, escritor y montañero estadounidense reconocido
por sus libros sobre alpinismo ya escribió de primera mano sobre esta
tragedia, sin embargo, 'Everest' no será una adaptación literal de su
libro, sino que extraerá la historia de diversas fuentes incluyendo
entrevistas con los supervivientes.
Kormakur ('Contraband') estará presente en la próxima gala de los Oscar gracias a la nominación como Mejor Película Extranjera de su película, 'The Deep'. Además, próximamente también estrenará '2 Guns', con Mark Wahlberg y Denzel Washington.
No debemos confundir la película de Kormakur con la cinta que dirigirá Doug Liman bajo el mismo nombre ('Everest'),
la cual contará con Tom Hardy en el papel de George Mallory, la primera
persona que logró alcanzar la cima de la montaña más alta del mundo.
[SPOILERS] No te fíes de los finales felices: en el fondo, a todos
estos amoríos les espera un porvenir tan negro como el de Ryan Gosling y
Michelle Williams en 'Blue Valentine'. Por CINEMANÍA
Parece hecho a propósito: justo una semana después del Día
de San Valentín, extinguidos ya los fuegos de la fiesta más romántica y
consumida la última caja de bombones con forma de corazón, llega a los
cines españoles Blue Valentine. Con
tres años de retraso respecto a su estreno en EE UU, esta película nos
cuenta al mismo tiempo (cosas del montaje) la ascensión y el hundimiento
de una pareja sentimental, la de un Ryan Gosling enterrando para siempre el recuerdo de El diario de Noa y una Michelle Williams cuyo trabajo le ganó una nominación al Oscar.
La verdad es que a los protagonistas de Blue Valentine se
les ve desde el principio condenados al fracaso amoroso. Por si la
estructura del filme no fuera bastante, el que este tome su título de
una canción de Tom Waits debería darnos alguna pista.
Ahora bien, el terremoto de emociones que ambos viven en la pantalla nos
ha hecho pensar en otras parejas de cine: esas que viven su
correspondiente historia de amor, y que se despiden del público con un happy end como
Hollywood manda, pero a las cuales nuestros (negros) corazones de
cinéfilos no ven mucho futuro después de los créditos finales. Aquí
tienes unos ejemplos.
Melvin y Carol (Mejor... imposible, 1997)
La pareja: Un escritor con trastornos mentales, homofóbico y maniático (Jack Nicholson) y una camarera (Helen Hunt) sin un duro en el bolsillo y muy castigada por la vida. ¿Por qué no tienen futuro? Porque la voluntad de
cambiar es algo muy loable, pero no garantiza resultados. Y menos aún
cuando andan de por medio problemas que, como los de Melvin, no pueden
ser aliviados ni siquiera con años de terapia. Además, Carol tiene el
suficiente carácter como para no tolerar que su nuevo churri se pase un pelo con ella: bastará con que al personaje de Nicholson ("Un hombre condenado a ser infeliz", en palabras de Roger Ebert) se le vaya la pinza una vez para que ella le mande a paseo. Y hará muy bien.
Andie y Blaine (La chica de rosa, 1986)
La pareja: Chica de clase obrera con ambiciones fashionistas (Molly Ringwald) conoce a niño pijo (Andrew McCarthy) de familia obscenamente rica y fama de duermemozas. ¿Por qué no tienen futuro? Dicen que el happy end que La chica de rosa lució en los cines no estaba en el guión original de John Hughes, y que el cineasta y su musa partieron peras tras el rodaje debido a que ella le había impuesto el cambio a Howard Deutch, director suplente. Sea esto verdad o no, lo cierto es que Blaine tiene el espesor mental de un sello, que su frivolidad de pollopera no
podrá satisfacer nunca a una chica tan sensible, y que todos los
espectadores sabemos que ella estaba realmente destinada a acabar con Duckie (John Cryer), el pagafantas más simpático de la historia del cine. Por cierto, Molly, sacar del armario al personaje perdedor dos décadas y media después nos parece una excusa algo sucia.
Edward y Vivian (Pretty Woman, 1990)
La pareja: ¿Hace falta que te recordemos quiénes protagonizan este cuento de hadas? Venga, va: la pilingui Julia Roberts y el financiero Richard Gere. ¿Por qué no tienen futuro? "Tú y yo somos iguales: jodemos por dinero",
le dice Gere a Julia en un memorable momento del guión. Y, tratándose
de un filme que contiene una frase tan cínica, nos extraña que los
guionistas no matizaran un poco más ese edulcorado final: vale que
Edward abandona el reverso tenebroso de las finanzas en el desenlace de
la historia, pero ¿de verdad podrá sacar adelante una relación que
empezó en circunstancias tan sórdidas? Y, lo más importante: ya que la
pareja va a moverse desde ahora en un mundo de millonarios
superficiales, ¿resistirán ambos las miradas de soslayo y el desprecio
social sin venirse abajo?
