miércoles, 20 de marzo de 2013
Con ustedes el caracol más rápido del mundo: Tráiler de 'Turbo'
Como era de espera coincidiendo con el estreno en cines esta misma semana de 'Los Croods', DreamWorks Animation y Fox han lanzado el tráiler del que será su siguiente estreno conjunto, 'Turbo'.
La cinta, que llegará a los cines de todo el mundo el próximo verano,
nos contará las andanzas de un caracol común de jardín (voz de Ryan
Reynolds) que sueña con convertirse en el más rápido de todos los
caracoles del mundo... algo a lo que optará tras un extraño accidente
que le proporcionará una velocidad simplemente extraordinaria. Paul
Giamatti, Michael Pena, Luis Guzmán, Bill Hader, Richard Jenkins, Ken
Jeong, Michelle Rodriguez, Maya Rudolph, Ben Schwartz, Kurtwood Smith,
Snoop Dogg y Samuel L. Jackson completan el reparto vocal de esta cinta
que ha dirigido el debutante David Soren ('Merry Madagascar'), autor también de una idea de partida que posteriormente ha desarrollado con la ayuda de los guionistas Robert Siegel ('El luchador') y Darren Lemke ('Shrek, felices para siempre').
Via:El septimo arte
Tráiler (y cartel) del thriller de ciencia-ficción y terror 'The Colony', con Laurence Fishburne
Alliance Films ha lanzado el tráiler y el cartel de 'The Colony', thriller de ciencia-ficción y terror canadiense que ha escrito y dirigido el televisivo Jeff Renfroe, y que a España presumiblemente nos llegará de la mano de eOne Films (tras su adquisición de la citada compañía que en España operaba bajo el extinto sello Aurum). La película, cuyo reparto encabezan Laurence Fishburne, Bill Paxton y Kevin Zegers, está ambientada en un futuro no distante en el que tras una nueva Edad de Hielo los pocos supervivientes de la raza humana se han tenido que refugiar bajo tierra en una serie de colonias, donde además de sobrevivir con la escasez de alimentos, las luchas de poder y unas temperaturas que siguen bajando deberán de resistir la amenaza que desde la superficie se cierne sobre ellos, un insaciable y voraz nueva raza de caníbales salvajes... el tráiler y el cartel, tras el salto.
8 películas basadas en series de las que nunca has oído hablar
Seguramente conocerás todos estos filmes, pero otra cosa es que te suenen los programas de televisión que los inspiraron. Por YAGO GARCÍA
Agárralo como puedas (1988)
La serie: Es bien sabido que, rodando Aterriza como puedas, el trío Zucker, Abrahams & Zucker descubrió que ese ajado galán llamado Leslie Nielsen ocultaba en su interior a un titán de la comedia. De modo que, en 1982, decidieron dotar a su estrella de un vehículo a su medida: un serial televisivo que parodiaba los programas policíacos de los 60 como Ballinger de Chicago o El fugitivo. La serie duró sólo 6 episodios, pero después...
Las películas: Después, decíamos, Nielsen volvió a encarnar al detective Frank Drebin en pantalla grande, y hubo gran regocijo. Porque tanto el primer filme como sus secuelas Agárralo como puedas 2 y medio y Agárralo como puedas 33 y 1/3: El insulto final, un espectador con sensibilidad para el humor sólo puede exclamar aquello de "¡Hermoso conejito!".
La isla de Gilligan (1978, 1979, 1982)
La serie: Aunque no muy conocido en España, este show sobre un grupo de millonarios que naufraga en una isla (casi) desierta es un bastión de la cultura pop estadounidense. Algo que se debe tanto a su comicidad como a una interminable serie de reposiciones. Su creador, Sherwood Schwartz, fue también la mente maestra de La tribu de los Brady.
Las películas: Sí, "películas" en plural. En sentido estricto, eso sí, estamos hablando de telefilmes que comenzaron a estrenarse una década y media después de la cancelación de la serie original. Sus títulos: El rescate de la isla de Gilligan, Los náufragos de la isla de Gilligan y, finalmente, Los Harlem Globetrotters visitan la isla de Gilligan. Juramos que no nos hemos inventado este último.
Al límite (2010)
La serie: En un informe como este, era obligatorio abordar el excitante (y desconocido por estos pagos) mundo de las teleseries británicas. Este microcosmos, que nos ha otorgado maravillas como Doctor Who y Sherlock, generó en 1985 Edge of Darkness, un serial policíaco tan bueno como raro donde la investigación policíaca hard boiled, el fantástico y las teorías conspirativas se aunaban muchos años antes de Expediente X.
