domingo, 3 de abril de 2011

‘Zeroville’, James Franco explotando su lado independiente

La faceta de actor de James Franco la conocemos al dedillo.

Y creo que nadie le hará ascos, ni mucho menos teniendo tan fresca su pedazo de interpretación en ‘127 horas’, merecidísima nominación a los Oscars 2011 como mejor actor. Luego va, y para divertirse, se mete en cosas ligeras pero desternillantes como’Your Highness’ (’Caballeros, princesas y otras bestias’), y lo hace con el mismo aplomo, solvencia y carisma que si estuviera fabricando un dramonazo.

Pero puede que la versión Franco que menos conozcamos sea la de director. Aunque es posible que esto se resuelva pronto.

Y es que el amigo James ha adquirido los derechos cinematográficos de la novela de 2007 de Steve Erickson titulada ‘Zeroville’, y tiene la intención de desarrollar ya el proyecto bajo su productora independiente Bandini Productions, asumiendo su dirección, y puede que también protagonizando la película que al final salga del horno.

Desde luego, leyendo la descripción del libro, uno se imagina que de ahí puede salir algo muy interesante:

‘Zeroville’ es una comedia negra que comienza en 1969 en Hollywood Boulevard, cuando a la meca del cine llega un joven ex-seminarista fanático del celuloide llamado Vikar Jerome que lleva tatuadas en su cabeza las imágenes de Elizabeth Taylor y Montgomery Clift, y que tiene el sueño de ser parte de la industria cinematográfica.

Vikar será testigo directo de la transformación cultural del momento: el rock ‘n ‘roll, el sexo, las drogas y, mucho más importante para él, la decadencia de los Estudios de cine y el aumento de los directores independientes.

En ese escenario nuestro protagonista se convertirá en un exitoso editor con una de la visión asombrosa. Pero, a través de encuentros con la ex-aspirantes a estrellas, los ladrones, guerrilleros políticos, músicos punk, y los cineastas veteranos, descubre el increíble secreto que se encuentra en cada película.

¿Buscando pillar por fin el Oscar?. Yo soy un declarado fan de James, así que, busque lo que busque, que cuente conmigo ya como futuro calentador de butacón de cine.

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