Ariel y Eric (La sirenita, 1989)
La pareja: Un príncipe morenazo y con buena planta, y
la hija pelirroja y adorable del rey de los mares. Desde luego, aquí lo
que falla no es el apartado físico (aunque sea dibujado). ¿Por qué no tienen futuro? Olvidemos el buen rollo que dan canciones como Bésala y Bajo el mar, y
hagamos un poco de memoria. Así, recordaremos que Ariel se prenda de
Eric a primera vista, bastándole el consiguiente subidón hormonal para
firmar un pacto con Úrsula, esa bruja que tanto se parece a Divine. Y
que él, por su parte, es lo bastante superficial como para quedarse con
la chica sin que ambos se hayan comunicado en absoluto (más que nada,
porque cuando la conoce ella ha vendido su voz por un par de piernas).
Ya sabemos que los romances de Disney tienen estas cosas, pero a este matrimonio regio le espera un porvenir muy, muy complicado.
Sam y Annie (Algo para recordar, 1993)
La pareja: Tom Hanks, viudo inconsolable, encuentra pronto consuelo en los brazos de Meg Ryan, periodista, gracias a un programa de llamadas en antena. ¿Por qué no tienen futuro? El nacimiento del amor en
circunstancias improbables es el eje de innumerables comedias
románticas. Un eje muy criticable, como prueba un análisis de Algo para recordar. Tras
105 minutos de desencuentros y búsqueda mútua, la pareja se encuentra
de una vez al final del filme... y surgen las dudas: ¿y si resulta que
no tienen nada en común? ¿Y si no se gustan físicamente? Y, lo peor de
todo: ¿saldrá ella por patas cuando descubra que el hijo de Hanks
-quien, recordemos, lo empezó todo con sus llamadas indiscretas- es un
pequeño metomentodo?
Ben y Alison (Lío embarazoso, 2007)
La pareja: Si los embarazos no deseados son catastróficos ya de por sí, imagínate que eres Katherine Heigl y que el autor del bombo de marras es Seth Rogen... ¿Por qué no tienen futuro? Dejemos de lado el hecho
de que la Heigl y Rogen no pegan ni con cola como pareja, tanto en la
ficción como en la vida real. Y valoremos en su justa medida el cambio
de actitud que Ben experimenta en los últimos minutos del filme,
haciendo el esfuerzo de leer todos esos libros sobre bebés. ¿Qué nos
queda? Pues una pareja sin apenas nada en común, y que no pasa de ser
una versión 2.0 del tradicional matrimonio de penalti. Lo sentimos, pero
les damos un lustro de vida matrimonial, como demasiado.
Lelaina y Troy (Bocados de realidad, 1994)
La pareja: Winona Ryder y Ethan Hawke, ambos en la cúspide de su popularidad, protagonizaron la comedia romántico-grunge dirigida (y también interpretada) por Ben Stiller. ¿Por qué no tienen futuro? Juramos que el
resentimiento no habla por nuestras bocas cuando decimos que, en el
instituto y la universidad, vimos innumerables parejas como la de
Lelaina y Troy: ella, una chica muy sensible y con la cabeza un tanto en
las nubes, y él un chicarrón a la moda (ojito a la perilla y las
camisas lucidas aquí por Hawke) cuyas ínfulas de estrella del rock
ocultan sus pocas ganas de dar un palo al agua. ¿Qué ocurrió con ellas
en cuanto la vida laboral llamó a sus puertas? Pues que acabaron como el
rosario de la aurora, generalmente con la chica mandando a paseo al
chico en favor de sujetos más centrados y con menos pose. Como nosotros,
por ejemplo.
Isaac y Tracy (Manhattan, 1979)
La pareja: Woody Allen nos hizo sospechar que posee el don de la profecía (u otros rasgos algo más siniestros) liándose con la adolescente Mariel Hemingway en esta obra maestra. ¿Por qué no tienen futuro? Dejando aparte la
diferencia de edad, Isaac está condenado a perder irremisiblemente a
Tracy cuando esta se larga de Nueva York para estudiar en el Reino
Unido. Y le está bien empleado, porque se ha tirado todo el filme
jugando con el corazón de ella y de Diane Keaton, así
que auguramos que la jovencita encontrará en Londres a alguien de sus
mismos años que le guste y que la merezca. Lo sentimos por Isaac, pero
le esperan largos meses (¿años?) de soledad mirando al puente de
Brooklyn y escuchando la Rhapsody In Blue.