La película: Extirpando el componente de ciencia-ficción del original, y quedándose sólo con la premisa más básica (un policía que investiga el asesinato de su hija), Al límite quedó como un filme de intriga bastante solvente... Y como uno de los muchos intentos infructuosos de Mel Gibson por recuperar el favor popular tras sus escándalos personales.
Sargento Bilko (1996)
La serie: Hace mucho, mucho tiempo, cuando la TV apenas balbuceaba, las teleseries estadounidenses solían llevar el nombre de su actor protagonista. De ahí que las aventuras catódicas de este militar ludópata y de su desastroso escuadrón saliesen a antena con el título de The Phil Silvers Show. La serie se emitió durante 4 años, y gano tres premios Emmy consecutivos a la mejor comedia.
La película: Reunir a Dan Aykroyd y a Steve Martin en un mismo filme parecía una buena idea... Hasta que Sargento Bilko se estrenó en 1996. La película no consiguió revivir la chispa de su original televisivo, y fue un fracaso de crítica y público.
Sombras tenebrosas (2012)
La serie: Aunque haya pasado a la historia por su fusión de melodrama y terror, este serial (uno de los más reemitidos de la historia de la TV) comenzó siendo un culebrón de lo más normalito, y sólo halló la clave de su éxito tras 200 episodios largos en antena, cuando el vampiro Barnabas Collins apareció entre sus personajes.
La película: Un hit de culto entre el público adolescente de los 70, lleno de detalles sobrenaturales y con una ambientación muy gótica... ¿A alguien le sorprende que Tim Burton y Johnny Depp sean fans de toda la vida? La pareja estrenó el año pasado un remake en pantalla grande de Sombras tenebrosas, que aderezaba el original con chorros de comedia camp.
El detective cantante (2003)
La serie: Volvemos a toparnos con un serial de TV made in UK. En este caso, estamos hablando de una de las creaciones del vitriólico guionista Dennis Potter, quien pergeñó en 1985 esta historia sobre un enfermo incurable que alucina con tramas policíacas. La serie ha quedado como un hito del género musical en TV.
La película: Con el loable propósito de echarle una mano a Robert Downey Jr., un Mel Gibson aún con crédito en la industria produjo la adaptación de El detective cantante, poniendo a su amigo como protagonista y reservándose el papel de un repugnante médico calvo. Si en su formato catódico la historia no era para todos los paladares, en cine resultó indigerible para la mayor parte del público.
Soy espía (2002)
La serie: Aunque ahora parezca difícil de creer, tras tantos años pensando en él como el señor Huxtable, hubo un momento en el cual Bill Cosby molaba. Y mucho. No sólo decimos esto por sus triunfos como comediante de escenarios, sino también por esta serie de acción en la cual Cosby apareció como uno de los primeros héroes negros de la historia de la TV.
La película: Con la cantidad de estrellas afroamericanas de calado y prestigio que pululan por Hollywood, cuando Mario Kassar y Andrew G. Vajna (los productores de Terminator) impulsaron esta versión cinematográfica de Soy espía sólo se les ocurrió ofrecerle el papel protagonista... A Eddie Murphy. Emparejado, además, con un Owen Wilson más perdido que el barco del arroz. Por supuesto, la película acabó resultando un chasco.
Escuadrón oculto (1999)
La serie: "Un blanco. Un negro. Una rubia": esta joyita políticamente incorrecta fue el eslogan de Patrulla juvenil (The Mod Squad en el original), un serial de los 60 en el que tres delincuentes postadolescentes se convertían en detectives antidroga para evitar dar con sus huesos en el talego. El show fue una de las primeras criaturas de Aaron Spelling, futuro responsable de Sensación de vivir, de Melrose Place y de Tori Spelling.
La película: Las modas (y las drogas) habían cambiado, pero el cancaneo juvenil de los protagonistas de The Mod Squad seguía teniendo atractivo para los productores de Hollywood. De ahí que fichasen a Omar Epps, Giovanni Ribisi y a una Claire Danes post-Romeo y Julieta para esta adaptación. ¿Que cómo le fue? Pues mal: la cinta fue uno de los grandes fracasos económicos del cambio de siglo, y su puntuación en Rotten Tomatoes se queda en un escueto 4 por ciento.
