viernes, 22 de abril de 2011

‘The Help’, tráiler de un bestseller hecho cine con aroma a Oscar

La temática de ‘The Help’ es la clásica que le encanta a la Academia de Cine de Hollywood.

Y además, Tate Taylor, el director y guionista de la película, se ha rodeado de una serie de actrices para engrosar su reparto a las que la palabra ‘nominación’ no le vendría de nuevas. Si el estreno de esta película se hubiera programado para la época del ‘ojeo’ de los Oscars no me hubiera extrañado la jugada, aunque en USA lo hará en pleno verano, el 12 de agosto.

Taylor ha contado con Emma Stone, Viola Davis, Bryce Dallas Howard, Allison Janney y Sissy Spacek, entre otras, para llevar a la gran pantalla el bestseller de Kathryn Stockett del mismo título cuya trama se desarrolla en el Mississippi de los años 60.

Sinopseando, el filme nos cuenta la historia de Skeeter (Stone), una chica de la buena sociedad sureña que regresa de la universidad dispuesta a convertirse en escritora.

Pero decide entrevistar a las mujeres negras que se han pasado la vida trabajando al servicio de las grandes familias sureñas. Esto sembrará una verdadera revolución en su círculo de amistades y en una pequeña localidad de Mississippi.

Aibileen (Davis), la criada y mejor amiga de Skeeter, es la primera en sincerarse para escándalo de sus amigas de la cerrada comunidad negra.

A pesar de que Skeeter corre el peligro de perder a sus antiguas amistades, ella y Aibileen siguen trabajando en el proyecto y logran que más mujeres se atrevan a contar sus historias. Porque lo más curioso es que tienen mucho que decir.

A medida que avanza la historia se van desarrollando amistades insólitas y surge una nueva hermandad femenina. Pero antes, los habitantes de la ciudad también tendrán que decir algunas cosas al verse arrastrados de forma irremediable a un mundo que está a punto de cambiar para siempre.

Buen material de base y plantel solvente con el que dar la campanada. Lo dicho, aroma de Oscar.

» Ver tráiler de ‘The Help’

Vía:tu blog de cine

James Cameron, Guillermo Del Toro, Peter Jackson…23 directores en contra de la tele

camerond

‘El sistema de televisión de DirecTV es un servicio de difusión directa por satélite en vivo con sede en El Segundo, California, que transmite televisión digital incluidos canales de audio y radio por satélite a los televisores fijos de Estados Unidos y América Latina en que los clientes estén suscritos y que cuenten con un decodificador y una antena parabólica de Directv receptora’.

Pues bien, este servicio al que acceden 18 millones y medio de suscriptores ha puesto en pie de guerra a lo más granado de Hollywood. Tampoco son tantos en una población de 308 millones de habitantes, pero los suficientes para restar ingresos, y ay no señor mío, el dinerito no me lo tocas.

DirecTV ha anunciado que a partir del 21 de Abril lanzarán un nuevo servicio llamado Home Premiere por el cual sus clientes (esos 18.5 millones) podrán ver una película por 29.99 dólares y durante 48 horas sólo 60 días después de su estreno en los cines. Esto es posible gracias a que el canal ha firmado un contrato con Warner Bros, Sony, Universal y 20th Century Fox.

En resumidas cuentas, podrán ver ‘The Dark Knight Rises’ en calidad insuperable hacia el mes de Septiembre, dos meses después de su debut en las salas y cuando, seguramente, aún esté generando dinero en taquilla.

Esto no ha gustado un pelo a los mejores y mayores realizadores de los USA y son 23 los que han firmado una carta abierta contra DirectTV incluyendo James Cameron, Peter Jackson, Michael Bay, Kathryn Bigelow, Guillermo del Toro, Roland Emmerich, Shawn Levy, Michael Mann, Todd Phillips, Brett Ratner, Adam Shankman, Gore Verbinski, Robert Rodriguez, Antoine Fuqua y Robert Zemeckis. Vamos, los que ingresan los mayores taquillazos a los Estudios.