Rob y Laura (Alta fidelidad, 2000)
La pareja: Lo más inesperado de esta relación no es que Iben Hejle deje tirado a John Cusack en favor de ese inenarrable Tim Robbins con coleta, sino que haya aguantado tanto tiempo compartiéndole con su colección de discos. ¿Por qué no tienen futuro? Un momento, ¿estamos hablando de la misma Alta fidelidad que termina con Jack Black cantando una de Marvin Gaye mientras
la pareja protagonista se reconcilia? Pues sí, pero nos remitimos a una
opinión muy ilustre para expresar nuestras dudas sobre la felicidad
futura de Rob y Laura: la de Nick Hornby, autor de la novela original, quien dijo que "tenía sus dudas" cuando
se le consultó al respecto. Admitámoslo: los únicos amores verdaderos
en la vida de Rob son sus vinilos y sus listas de canciones, y tendrá
que hacer un esfuerzo de órdago para hacer hueco a alguien más en su
corazón, aunque se trate de la (presunta) mujer de su vida.
Elaine y Ben (El graduado, 1967)
La pareja: Tras dejarse seducir por Anne Bancroft (lo que, en estos tiempos, llamaríamos una MILF), Dustin Hoffman se lía con su hija Katharine Ross. Y parecía tonto... ¿Por qué no tienen futuro? El director Mike Nichols, particularmente
inspirado, dejó claro este detalle en la última imagen de la película:
tras haber reventado la boda sin amor en la que ella estaba a punto de
dar el "sí, quiero", Dustin y Katharine suben a un autobús... Y, cuando
todos esperábamos un romántico beso y un fundido a negro, el filme nos
despide con un largo e incomodísimo plano fijo en el que ambos se miran
nerviosamente mientras Simon & Garfunkel cantan a
"los sonidos del silencio". Si hay algo en lo que Elaine y Ben se
parecen, es en que ambos están extremadamente confusos y no saben lo que
quieren, ni de ellos mismos, ni del amor, ni de la vida en general. Y
construír una relación bajo esa premisa se nos antoja, cuanto menos,
imposible.
Gracias al filme de Spielberg, dos profesores universitarios hacen
que el estado de Mississipi ratifique la abolición de la esclavitud con
más de un siglo de retraso. Por YAGO GARCÍA
"¡Ya iba siendo hora!".
Cuando una película destaca por sus méritos artísticos, o
bate récords de taquilla, es habitual decir que ha hecho historia del
cine. Lo que no es tan habitual es que un filme tenga consecuencias en
la vida política de una nación, y menos aún que cambie un estado de
cosas jurídico y legal que se remontaba a 1865. Tras haber logrado lo
primero múltiples veces, Steven Spielberg puede alardear de lo segundo gracias a Lincoln: el visionado de la película sobre el presidente de EE UU, nominada a 12 Oscar y con Daniel Day Lewis de protagonista, ha provocado que el estado de Mississippi secunde
formalmente (y con casi siglo y medio de retraso) la Decimotercera
Enmienda de la constitución de su país, aquella que ratifica la
abolición de la esclavitud.
Resulta que, tras ver Lincoln, dos profesores universitarios llamados Ranjan Batra y Ken Sullivan investigaron sobre el asunto, y descubrieron que Mississippi era el único estado hasta la fecha que no se había sumado a dicha abolición.
Como relata la película de Spielberg, la aceptación de la Decimotercera
Enmienda no fue unánime en el año de su proclamación, con estados tales
que Nueva Jersey, Georgia y Delaware negándose a ratificarla. Por
supuesto, dichos estados cambiaron de parecer tras el fin del conflicto,
asumiendo el fin de la esclavitud a lo largo de muchos años. En 1995
(nada menos que 130 años después), Mississippi fue el último en dar el
paso... Pero no llegó a hacer este paso efectivo debido a un tecnicismo,
porque la votación de su asamblea legislativa no le fue comunicada al
gobierno federal. Un error que, tras el descubrimiento de Batra y
Sullivan, ha sido rápidamente corregido.
Por supuesto, estamos hablando sólo de un tecnicismo: la abolición de
la esclavitud no sólo está consignada en la constitución de Estados
Unidos, sino también en la ley federal, por lo que nadie podría soñar
con revivirla. Pero también se trata de un tecnicismo muy significativo,
porque Mississippi, un estado pobre y de políticas marcadamente
conservadoras, registró una larga y dura lucha contra el racismo
institucional, y muchas leyes discriminatorias (como la que prohibía el
matrimonio de blancos y negros) no fueron derogadas oficialmente en su territorio hasta finales del siglo XX.