'X-Men: Days of Future Past': James Cameron asesoró a Bryan Singer sobre viajes en el tiempo
Es lo que tienen las fiestas de Hollywood: el director de 'Terminator' y el cerebro de la saga mutante se conocieron en una... Y la cosa acabó en una clase magistral sobre desplazamientos temporales. Por YAGO GARCÍA
CINEMANÍA obtuvo esta confesión de labios del propio Singer, y de una forma un tanto inesperada. Como todos los fans del Profesor-X y sus chicos saben, el argumento de Días del futuro y del pasado (arco argumental publicado en 1981, y en el que se basará la nueva película) tiene muchos puntos en común con el argumento de Terminator, un filme que se habría de estrenar cuatro años más tarde. Concluída nuestra batería de preguntas, se nos ocurrió comentar este detalle al cineasta... Y él nos dio con la revelación en los morros: "Es curioso", nos señaló, "porque hace poco conocí a Jim Cameron en una fiesta y le mencioné que la próxima película de X-Men iba a tratar sobre viajes en el tiempo. Resultó que él conocía el cómic, y que le encantaba". Según prosiguió Singer, la charla se convirtió en una improvisada clase magistral en la cual el canadiense le aleccionó sobre los vericuetos científicos del asunto: "Estuvimos dándole vueltas a las posibilidades científicas de una historia así. Cameron me habló de física de partículas, de teoría de cuerdas, de Einstein... Y yo me quedé pasmado con lo mucho que sabe sobre todos esos temas. Bueno, al fin y al cabo fue ingeniero antes que director de cine".
Eso sí, aparte de su pasmo por el saber de Cameron, Singer nos confesó algo que nosotros ya sospechábamos: el director de Titanic y Avatar es un brasas de cuidado. "No había forma de que dejase de hablar del tema: en cuanto yo me separaba de él y me iba a charlar con otra gente, él se metía por medio diciendo: '¿A dónde vas? ¡Si todavía no hemos acabado!". Por otra parte, el director no quiso desvelarnos sobre cómo afectará esto a las nuevas aventuras de James McAvoy, Nicholas Hoult y Michael Fassbender, ni tampoco sobre el papel del villano Bolivar Trask (Peter Dinklage) en todo este batiburrillo científico. Pero la mayor incógnita de todas, por lo antigua, sigue siendo si Cameron 'tomó prestado' el argumento del cómic para su blockbuster de 1984...
Via:Cinemania
Vídeo del día: El final alternativo de 'Paperman'
¿Qué pasó después de que los protagonistas del ganador del Oscar al Mejor corto de animación se encontraran en la estación? Este vídeo le echa imaginación e incorrección política. Por CINEMANÍA
Tercera edición de Atlántida Film Fest, el festival de cine 'online'
Del 22 de marzo al 22 de abril, el festival de cine inédito organizado por Filmin lleva a tu casa 37 películas no estrenadas en salas comerciales en España. Por DANIEL DE PARTEARROYO
Las 17 participantes en la Sección Oficial, que está compuesta por trabajos españoles y latinoamericanos, competirán por el Premio SGAE Talento a la Mejor película, que será concedido por un Jurado compuesto por Kike Maíllo, Ángel Sala, Mónica Carmona. Toni Ulled y Fernando Bernal. Entre las películas a competición se encuentran títulos indispensables del año pasado, como la lisérgica Leones (Jazmín López) o la reivindicable Recoletos, arriba y abajo (Pablo Llorca) [aquí hablamos de las dos], el relato sobre el bullying Después de Lucía (Michel Franco), la inclasificable extrañeza de Mi loco Erasmus (Carlo Padial) [aquí nuestra crítcia] o la sorpresa brasileña del año, Sonidos de barrio (Kleber Mendonça Filho), ganadora del FIPRESCI en el Festival de Rotterdam. Otra galardonada es la chilena Carne de perro (Fernando Guzzoni), premio Nuevos directores en San Sebastián. También hay que sumar el triángulo criminal de Stealing Summers (David Martín Porras), protagonizada por Sophie Auster; el hip hop colombiano de La Playa D.C. (Juan Andrés Arango); la viciada relación alumno-profesor de Ausente (Marco Berger); las home movies de Your Lost Memories (Alejandro Marzoa y Miguel Ángel Blanca); la cotidianeidad heroica de Los increíbles (David Valero); el teatro vanguardista de Otel.lo (Hammudi Al-Rhamoun Font); el desamor reconstruido de Dos (Stathis Athanasiou); o la exploración del 15-M de Falsos horizontes (Carlos Serrano Azcona). El provocador Carlos Reygadas inaugurará la sección con su última película Post Tenebras Lux, Mejor dirección en Cannes 2012, y la clausura corresponderá al estreno mundial de Los ilusos, el segundo largometraje de Jonás Trueba.