En este modelo de distribución, películas nuevas pueden verse en casa mientras esten en exhibición en los cines. Ahora mismo, el margen entre estreno y su retirada de los cines está en unos 4 meses (132 días).

Como parte crucial de un negocio que el año pasado ingresó cerca de 32 billones de dólares en todo el mundo, en la comunidad creatica creemos que es el momento en el que los Estudios y las compañías de television por cable sepan que el lanzamiento premium de video en casa invade el margen actual de estrenos que podría dañar de forma irrevocable al modelo de nuestra industria.

Los grandes Estudios están esforzándose en recuperar las pérdidas de la decrecientes ganancias de los DVD. Los alquileres de bajo coste y suscripciones estan minando el precio de los alquileres en DVD y ventas de los mismos, pero esas perdidas no se recuperan importando el modelo al margen del cine y que canibaliza las ventas de entradas.

No se equivoquen. La historia nos ha enseñado que las ganancias no pueden ser mantenidas en el mercado del video. Lo que se vende ahora por 30 dolares estará a 9,99 en unos pocos años. La canibalizacion de la carrera en cines de un film en favor de un estreno prematura en casa nos lleva a millones de dólares en pérdidas. Algunos cines incluso cerrarán.

Más lejos, lanzar una copia digital de nuevas peliculas para ver en casa incrementarán los problemas de piratería, no la resolverá.

Como lideres de la comunidad creativa, pedimos que nuestro Estudios no destruyan el sistema actual - y exitoso- que empuja a los amantes del cine a ver películas en el escenario más rentable y óptimo: las salas de cine.

Uhmmm, ‘lideres de la comunidad creativa’. Los líderes taquilleros sí, pero pocos directores de Oscar veo yo en la lista de 23. Algún bitánico me falta…

No sé, pero me da que el comunicado se lo van a pasar en Hollywood por donde DirectTV emite. Veremos las cifras a partir de este verano, cuando ‘Thor’ o ‘Transformers 3′ se puedan ver a primeros de Julio y finales de Agosto en casitas yanquis.

Via:Tu blog de cine

‘X-Men: First Class’, nuevo trailer internacional. Promoción incesante para terminar de convencernos



Vía:Tu blog de cine

LA PELIS DE VERANO 2011: MAYO

Os pongo la relación de peliculas que se estrenaran en USA este verano y que proximamente se estrenaran en nuestro pais.

MAYO

6 de Mayo

13 de Mayo




20 Mayo


26 Mayo


* Kunfu Pand 2
* The Hangover 2

27 Mayo
The Tree of Life

Vía:Imdb

The Change-Up', cartel y tráiler

¿Quién dice que los hombres no cambian?

Hace poco más de un año os informaba sobre una comedia que al contar con Ryan Reynolds y Jason Bateman como protagonistas, podía resultar interesante. Hoy sin embargo estoy casi seguro (99%) que verla será perder el tiempo. Universal Pictures ha lanzado recientemente el cartel y el tráiler “red band” (para mayores de edad) de ‘The Change-Up’, dirigida por David Dobkin (‘Los rebeldes de Shangai’, ‘De boda en boda’, ‘Fred Claus’), cuyo estreno está previsto para el próximo 5 de agosto, al menos en Estados Unidos.

Escrita por Jon Lucas y Scott Moore (‘Resacón en Las Vegas’, ‘Como en casa en ningún sitio’), ‘The Change-Up’ es una de esas películas que a Hollywood le gusta sacar de vez en cuando en las que dos personajes intercambian sus cuerpos. En este caso, porque ambos pidieron el deseo mientras orinaban en una fuente. Y ya está. Mitch (Reynolds) es un eterno soltero que vive el momento, mientras que Dave (Bateman) es abogado, marido y padre; un día, sus mentes cambian de cuerpo y entonces deben vivir la vida del otro, con todas las ventajas y los conflictos. Hasta que falten diez minutos para que acabe la película y se descubra que todo fue un sueño, o vuelvan a pedir el deseo en el mismo sitio y a la fuente le dé la gana de deshacer el hechizo. Qué más da. Leslie Mann, Olivia Wilde, Mircea Monroe, Dax Griffin y Alan Arkin completan el reparto.