Con esta victoria simbólica en uno de los bastiones del racismo sureño,
las sombras de Abraham Lincoln, y de muchos mártires por los derechos
civiles pueden descansar un poco más en paz.
Más concretamente, de la familia Skywalker-Solo. Descubre en esta
noticia el nuevo rumor sobre el regreso de la saga galáctica. Por YAGO
GARCÍA
Con Carrie Fisher (Leia Organa) y Mark Hamill (Luke Skywalker) prácticamente reenganchados a la saga, y con Harrison Fordpasando del "se lo está pensando" al "está en el ajo", Star Wars: Episodio VIItodavía tiene en ascuas a los fans debido a su posible argumento. Prácticamente no han trascendido noticias sobre el guión que prepara, Michael Arndt, y con un adicto a los rodajes ultrasecretos como J. J. Abramsal
frente del cotarro, es poco probable que estas lleguen hasta, por lo
menos, el año que viene. Pero, pese a todo ello, siempree podemos contar
con nuestras viejas amigas las filtraciones, y hoy nos ha llegado una
bastante sabrosa sobre la implicación de la familia Skywalker-Solo en el
argumento.
Un informe de la web Showbiz 411, que nos llega vía The Playlist, afirma que los nuevos episodios de Star Wars estarán protagonizados por los hijos de Luke, Han y Leia. Algo
que entronca bastante bien con la presencia de Hamill, Fisher y Ford,
por una parte, y con los rumores de que, en el nuevo episodio, Luke
Skywalker regentaría una academia para jóvenes Jedi en la luna Yavin IV. Ahora bien, los warsies con un buen conocimiento del Universo Expandido estarán ya empezando a arrugar la nariz.
¿Por qué? Os lo explicamos: en las secuelas de Star Wars en forma de novelas y cómics, nuestro ex-granjero de humedad favorito tiene un vástago, Ben, con su antigua enemiga y posteriormente amante Mara Jade. La princesa de Alderaan y el contrabandista, por su parte, generan una prole más numerosa: primero llegan los gemelos Jacen y Jayna (un papel, este último, adjudicado a Ellen Page por muchos fan posters de la saga)y después el pequeño Anakin Solo. Todo lo anterior da lugar a un culebrón con aprendizajes de la Fuerza, traiciones e incluso fratricidio... Que, según Lawrence Kasdan y otros, no se verá reflejado en los nuevos filmes, puesto que estos partirán de material escrito para la ocasión.
Así pues, como suele pasar, esta novedad abre nuevos interrogantes.
¿De qué forma reescribirán Kasdan y Michael Arndt a los descendientes de
Darth Vader? ¿Acabarán los guionistas recurriendo a
los personajes ya conocidos, sólo que alterándoles a placer? ¿Le
adjudicarán también un hijo -peludo- a Chewbacca? Y,
por último, ¿tendrán Luke, Han y Leia roles más o menos importantes, o
sus intervenciones se limitarán a cameos en los que ejercerán de jubiletas galácticos? Por supuesto, seguiremos informando...
Durante la ceremonia de los Goya celebrada el pasado domingo 17 de
febrero ocurrió un error en durante la lectura del premio a la mejor
canción – que finalmente fue a manos de Blancanieves.
El hecho ha sido bastante polémico y provocó muchos comentarios en
redes sociales y medios de comunicación, con dudas de lo que estaba
pasado.
La Academia ha enviado esta mañana esta circular intentado dar explicaciones.
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Madrid, 18 de febrero de 2013
La Academia de Cine quiere expresar públicamente sus disculpas a
Pablo Cervantes Gutiérrez, Pablo José Fernández Brenes y Víctor M.
Peinado, autores de la canción ‘Líneas Paralelas’, perteneciente a la
banda sonora original de Els nens salvatges (Los niños salvajes)
ante el error ocurrido durante la lectura del ganador en la categoría
Mejor Canción Original en la gala de los 27 Premios Goya celebrada en el
día de ayer.
Esta institución es plenamente consciente de que este hecho ha
provocado una enorme decepción a las personas afectadas, pero quiere
reiterar que se ha debido a un error humano y asume la responsabilidad
de lo ocurrido. En ningún momento ha habido ninguna irregularidad ni se
ha vulnerado el protocolo de votación y entrega de los premios.
A los presentadores, cuando salen al escenario, se les entrega el
sobre cerrado con el nombre del ganador y una cartulina en la que figura
el nombre de la persona que recogerá el premio en el caso de los
finalistas que no hayan acudido a la ceremonia. En esta última nota,
impresa en un cartón de igual tamaño que el que proclama el ganador,
figura el título de la película, el nombre del ganador y quién recoge
el trofeo.