En cuanto a la Sección Atlas, donde se recogen películas de la pasada temporada de festivales, la inauguración corre a cargo de Michel Gondry con la estudiantil The We and The I, realizada antes de su adaptación de La espuma de los días. Entre la veintena de títulos que componen esta sección paralela encontramos joyas tan apetecibles como la fascinante L'âge atomique (Héléna Klotz) [hablamos de ella aquí]; el filme japonés de Abbas Kiarostami Like Someone in Love [nuestra opinión aquí]; el endiablado homenaje sonoro al giallo Berberian Sound Studio (Peter Strickland); el terror cotidiano de Compliance (Craig Zobel); la griega ganadora del SEFF 2012 Boy Eating the Bird's Food (Ektoras Lyzgitos); la galardonada con el premio FIPRESCI en el Festival de Toronto Call Girl (Mikael Marcimain); el documental de Sarah Polley Stories We Tell; el incisivo análisis del sistema judicial estadounidense The House I Live In (Eugene Jarecki) con la colaboración de David Simon; la penúltima locura de Quentin Duplex bajo el título de Wrong; el documental sobre la homosexualidad galardonado con un César Los invisibles (Sebastien Lifshitz); el relato apocalíptico de Pefect Sense (David Mackenzie) con Eva Green y Ewan McGregor perdiendo paulatinamente los sentidos; la dionisiaca Dollhouse (Kirsten Sheridan); la ciencia-ficción claustrofóbica de The Sinkholes (Antoine Barraud); los gangsters noruegos de A Somewhat Gentle Man (Hans Peter Molland); o el vibrante thriller romántico Crawl (Hervé Lasgouttes).
Via:Cinemania
'Ant-Man': Filtrado el vídeo 'test footage' de la película de Edgar Wright
La secuencia de prueba del aspecto de la adaptación del superhéroe en miniatura de Marvel que se proyectó en la pasada Comic-Con finalmente llega a internet. Por CINEMANÍA
Eso, hasta ahora (y mientras los robots de rastreo lo permitan), pues ya se ha filtrado una grabación tomada durante aquel día en la que podemos ver (a lo lejos, eso sí) el material. Recuerda que estamos tan alejados de la fecha de estreno que ni siquiera existe reparto para la película (Wright tiene que estrenar primero The World's End, la culminación de su trilogía Cornetto), así que esta secuencia no pertenece al filme final, sino que es una simple muestra de prueba. ¡Y vaya si funciona!
Ant-Man se estrenará el 6 de noviembre de 2015.
Hugh Jackman protagonizará 'Six Years'
La carrera de Hugh Jackman alcanzó una nueva cima con su primera nominación al Oscar de mejor actor protagonista por dar vida a Jean Valjean en ‘Los miserables‘ (‘Les Miserables’, Tom Hooper, 2012). Con anterioridad a ello, Jackman ya tenía apalabrada su participación en ‘Lobezno inmortal‘ (‘The Wolverine’, James Mangold, 2013) —encabezando el artículo tenéis la última imagen oficial de dicho largometraje—, ‘Prisoners‘ (id., Denis Villeneuve, 2013) y ‘X-Men: Days of Future Past‘ (id., Bryan Singer, 2014), pero hasta hace unas horas no se ha confirmado que ‘Six Years‘ va a ser la primera película que ha aceptado protagonizar tras ver como Daniel Day-Lewis le obligaba a quedarse en su butaca durante la última entrega de los Premios de la Academia de Hollywood.
‘Six Years’ será la adaptación cinematográfica de una novela de Harlan Coben que ha salido hoy a la venta en Estados Unidos —cada vez se dan más prisa—, pero no será el primer trabajo suyo que da el salto a la gran pantalla, pues Guillaume Canet ya tomó como base una de sus obras para la realización de ‘No se lo digas a nadie‘ (‘Ne le dis à personne’, 2006). La historia de ‘Six Years’ girará alrededor de cómo Jake Fisher —Jackman— tiene que ver a Natalie, el amor de su vida, casándose con otro hombre. Sin embargo, seis años después se entera de que esa persona ha fallecido y decide asistir a su funeral para volver a Natalie, aunque sólo sea de lejos. Su mundo se derrumbará cuando descubra que la viuda no es la mujer que él aún ama. El fichaje de Jackman seguro que hace que su productora se dé prisa en contratar a un director y un guionista, pues la película aún carece de ellos.