PD: Siguen sin concretarse detalles sobre la anunciada película de ‘Arrested Development’. En teoría hay un guion, y querían estrenarla en 2012.





Vía | Impawards

El montaje cinematográfico: cortar, pegar, construir, mostrar

Algunos dicen que el cine es la suma de todas las artes previas. Tan superficial y pretenciosa afirmación (recordemos que la lista “oficial” de artes sería la siguiente: la arquitectura, la escultura, la pintura, la literatura, la danza y la música como las bellas artes…aunque antiguamente las bellas artes: eran arquitectura, escultura, pintura, música (que incluye teatro), declamación (que incluye poesía) y danza...), conlleva, según ciertos analistas, otra afirmación. Y esa otra afirmación es que, siendo el cine la suma de todo eso, aporta una disciplina única e intransferible a cualquier otra labor artística, que a su vez le da el derecho de llamarse arte: el montaje. Un tal Ricciotto Canudo inventó en 1911 el término “séptimo arte” y la expresión cuajó mucho más de lo que quizás él mismo esperaba. Pero la fotografía, a la que también se considera un arte superior (esto es, que se disfruta con los sentidos superiores, la vista o el oído) se inventó y comenzó a desarrollarse antes que el cine. Y, como hemos visto, hizo posible el cine, de modo que el séptimo debería ser la fotografía. Pero tampoco el montaje es único en el cine.

Si por montaje se entiende la selección y ordenación de un material previo, ya la música (quizá el arte más grande de todos, porque no necesita de ninguna explicación intelectual) posee un montaje. Si, quizá, por montaje se entiende una estructura o un andamiaje interno, en otras palabras unos cimientos, casi la totalidad de las artes poseen ese andamiaje. Evidentemente, ningún arte más que el cine precisa de pequeños trocitos de su material, pegados entre sí, para un continuo espacio-temporal. ¿Ninguno? Bien pensado, la literatura, en su cortar y pegar palabras, frases y párrafos, tiene mucho de eso: pequeños trocitos colocados en un fluido contínuo o paralelo o abstracto. Sin embargo, el montaje de cine sí detenta una peculiaridad que no siempre se analiza como se debería: el sonido. La disciplina del montaje de cine, muchas veces sobrevalorada (en mi opinión, no deberían entregar un Oscar a esta profesión, ya explicaré por qué), es como la fotografía: tan técnica como artística, y de ella depende en gran medida que nos creamos la gran mentira que es el cine. Aunque, en el fondo, el montaje es la gran mentira.

Un poco de historia

Las filmaciones de los Lumière o de otros pioneros que se limitaban a capturar el paso de un tren o la salida de los trabajadores de una fábrica carecían de montaje porque simplemente registraban un hecho hasta que se terminaba la película. Con el diseño de carcasas más grandes, que aportaban mayor capacidad de almacenamiento, fue posible registrar muchos más hechos o secuencias de hechos. Poco a poco la necesidad de un montaje externo, de una ordenación y selección de lo filmado, se hizo patente. Por otro lado, en la ficción, era necesario retirar de la copia final las “colas” de inicio y de fin de secuencia. El papel de un montador se iba haciendo, pues, más y mas imprescindible. Para ese puesto se inventó la mesa de montaje con moviola en 1924, pero ya antes, en 1915, el visionario David W. Griffith había demostrado hasta dónde podía llegarse con un montaje expresivo, gracias a la suma de todas sus ideas e investigaciones narrativas, con ‘El nacimiento de una nación’ (‘The Birth of a Nation’). En esa película se desarrollaba como nunca hasta la fecha la noción de montaje en paralelo. Es decir, dos hechos que compartían una misma unidad de tiempo pero distinta localización. Pero también otros conceptos como el plano detalle y el punto de vista:

Sí, aquí los negros (actores blancos con la cara pintada, obviamente) son muy malos, y los heróicos miembros del Ku Klux Klan acuden a salvar a los mártires blancos. Una acción (la defensa en la cabaña) se superpone a otra en el tiempo (la cabalgada hacia esa cabaña) en un contínuo que aceptamos como tal, aunque es una mentira: no se puede asistir a dos hechos en dos lugares diferentes si ocurren en el mismo tiempo. En aquella época muda, otro importante “esteta” del montaje fue el ruso Eisenstein, tan tendencioso, teatral y exagerado como Griffith, pero que a su vez inventó otro estilo de montaje: el ideológico. Para Eisenstein el cine era el conflicto entre dos o más imágenes, y sentía la necesidad de dejarlo palpable para el espectador. Así, en ‘El acorazado Potemkin’ (‘Bronenosets Potyomkin’, 1925), podemos ver un plano medio en el que un oficial señala un jamón en perfecto estado, y un plano detalle en el que vemos más cerca ese jamón y al que parecen haberle brotado gusanos. Eisenstein hacia del montaje una herramienta más mentirosa que nunca, insertando elementos en su montaje analítico que no estaban antes de un corte, e inventando el cine ideológico, basado en planos-clave. Acertijos visuales. Ese en concreto “expresaba” lo podrida que estaba Rusia…

A grandes rasgos, se diferencian, al menos desde un punto de vista académico, cuatro grandes tipos o estilos de montaje:

Narrativo o Clásico: Que cuenta los hechos de modo lógico y coherente, aunque haya saltos temporales hacia delante o hacia atrás. El montaje más invisible. El que menos llama la atención (en teoría…) sobre sí mismo.

Expresivo: Cuando de él depende el ritmo externo de los acontecimientos. Rápido en la acción, lento en lo intimista.

Ideológico: Cuando manipula las emociones y las ideas basándose en asociaciones de ideas, en símbolos, en planos-clave.

No narrativo o Poético: El que propone una puesta en escena no narrativa, sino anímica, psicológica y espiritual.

Y luego, dentro de una secuencia, se distingue entre dos tipos de montaje más: el llamado Analítico:, que fragmenta la secuencia en cientos de planos y detalles, y el Sintético, que busca planos más amplios y mayor movimiento dentro de ellos.

Pero todo esto no son más que convenciones. En otras palabras: esquemas. Y, como todo esquema, si se trata de arte, enseguida queda inservible y falso. Podemos decir que en el cine clásico se utilizó, sobre todo, el primero, que buscaba ser invisible, y que a día de hoy se sigue empleando, tratando de cortar un plano siempre que un movimiento lo permita, para que de esa forma el corte pase más desapercibido. Para muestra un botón:

Aquí Coppola corta en movimiento y comienza un plano ya en movimiento la mayoría de las veces. No hay montaje expresivo. Es decir, no utiliza el montaje para aumentar la tensión. Simplemente deja que sucedan las cosas. Otros, sin embargo, como David Fincher, son bastante diestros en el uso del montaje expresivo y no se pasan demasiado:

Nótese, que diría un profesor, cómo Fincher aprieta el acelerador en el montaje cuando llega la violencia o la tensión, y lo relaja cuando hay una conversación más tranquila. En cuanto a un montaje más poético, Europa y Asia lo han practicado más, aunque no necesariamente mejor que en Estados Unidos. Directores como Bresson, Bergman, Tarkovski, Buñuel, Ozu, Kurosawa… Este último, aún en sus películas más de aventuras, siempre empleaba un montaje poético. Es decir, no narrativo. Directores como Gus Van Sant, Terrence Malick o David Lynch emplean a veces el expresivo o el clásico, pero tienden siempre hacia un montaje poético. Pero también todo depende de la puesta en escena, aunque a menudo muchos han intentado arreglar en el montaje lo que no supieron o no pudieron con la puesta en escena. Por esto, más que por estilos de montaje, hay dos grandes tipos de directores. A saber:

1. Los que filman lo justo (más lo que necesiten para cubrirse), y por lo tanto de su material se puede deducir una sola película final. Máximo dos. Estos directores suelen filmar planos muy largos o planos-máster (concepto en desuso), y luego planos más cortos. Planifican y dirigen con un montaje muy determinado en la cabeza. Hablamos de gente como John Ford, Clint Eastwood, John Carpenter, Truffaut (que filmaba la escena a pedazos, es decir, hasta determinado punto un tiro de cámara, a partir de ese punto, otro tiro de cámara…), Kurosawa. Algunos pueden filmar mucho material, caso de este último una vez más, pero porque buscan algo muy específico, no porque luego vayan a jugar con él en la sala de montaje.

2. Los que filman miles de metros de película, sin un montaje preestablecido. Por lo tanto, de ese material se pueden deducir cuatro, cinco, seis películas… El caso extremo es Kubrick, que se pasaba meses o años en la sala de montaje, con decenas de miles de metros de celuloide (recordemos que, usualmente, trescientos metros son diez minutos de material). Pero hay muchos otros como Eisenstein y todos los que creen que el montaje es la parte más decisiva de la elaboración de una película.

En general, se suele decir que el ritmo de una película lo crea el montaje. En mi opinión esto es completamente equivocado, aunque por el uso y abuso que algunos llevan a cabo con esta herramienta, bien podría parecer que tienen razón. En realidad el ritmo existe a pesar del montaje, y no a causa de él. Los más grandes directores cortaban y cortan porque no tienen más remedio: bien sea por limitaciones de luz, de espacio o de tiempo. Otros cortan porque la dramaturgia clásica se lo exige. Ford, sin ir más lejos, nunca fue un director clásico (por mucho que se empeñen), y sus planos siempre eran tan prolongados en el tiempo como se lo permitía el rodaje en estudio y con la iluminación de la época. Sus cortes son muchas veces poéticos, es decir, ajenos a toda vocación narrativa y adeptos a una representación del mundo mucho más intuitiva. Lírica.

¿Qué se podría considerar un buen montaje?

El montaje no es más que un truco. Lugares comunes como el encadenado para expresar un salto temporal no muy largo, y el fundido a negro para expresar un salto temporal mayor, se han utilizado miles de millones de veces. Por eso mismo, ya no son válidos. Porque no hay dos caracteres o dos formas de mirar idénticas en todo el mundo. Sería bueno que cada cineasta buscar una forma de montaje propia, intransferible, y no se dedicara a repetir trucos tan manoseados. Por otra parte, siendo un medio tan visual, es muy potente manipulando la mente del espectador. En el famoso Efecto Kuleshov se unían imágenes dispares a un rostro impertérrito, creando sensaciones que no estaban ahí:

Cuando se vio por primera vez, los espectadores creyeron que el sujeto experimentaba gula, compasión y lujuria. Y era el mismo plano repetido. Si algo tan sencillo es posible, y nos engaña completamente, podemos imaginar hasta qué punto el montaje es capaz de convertir una pobre puesta en escena en algo falsamente dinámico y emocionante. ¿Qué se suele premiar o considerar bueno? Montajes a menudo vistosos, con varios puntos de vista en algunas secuencias, alternancia de ángulos a gran velocidad, de formatos, de estilos… En poquísimas ocasiones, estos montajes superlativos son realmente importantes estéticamente. A bote pronto, sólo se me ocurre el caso de ‘J.F.K., caso abierto’ (‘JFK.’, 1991), seguramente la mejor película de Stone, el mejor trabajo de Costner y el mejor montaje de los famosos Joe Hutshing y Pietro Scalia:

Se alternan, con sublime talento, imágenes de archivo, imágenes recreadas, un discurso moral, un relato emocionante, varios formatos, varios estilos. Alucinante. Pero demasiado a menudo otros intentan este tipo de montaje, ganan el Oscar, y no hacen más que un cine falso. Ejemplos miles y no hace falta darlos. En mi opinión, si el montaje es importante y ha dejado de ser tan falso como en la época muda, es por el sonido, valga la redundancia. Con él ya no es posible manipular tanto con la imagen, pues el sonido del mundo establece una realidad asumida por el espectador como tal. Y por eso, el cine moderno, que ya tiene muy en cuenta el sonido, monta muchas veces en base a él y a la música. La apertura de ‘J.F.K’ es plenamente musical, pero otras secuencias lo son también sin música externa en la que apoyarse:

El montaje de ‘Nostalghia’ (Tarkovski, 1983), jamás sería premiado en un festival o en los Oscar, pero es de una belleza y una perfección asombrosas. En los planos de Tarkovski vive el tiempo y un concepto espacial muy determinado: sentir que uno va entrando poco a poco en el plano y que existe en él, no como una pantalla plana, sino como una realidad tridimensional. Esto lo logra a través del montaje (de inspiración musical) y de la puesta en escena que provoca ese montaje y no otro.

Pero el premio al mejor montaje que entregan en algunas academias debería desaparecer, o al menos fusionarse con el de montaje de sonido (tal como dirección artística y vestuario deberían fusionarse en Mejor Diseño de Producción…), pues imagen y sonido son indisolubles, y no se entienden el uno sin el otro. Pero es el director, su puesta en escena, la que propicia y da lugar a un buen montaje de imagen y sonido, y no al revés. Por lo que premiar o por lo menos alabar un buen montaje, es alabar la visión del director.

Vía:blog de cine
Texto:Adrian Massanet

Paul Rudd en 'This is Forty', de Judd Apatow, y 'The Perks Of Being A Wallflower'

Aunque ya he puntualizado varias veces que Judd Apatow me gusta más como productor y aglutinador de personas con talento que como director, no dejaré de ver lo que prevé estrenar en verano de 2012: ‘This is Forty’, un spin off de ‘Lío embarazoso’ (‘Knocked Up’), en el que se retomará a los personajes de Leslie Mann y Paul Rudd. En el reparto acompañarán a estos dos actores Megan Fox, quien ya está confirmada, y Albert Brooks, cuya participación aún no es más que un rumor, pero que, de confirmarse, interpretaría al padre del pesonaje de Rudd.

No se ha desvelado mucho del argumento, pero el título parece decirlo todo, especialmente, si tenemos en cuenta que Apatow suele tirar de vivencias personales o reinterpretaciones autobiográficas para confeccionar sus guiones. Mann, protagonista del film y esposa de Apatow, cumplirá 40 cuando se estrene la película y tanto el director como el actor, Judd y Rudd, ya han entrado en esa década. Por lo tanto, está claro que la crisis de mediana edad estará presente de una forma u otra.

Paul Rudd, además, se ha unido a otro proyecto, titulado ‘The Perks Of Being A Wallflower’ («las ventajas de ser una flor de papel pintado»), la adaptación de Stephen Chbosky de su propia novela, que se ha calificado como una profunda historia de maduración. Chbosky también dirigirá esta crónica de un adolescente, tímido y con pocos amigos, que cuenta en sus cartas sus experiencias con el sexo, las drogas y el ‘Rocky Horror Picture Show’. Emma Watson, Nina Dobrev, Mae Whitman y Logan Lerman serían el resto de los intérpretes.

Vía | Coming Soon.

Vía:Blog de cine