Esta es una práctica habitual en la gala de los Goya y se ha venido
haciendo de esta manera en los últimos años para que, en el momento de
la entrega, la persona que recibe el premio sea correctamente
identificada por el público.
En el caso de la categoría Mejor Canción Original, y debido a la
lógica presión de una gala en directo, se leyó por error la cartulina a
la que hacemos referencia, en lugar de la que se encontraba dentro del
sobre lacrado. Al darse cuenta de la confusión, ambos presentadores
rectificaron inmediatamente y se leyó el cartón correcto, contenido
dentro del sobre de votación.
En cualquier caso, la Academia de Cine quiere dejar muy claros los siguientes hechos:
- En ningún momento el protocolo de custodia del sobre cerrado se
vulneró, de acuerdo con las normas del sistema de votación y entrega de
los Premios Goya, que garantizan el absoluto secreto y limpieza en el
sistema de elección de los ganadores.
- En las entregas de premios, solo existe un sobre cerrado en el que
se encuentra el nombre de la persona ganadora. La cartulina en la que se
encuentra el nombre de la persona que recoge el premio es entregada de
forma separada, pero es simplemente una información complementaria para
identificar a la persona que recogería el galardón.
- Que el error acontecido en el día de ayer se debió a una lamentable
confusión, comprensible en una gala en directo en la que se entregan un
total de 28 galardones en un programa televisado en el que intervienen
más de cincuenta presentadores y entregadores diferentes.
Departamento de Comunicación – Academia de las Artes y las Ciencias Cinematográfica de España
Empieza
la semana de los Oscar. Una cita que reúne el universo cinematográfico –
sobretodo la gran porción de la norteamericana – así como una nutrida
corte de cinéfilos. La ciudad de Los Angeles se prepara para esto y lo
hace con cinco días de “pre-parties” en las que todas las agencias,
medios y productores celebran este momento que tiene más de business que
de arte (al menos desde una perspectiva tradicional). Pero, ¿por donde
van los tiros de cara a los ganadores? Es una pregunta que este año –
más que en otros – es más complicada.
En el apartado técnico es donde más dudas y en eso nos vamos a
centrar en esta primera parte del reportaje. Es un año con muchos
títulos fuertes en aspectos técnicos – La vida de Pi, Lincoln y Los Miserables – aunque ninguno de ellos claro favorito a la mejor película. La vida de Pi ha tenido mucha presencia en los
premios de los sindicatos, su éxito y reconocimiento del poder visual es
importa, casi similar a Avatar, pero a la vez Lincoln también ha sido
uno de los films de mayor éxito este año y puede que en los premios la
balanza del peso del conjunto de la Academia le pueda dar alguna
victoria. Pero sí es cierto que Lincoln se perfila como seguramente una
de las perdedoras de la noche. Mejor Fotografía: Quizás uno de los premios técnicos más
importantes cada vez con la relevancia de tener a varios de los
nominados a la mejor película. En este caso la carrera perece estar
entre Claudio Miranda por La vida de Pi , Janusz Kaminski por Lincoln y Roger Deakins por Skyfall.
Deakins es el eterno nominado. Tras 9 nominaciones sin premio esta
décima está claramente en el aire. La contra es que el film de James
Bond, pese a enamorar no se lo tiene como un film premiable y esto le
irá a la contra a nivel general de la Academia. Kaminski es todo lo
contrario, con la mitad de nominaciones ya tiene dos premios. El
apartado visual de la película de Spielberg es seguramente donde todo el
mundo reconoce un gran mérito de director y director de fotografía.
Este podría ser su premio, pero precisamente este “poderío” visual es el
que le podría dar la victoria a Miranda y La vida de Pi. Mejor Montaje: Es una categoría en la que se observa una clara competencia entre Argo y Zero Dark Thirty
(La noche más oscura). La primera no solo tiene el aroma de la gran
ganadora – lo que será clave – sino que ha logrado el premio del
sindicato de montadores (Eddie Award). El caso de Zero Dark Thirty
es claramente un título “habitual” en lograr este tipo de galardón y a
priori, ante el tipo de cine de Bigelow este podría incluso ser un
cierto premio de “consolación”. Además para hacer más difícil la
predicción, el montador de ambas cintas es el mismo: William Goldenberg,
veterano montador, ya nominado en otras dos ocasiones en el pasado (Seabiscuit y The Insider). Mejor Música: John Williams ha escrito quizás la mejor
partitura del año, en especial entre las nominadas. Pero después de
cinco Oscar, pocos creen que el veteranísimo montador “merezca” otro
premio. Ante esto, Michael Danna por La vida de Pi se
coloca a la cabeza, no solo por su partitura sino por ya haber obtenido
el Globo de Oro y por estar en una película donde este elemento sonoro
ha tenido un protagonismo especial. Alexander Desplat (por Argo)
tampoco se queda corto con opciones en este premio, pero por desgracia
el compositor francés pese a sus 5 nominaciones nunca parece partir como
favorito. Mejor Canción: La mejor canción es siempre un misterio que pocos llegan a entender. De momento la canción de Adele para Skyfall
ha ganado el Globo de Oro, pero quizás este aspecto de gran nombre de
la música pop actual la deja fuera de lo que la Academia quiere premiar.