Vía | Hollywood Reporter
‘Six Years’ será la adaptación cinematográfica de una novela de Harlan Coben que ha salido hoy a la venta en Estados Unidos —cada vez se dan más prisa—, pero no será el primer trabajo suyo que da el salto a la gran pantalla, pues Guillaume Canet ya tomó como base una de sus obras para la realización de ‘No se lo digas a nadie‘ (‘Ne le dis à personne’, 2006). La historia de ‘Six Years’ girará alrededor de cómo Jake Fisher —Jackman— tiene que ver a Natalie, el amor de su vida, casándose con otro hombre. Sin embargo, seis años después se entera de que esa persona ha fallecido y decide asistir a su funeral para volver a Natalie, aunque sólo sea de lejos. Su mundo se derrumbará cuando descubra que la viuda no es la mujer que él aún ama. El fichaje de Jackman seguro que hace que su productora se dé prisa en contratar a un director y un guionista, pues la película aún carece de ellos.
Vía | Hollywood Reporter
La muerte de la diversión
En sus inicios el cine era ante todo una saludable forma de entretenimiento a precio asequible para que la gente pudiera desconectar de la realidad. Es obvio que el calificativo de séptimo arte es fruto de una evolución en su naturaleza y objetivos, pero el hacer pasar un buen rato al espectador siempre ha sido una de las bases más importantes que han permitido su supervivencia y rentabilidad económica. Nunca faltarán los mecenas que estén dispuestos a financiar proyectos tan arriesgados que ya cuentan con que van a perder dinero, pero los que realmente viven de ello tienen claro que la diversión que reportará al público es un aspecto muchas veces más importante que la posible calidad final del producto.
Sé que suena mal el referirse a una película como si fuera un producto de consumo más, pero cada vez tengo más dudas sobre que la gran mayoría de producciones que cuenten con un presupuesto holgado sean algo más que un sacacuartos que —¿por pura casualidad?— a veces nos entretienen y otras nos sentimos estafados con lo que vemos en pantalla. Estas últimas semanas hemos podido comprobar esta tendencia con títulos como ‘Hansel y Gretel: Cazadores de brujas‘ (‘Hansel & Gretel: Witch Hunters’, Tommy Wirkola, 2013), ‘Oz, un mundo de fantasía‘ (‘Oz: The Great and Powerful’, Sam Raimi, 2013) o ‘Jack el caza gigantes‘ (‘Jack The Giant Slayer, Bryan Singer, 2013).
Estoy de acuerdo con aquellos que dicen que no se puede esperar lo mismo de todas las películas, pero corremos el riesgo de que todo valga si rebajamos demasiado nuestro sentido crítico en aras de un entretenimiento de nivel discutible —también lo es estar tirando una pelota contra la pared—. Puede que parezca algo irrelevante mientras disfrutemos en mayor o menor medida —el mayor pecado que puede cometer una película es aburrir al espectador—, pero el resultado está siendo que los estudios ven que ya no hay que prestar tanta atención a lo que realmente divierte al público, sino que tienen la capacidad de imponernos lo que les venga en gana sin que nuestras quejan sirvan para algo. Los habrá que disfruten con un título y odien otro, pero la conexión entre ellos es indiscutible: Entretenimientos de diseño, meros artificios que practican la política de todo para el pueblo, pero sin el pueblo.
El cine de acción contemporáneo
He venido notando en muchas películas de acción de gran presupuesto que parecen haber surgido ciertos tópicos que toda cinta que se precie ha de cumplir: Una gran persecución a bordo de un coche/motocicleta que acabe de forma lo más aparatosa posible, varias explosiones – sólo una ya no es suficiente- para dar una mayor sensación de espectacularidad y, si el presupuesto lo permite, la inclusión de un helicóptero —o vehículo aéreo similar— que pone en peligro la vida de los héroes de una forma u otra, los cuales tienen que pelear directamente contra él y conseguir anularlo, a poder ser mediante otra explosión más. Su utilización no es algo malo per se, pero la cosa se complica cuando se ejecutan sin la más mínima pericia, fomentando la idea de que son productos industriales que han de echar mano de esas soluciones a cualquier precio.
Prácticamente igual de insatisfactorio es cuando una producción más o menos solvente hasta ese momento recurre a una de esas soluciones en aras de una mayor espectacularidad, tal y como sucedía en el tramo final de ‘El legado de Bourne‘ (‘The Bourne Legacy’. Tony Gilroy, 2012). Poco importaba que tuvieran que recurrir a un villano salido de la nada, la floja puesta en escena de Gilroy en todas esas escenas y una molesta sensación de artificiosidad visual que impedía que el espectador se sumergiese en la acción. Aún más sangrante fue el caso de ‘La jungla: Un buen día para morir‘ (‘A Good Day To Die Hard’, John Moore, 2013), donde no sólo se echaba mano de todos los recursos mencionados en el párrafo anterior, sino que se hacía a costa de cargarse todo el atractivo del personaje de John McClane y ofreciendo un espectáculo tan lamentable como aburrido.
Hay bastantes más ejemplos recientes de cine de acción industrial —’Desafío Total‘ (‘Total Recall’, Len Wiseman, 2012), ‘Battleship‘ (id., Peter Berg, 2012), etc.—, siendo cada vez más habitual que no satisfagan las expectativas de beneficios de sus productoras, de ahí que echen mano de sagas consagradas, remakes u otro tipo de origen donde el formato haya demostrado su efectividad comercial. Por fortuna, nos siguen quedando propuestas estimulantes como ‘Skyfall‘ (id., Sam Mendes, 2012), pero la sensación que queda es que son pequeños oasis como resultado de contar tras las cámaras con un director reputado que no va a seguir necesariamente asociado al género en el futuro —Sam Mendes ya ha rechazado la posibilidad de dirigir la siguiente aventura de James Bond—. ¿Qué nos queda entonces? Un deterioro casi insalvable de la figura del héroe de acción en beneficio de los superhéroes, personajes con los que hay mucha más libertad para hacerles hacer lo que les apetezca. Total, tienen poderes sobrehumanos, algo que no se puede aplicar a las personas de carne y hueso por mucho que lleven ya años intentándolo.
El caso Dreamworks
El cine de animación ha reportado pingues beneficios a Dreamworks, en especial la franquicia Shrek. Sin embargo, no faltaron las quejas sobre lo fallido que resultaba en no pocas ocasiones su sobreutilización del humor grosero —con resultados bastante desiguales—. Dreamworks había apostado por una mayor diversificación en los últimos años, consiguiendo rodar joyas como la maravillosa ‘Cómo entrenar a tu dragón‘ (‘How to Train Your Dragon’, Dean DeBlois y Chris Sanders, 2010) o títulos muy reivindicables como ‘El origen de los guardianes‘ (‘Rise of the Guardians’, Peter Ramsey, 2012), pero quedándose siempre lejos de conseguir los beneficios de antaño. Valga como ejemplo el hecho de que ‘Shrek, felices para siempre‘ (‘Shrek Forever After’, Mike Mitchell, 2010), monótona cuarta entrega de una franquicia en decadencia que costó 165 millones de dólares y recaudó más de 750, mientras que ‘Cómo entrenar a su dragón’ ni siquiera llegó a los 500 millones con el mismo presupuesto.
El caso más llamativo es el de ‘El origen de los guardianes’ —quizá la primera película animada que realmente ha captado el espíritu de blockbusters de imagen real como, por poner su referente más directo, ‘Los vengadores‘ (‘The Avengers’, Joss Whedon, 2012)—, ya que Jeffrey Katzenberg no tuvo problemas en reconocer abiertamente que ha sido el único fracaso de la compañía de entre los últimos 18 títulos que han estrenado. Si nos fijamos en los fríos números, su coste de producción fue de 145 millones de dólares y ha recaudado 300, pero el estudio afirma que ha perdido 83 millones de dólares solamente por culpa de esta película. Esperan recuperar esas cifras con el resto de ventanas de explotación, pero será un goteo lento que no sirve para mantener la calma entre los ansiosos accionistas de Dreamworks.
El gran problema es que en Dreamworks no han conseguido levantar un imperio equiparable a Pixar no ya en lo referente a la calidad de sus producciones, sino en los ingresos por otras vías ajenas al visionado en cines de las películas. Muy clarificador es el hecho de que si ‘Cars 2‘ (id., John Lasseter y Brad Lewis, 2011) existe no fue tanto por el éxito de la primera entrega durante su exhibición en salas —su éxito fue menor comparado con los títulos previos de la compañía—, sino más bien por los 1.000 millones de dólares que ‘Cars‘ (id., John Lasseter, 2006) había generado por las ventas de merchandising. Este equilibrio permite más libertad a una compañía, pero en Dreamworks han preferido tirar por la vía fácil: Despedir a 350 empleados e implantar una política de hacer todo más rápido y más barato a partir de ahora. Existe la posibilidad de que eso no se note en el resultado final de sus largometrajes animados, pero permitirme que tenga muchas dudas al respecto.