De momento sería bastante “lógico” que un tema como “Suddenly” de Los Miserables,
obtuviera este premio. El papel de esta canción en la película es clave
y en el fondo se premia el papel de la canción en la película no la
canción en si de forma independiente. Veremos que pasa. Mejor montaje sonoro y efectos sonoros: Según el sindicato de técnicos de sonido la victoria debería caer en manos de La vida de Pi, pero es posible que Skyfall pueda rascar uno de los dos premios o incluso Argo podría tomar la delantera en esa sensación que gran parte de la Academia acabará dando todas las X donde pone Argo. Mejor vestuario: El español Paco Delgado sería seguramente el gran favorito de esta categoría por Los Miserables.
Su trabajo es vistoso y de elevada calidad, y la película tiene en
estos apartados de arte un nombre y relevancia especialmente elevados.
Su gran rival es Anna Karenina (vestuario por Jacqueline Durran). El trabajo de Karenina es también muy vistoso y seguramente lo más alabado de esta fallida película. Mejor Dirección Artística: En este caso, a parte de Anna Karenina, los dos grandes títulos parece que son La vida de Pi y Los Miserables.
La primera se ha hecho con premios del sindicato. En este caso el film
de Ang Lee podría llevar el “tigre” al agua por el mencionado aroma –
como el pasado año con Hugo – de estar ante un film muy premiable para este tipo de categorías. Mejor maquillaje: Aquí la gran ganadora debería ser El Hobbit. Al contrario que Hitchcock y Los Miserables,
el trabajo en la superproducción de Peter Jackson es verdaderamente
espectacular y merecedor de un reconocimiento así. La contra es la
sensación que ha dejado este film y en parte que ya fue premiado en la
anterior categoría. Pero no la Academia no tiene mucho más donde elegir. Mejores efectos visuales: Otra vez La vida de Pi
pero en este caso pocos dudan que este será su premio. Ya ha sido
recompensada por esto y es seguramente uno de los elementos narrativos
claves de la película. De hecho, es singular que respecto al resto de
candidatos, Pi es la que tiene menos – 690 vs los más
de 1.200-2.000 que tiene los otros – pero siendo muchos de ellos,
grandes retos narrativos. De los otros candidatos, Los Vengadores y Prometheus
solo aspiran a premio en esta categoría y apenas se han visto esfuerzos
por sus responsables por hacerse con el premio. El caso de Blancanieves pese a optar al vestuario tampoco parece rival. Solo El Hobbit tiene opciones a quitarle el premio al film de Lee.
Fin de semana menos espectacular de lo que se podía esperar con la llegada de la nueva Jungla de Cristal.
Los 7,1 millones de € recaudados son un 9,5% menos de lo visto hace un
año, pero con todo se observan buenos datos de otras películas,
especialmente en algunos mantenimientos. Mamá vuelve a dominar el panorama lo que sigue siendo un elemento más que importante para la industria española.
Fox no ha podido convencer a la masa con la nueva aventura de John McClane y se queda en un poco emocionante segundo puesto. Un buen día para Morir recauda
en su primer fin de semana 1,37 millones de € desde 459 pantallas, lo
que deja un pobre promedio de 2.885€. El dato se queda a la mitad de lo
visto en el cuarto capítulo hace seis años y la caída de espectadores es
espectacular.
Se esperaba que en este caso de gran evento el interés por este cine
de acción fuera a ser mayor que en otros títulos similares pero menores
vistos el pasado año, pero no ha sido así. Seguramente la competencia
con otros títulos ha sido un factor clave que le ha restado más interés
del que se podía esperar. Los seis años de margen con el anterior
capítulo y la mala recepción de crítica y comentarios tampoco deben
haber favorecido. El dato del estreno se coloca más en la línea de Jack Reacher que de Misión: Imposible 4 y tampoco parece que las próximas semanas le vayan a dar mucho más gas.