Apuntes finales
El concepto de la suspensión de la incredulidad es una de las claves a la hora de ver una película, ya que todas ellas, aunque con diferente intensidad, confían en la capacidad del espectador para dejarse llevar por lo que aparece en pantalla. Esto implica que pasen cosas que en la vida real nunca sucederían, pero es vital para que la magia del cine no desaparezca sin remedio. Todo esto se complica cuando desde Hollywood se quiere estirar tanto esa idea que el espectador ha de aceptar que en una películas las cosas pasan porque sí —¿qué tontería es eso de la progresión dramática?—, tal y como sucede en el reciente caso de ‘Jack el caza gigantes‘.La inteligencia del espectador era algo irrelevante hasta hace bien poco, ya que siempre se podía abandonar la idea de crear una nueva franquicia o simplemente rodar poco después un reboot con el que intentar que todo volviese a la normalidad. El problema – o bendición, todo depende de cómo se mire- es que cada vez son más este tipo de producciones que no consiguen recaudar suficiente dinero en su paso por cines como para justificar la alta inversión que supuso su mera existencia. Estamos cerca de volver a esos tiempos en los que una productora se iba a pique por el fracaso de una sola película, ya que cada vez se invierte más dinero en según qué titulos y eso puede acabar su perdición.
Lo bueno para el consumidor es que es posible que llegue un punto en el que sigan existiendo malas películas que generen beneficios multimillonarios, pero la realidad está apuntando hacia la necesidad de no dar luz verde a cualquier carísima tomadura de pelo porque se adscribe a alguna moda existente o a cintas de acción tan redundantes y sin alma que la gente ya les está cogiendo el truco y pasando de ir a verlas al cine cuanto tiene lugar su estreno. Sigue estando lejos de lo ideal, pero no es sostenible que el concepto de diversión de espectador y productor siga alejándose cada vez más, porque así sólo van a conseguir cargarse al cine de puro entretenimiento, ése que permite sacar adelante otro tipo de películas de corte más artístico.
No hay nada de malo en que quieran ganar mucho dinero a nuestra costa, pero, por favor, que no se olviden de que están condenados de antemano si siguen ignorando cada vez más al público, ya que somos nosotros los que pagamos como buenamente podemos para que ellos sigan anunciando beneficios multimillonarios año tras año.
Via:blog de cine
'Una bala en la cabeza', la película
Lo comentábamos no hace mucho en la entrada de ‘Stardust‘ (id, Matthew Vaughn, 2007): la vastedad que el panorama editorial norteamericano del cómic ofrece de cara a la actual fiebre de las adaptaciones al cine es de una entidad tal que pensar que sólo los superhéroes tiene cabida en ese traslado de las viñetas a la gran pantalla sería limitar muchísimo la realidad. Bien es cierto que el ratio cine de superhéroes/resto de adaptaciones, el mayor porcentaje se lo lleva el primero en detrimento de un segundo que con los años nos ha ido dejando filmes que van desde lo magistral de ‘Camino a la perdición‘ (‘Road to Perdition’, Sam Mendes, 2002) a lo infumable de ‘Jonah Hex‘ (id, Jimmy Hayward, 2010), quedando abonadas las tierras entre ambos extremos con gran cantidad de títulos.
A todos ellos viene ahora a unirse la adaptación del cómic de Matz y Colin Wilson ‘Una bala en la cabeza‘ (‘Bullet to the head’, Walter Hill, 2013), un filme que podremos ver a partir de este viernes en nuestras pantallas y que supone el esperadísimo regreso de un realizador cuya filmografía está repasando nuestro compañero Alberto y al que no le veíamos nada desde que en 2003 firmara ‘Invicto‘ (‘Undisputed’, 2002), olvidable filme de boxeo con Wesley Snipes y Ving Rhames como protagonistas.
Sinopsis
Tras su último trabajo, Jimmy Bobo, un implacable asesino a sueldo de Nueva Orleáns, sufre un ataque inesperado por parte de Keegan, una imparable máquina de matar que ejecuta sin contemplaciones a su compañero. Dispuesto a vengarse, Jimmy se ve obligado a colaborar con Taylor Kwon, un detective de la policía poco partidario de los métodos expeditivos. Sin embargo, pronto descubrirá que Jimmy es el arma más eficaz para acabar con una peligrosa organización que ha corrompido a la policía y a las altas esferas de una ciudad devastada por el huracán Katrina.
El director
Con una trayectoria que arranca en 1975, un repaso a la filmografía de Walter Hill nos devuelve la personalidad de un realizador de lo más ecléctico que ha tocado palos tan dispares como el western, la comedia, el drama o la ciencia ficción. Pero si por algo será recordado el cineasta es por sus cintas de acción, un género en el, ya de forma directa, ya mezclado con otros, ha incidido en un noventa por ciento de su producción con ejemplos que se mueven entre lo espléndido de ‘The warriors. Los amos de la noche‘ (‘The warriors’, 1979), ‘Calles de fuego‘ (‘Streets of fire’, 1984) o ‘El último hombre‘ (‘Last man standing’, 1996), lo pasable de ‘Limite 48 horas‘ (‘48 hours’, 1982) y ‘Traición sin límites‘ (‘Extreme prejudice’, 1987) o lo muy olvidable de ‘Danko, calor rojo’ (‘Red heat’, 1987).
El reparto
Desde que con ‘Rocky Balboa‘ (id, Sylvester Stallone, 2006) y ‘John Rambo‘ (id, Sylvester Stallone, 2008) recuperara el tirón que perdió en los noventa y los primeros años de este siglo, Stallone está viviendo una segunda juventud, contando como cuenta con toda la legión de fans que llevan con él desde que protagonizara ‘Rocky‘ (id, John G. Advilsen, 1975) hace ya casi cuatro décadas. Con el éxito que le han proporcionado las dos entregas de ‘Los mercenarios‘ (‘The expendables’, Sylvester Stallone, 2010) el actor y director está que no para, y tiene pendiente de estreno este mismo año ‘La tumba’ (‘The tomb’, Mikael Håfström, 2013) que le unirá, más allá de lo anecdótico de su participación en la segunda parte de ‘Los mercenarios’, a Arnold Schwarzenegger y ‘Grudge Match‘ una comedia de Peter Segal en la que también interviene Robert DeNiro.
Junto a Stallone, y en el papel de villano de la función, encontramos la imponente presencia física de Jason Momoa, conocido sobre todo por sus papel de Karl Dogo en la primera temporada de ‘Juego de tronos‘ (‘A game of thrones’, 2010) y por haber sido el indigno sucesor de “Arnie” en la aborrecible ‘Conan el bárbaro‘ (‘Conan the barbarian’, Marcus Nispel, 2011). Completan el reparto Sung Kang, Adewale Akinnuoye-Agbaje —visto en ‘Perdidos’ (‘Lost’, 2004-2010)— o el ubicuo Christian Slater.
Todos los videos de ‘Una bala en la cabeza’
- Trailer en español
- Trailer 1
- Trailer 2
- TV spot 1
- TV spot 2
- TV spot: Revenge never gets old
Cartel de la película
Via:blog de cine
'Gru, mi villano favorito 2', tráiler y nuevo cartel
‘Gru, mi villano favorito’ (‘Despicable Me’) fue uno de los mayores éxitos de 2010, llegando a recaudar casi 550 millones de dólares en todo el mundo. Tres años más tarde nos llega la segunda parte, que con toda probabilidad será otro taquillazo. Aquí os dejo el último cartel y el definitivo tráiler de ‘Gru, mi villano favorito 2’ (‘Despicable Me 2’), de nuevo dirigida por Chris Renaud y Pierre Coffin. También regresa Steve Carell, la voz original del protagonista, aunque en España está doblado por Florentino Fernández.
Ken Daurio y Cinco Paul —‘Gru, mi villano favorito’, ‘Lorax: En busca de la trúfula perdida’ (‘The Lorax’, Chris Renaud, Kyle Balda, 2012)— firman el guion de esta segunda entrega, en la que al parecer Gru cambia de bando y se une a los “buenos” para combatir a un enemigo demasiado peligroso; por supuesto, contará con la inestimable ayuda de los patosos y entrañables minions. Kristen Wiig, Al Pacino, Russell Brand, Steve Coogan, Miranda Cosgrove y Ken Jeong son otros de los actores que prestan sus voces a los personajes principales. La película se estrena en nuestro país el 5 de julio —solo dos días después que en EE.UU.—, en 2D y 3D. La primera entrega me resultó demasiado infantil y el nuevo avance no me ha hecho pensar que la secuela va a ser mejor, así que esperaré a leer vuestras opiniones antes de decidir si me tiro a la piscina…
- Tráiler español:
- Tráiler en versión original
PD: Os recuerdo que podéis ver el teaser tráiler (con un lindo gatito) haciendo clic aquí.
Via:blog de cine
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