Comprando con el mercado americano, el dato español de La Jungla 5
corresponde a un 7%, y tampoco ahí ha sido todo el éxito que se
preveía. De momento en España es probable que el dato final se quede en
los 3,5-4 millones. Jack Reacher con 1,1 millones de € en su estreno no ha podido llegar ni a los 3 millones en su paso por nuestra cartelera. Mamá por su cuenta repite en lo más alto con un dato
de 1,65 millones de € y ya más de 5 millones en 10 días. La cinta
presenta un moderado descenso del 39%, nada negativo valorando tanto el
género, como su buen estreno. En este punto hay que deducir un elemento
de positivos comentarios que le hayan dado alas a seguir siendo una
primera opción para un importante y variado tipo de espectadores.
Ante este buen dato de segunda semana las expectativas de la película podrían colocarse ya por encima de los 8 millones de €.
Volviendo a los estrenos, los otros dos títulos fuertes de la semana eran el thriller La trama y la comedia Un plan perfecto.
La primera ha tenido un estreno moderado pero correcto, y la segunda ha
interesado más bien poco, en ambos casos pueden haberle “robado” algo
de interés a La jungla en especial entre audiencias maduras y cinéfilas, las dos tenían ciertos elementos que atraían a este sector de espectadores. La trama estrena con 660.000€ en 261 pantallas,
dejando una media de 2.530€, la tercera mejor de la semana. DeA Planeta
logra convencer con un título que no fue bien en Estados Unidos pero que
por concepto de género y casting tenía más opciones en los mercados
europeos. De momento pese a no tenerlas todas a nivel de crítica, si es
de esperar que al menos pueda tener un aguante como para acercarse al
máximo a los 2 millones. Un plan perfecto se queda en los 365.000€ en 281
pantallas, dejando un mal promedio de 1.300€ por sala. En este caso las
grandes debilidades que tenía el film estaban precisamente en la
directísima competencia que tenía con títulos como El lado bueno de las cosas
– precisamente distribuida también por eOne – y otros títulos de cierto
nombre. Los elementos de prestigio que acompañaban al film – los
hermanos Coen en el guión y el casting – no eran suficientes como para
atraer a la masa, algo similar a lo visto con Hitchcock. En este caso es de esperar que el techo de la película vaya poco más allá del millón.
La comedia nominada a ocho Oscar, El lado bueno de las cosas,
vuelve a triunfar como un excelente descenso del 19% respecto a la
anterior semana y suma otros sólidos 813.500€. Su total es de 5,7
millones de € para eOne y sigue apuntando más allá de los 8 millones de
€. Tiene cuerda ya que se espera que este fin de semana pueda rascar
algún premio y así mantenerse otros dos o tres fines de semanas fuerte. Django cae un 38%, mejorando el descenso de la
pasada semana y colocando su total ya casi en los 9 millones de €. Nada
mal y con puntos para superar los 10 en breve.
El estreno de la pasada semana, Gangster Squad, cae
un agudísimo 57% consecuencia de estrenos que le robaban mucha
relevancia y afectada por un grave desinterés. Solo suma 295.000€ en
segunda semana y su total se queda en los 1,22 millones de €, con pocos
puntos para ir más allá de los 1,6 millones.
Disney sigue viendo como su Rompe Ralph! al no tener
competencia de nadie sigue presentando los mejores mantenimientos. Cae
solo un 15% y se coloca en los 8,6 millones. Superará los 9 millones.
Cerrando el top10 están El vuelo, que ya roza los 3 millones, y Lincoln, que en breve superará los cinco millones, siendo un resultado más que satisfactorio en España.
Fuera de los más vistos encontramos el estreno de Dos días en Nueva York
que como era de esperar, su desinterés ha provocado un estreno bastante
pobre: 70.600€ desde 62 cines y una media por sala de solo 1.140€. No
tenía muchos elementos a su favor, y la competencia de No y Amor era elevada.
El paso de la comedia romántica de Julie Delpy en mercados
internacionales y festivales ha sido poco relevante como para atraer a
la masa de audiencia de este cine, que si tenía que elegir algo
seguramente hubiera puesto antes a Las ventajas de un ser marginado,
que pese a sus malos datos a nivel masivo es un producto de alto
interés en audiencias cinéfilas y urbanas. La película de eOne –
distribuida de forma sobredimensionada en 180 pantallas – cae hasta los
78.000€ en segunda semana, y su total es de 314.000€. Amor esta semana supera el millón de € – le ha costado seis semanas – mientras que No,
que cae un 25%, suma ya 118.000€ desde 32 pantallas. Estados películas
de Golem tiene mucho que ganar o perder este domingo con los Oscar.
Este pasado domingo se anunciaron los ganadores de la XXVII entrega de los premios Goya.
Fue una gala en la que primó el repartir los premios para dejar
contentos al mayor número posible de artistas, pero eso fue algo que no
tuvo especial importancia en las categorías dedicadas a los mejores
cortometrajes del año. En el apartado animado triunfó ‘El vendedor de humo’ (Jaime Maestro, 2012), obra que ahora os traigo para que podáis valorar por vosotros mismos.
En principio no tendría mayor importancia que lo ya casi anecdótico
de haber conseguido llevarse el Goya para casa, pero en él puede verse
una esperanza en el futuro de la animación en nuestro país. ¿El motivo?
Pues porque ‘El vendedor de humo’ fue realizado por completo por alumnos
de la escuela valenciana de cine PrimerFrame, donde Jaime Maestro,
director del cortometraje, ejerce como profesor. Y es que ‘El vendedor
de humo’ surgió como trabajo de final de curso, por lo que no es
descabellado pensar que los implicados en el mismo aún tienen mucho por
mejorar y que, con los medios adecuados, pueden ayudar a que maravillas
como ‘Arrugas’ (Ignacio Ferreras, 2011) o grandes éxitos como ‘Las aventuras de Tadeo Jones’ (Enrique Gato, 2012) dejen de ser anomalías dentro del cine español.
Como ya habréis podido ver, ‘El vendedor de humo’ sigue a un
misterioso comerciante llega a un apartado pueblo, pero los habitantes
del lugar no muestran especial interés en las proezas de las que es
capaz hasta que ayuda a un niño. Todo cambiará a partir de entonces,
pero es posible que sus obras no sean tan maravillosas como parecen a
simple vista. No es que sea un cortometraje que vaya a marcarnos, pero
sí que ‘El vendedor de humo’ es una pieza muy simpática con un buen
acabado visual que bien merece seis minutos de nuestro tiempo, ¿o no?.
Ya hay protagonista (humano) para la nueva entrega de la popular
franquicia iniciada con el ‘El planeta de los simios’ (‘Planet of the
Apes’, Franklin J Schaffner, 1968). Jason Clarke
encabezará el reparto de la continuación de ‘El origen del planeta de
los simios’ (‘Rise of the Planet of the Apes’, Rupert Wyatt, 2011), que como recordaréis va a dirigir Matt Reeves.
Al
actor australiano lo habéis podido ver recientemente en ‘Sin ley’
(‘Lawless’, John Hillcoat, 2012) y ‘La noche más oscura’ (‘Zero Dark
Thirty’, Kathryn Bigelow, 2012), donde curiosamente interpretaba a un
agente de la CIA que cuidaba a unos monos
—una imagen muy simbólica ya que era el encargado de interrogar y
torturar a los prisioneros—. También ha intervenido en títulos como
‘Generación robada’ (‘Rabbit-Proof Fence’, Phillip Noyce, 2002), ‘Death
Race’ (Paul W.S. Anderson, 2008) y ‘Enemigos públicos’ (‘Public
Enemies’, Michael Mann, 2009). La película de Reeves
será su primera gran oportunidad en el cine tras un año estupendo donde
ha demostrado su talento con papeles secundarios. Por cierto, creo que
merecía la nominación al Oscar por su trabajo en el film de Bigelow, en
lugar de Robert de Niro, que no hace nada especial en ‘El lado bueno de
las cosas’ (‘Silver Linings Playbook’, David O. Russell, 2012).
El fichaje de Clarke
parece descartar de momento que vaya a volver James Franco, aunque
podrían contar con él para alguna escena o un cameo. Sí está confirmado
que regresará Andy Serkis para encarnar nuevamente al simio César. La historia de esta nueva entrega, que se titula ‘Dawn of the Planet of the Apes’
(“el amanecer del planeta de los simios”), tiene lugar quince años
después de los acontecimientos de la anterior y se centra en un grupo de
humanos que tratan de sobrevivir al dominio de la nueva especie
liderada por César. Mark Bomback firma la versión
definitiva del guion y el rodaje debería comenzar esta próxima
primavera. Twentieth Century Fox espera estrenar el film el 23 de mayo de 2014.
Cualquier persona que haya tenido relación con 'Star Wars'
tiene por fuerza que ser consultada sobre su posible vuelta a la saga.
Uno de ellos y además alguien muy importante es John Williams,
compositor de una de las piezas más reconocibles del siglo XX como es el
tema original de Star Wars. Durante un concierto con la fundación de
Jóvenes Músicos, el compositor se dirigió al público en los siguientes
términos justo antes de interpretar el clásico tema musical.
"¡Ya iba siendo hora!".
