Los peores trabajos de los nominados a los Oscar (I): Mejor Actor de Reparto

Iniciamos un serial que nos recordará los baches en las carreras de los directores y actores nominados. Hoy le toca recibir a Philip Seymour Hoffman, Alan Arkin, Robert De Niro, Tommy Lee Jones... Y, sí, también a Christoph Waltz. Por YAGO GARCÍA

Ahora que el 24 de febrero se acerca cada vez más, y con el la gala de los Oscar 2013, todo el mundo está dispuesto a cantar las alabanzas de los filmes nominados, de los directores y sus intérpretes. Que si las películas son muy buenas, que si las actrices están en plena forma, que si los actores (incluso los que no son Daniel Day-Lewis) son todos unos maestros... Pero, si ya nos conoces, sabrás que en CINEMANÍA nunca vamos de ese palo. Por eso, tras haber hecho hincapié en los olvidos de la Academia (la ausencia de Tarantino y Bigelow entre los nominados todavía duele) y en espera de que a los filmes candidatos a Mejor Película les toque recibir, como cada año, su dosis de cera, inauguramos este serial en el que llamaremos vuestra atención sobre los peores trabajos de cada nominado y nominada, tanto en las categorías dramáticas como en las de dirección. Así, cuando veáis subir a los ganadores al estrado, recordaréis que también son humanos y en sus carreras ha habido baches, algunos hondísimos. Damos arranque a la colección con los candidatos a Mejor Actor de Reparto porque, tratándose de un festín de palizas, invocar el principio de "las damas primero" sonaba muy irónico, amén de machista.

Tommy Lee Jones en Batman Forever (1995)

Está nominado por... Lincoln 
¿Por qué nos parece la peor? En parte, porque Tommy Lee nos parece un actor tan sobrio, tan señorial y tan de la Texas profunda que verle aquí ejerciendo de comparsa de Jim Carrey y tratando de demostrar que la comedia histriónica se le da bien da cosa, sobre todo si tenemos en cuenta el fabuloso Dos Caras de Aaron Eckhart en El caballero oscuro. Y, por otro lado, porque sólo recordar ese conjunto bipolar que lucía en esta película hace que nos salga un sarpullido. De dos colores, por supuesto.

Philip Seymour Hoffman en Y entonces llegó ella (2004)

Está nominado por... The Master
¿Por qué nos parece la peor? En honor de Seymour Hoffman hay que decir que siempre se esfuerza al máximo en todos sus filmes, y eso se nota mucho. Pero nos tememos que su orondo cuerpo también se dejó arrastrar por la poca calidad de este filme, el menos valorado de la carrera de Ben Stiller (que ya es decir). Si quieres ver al rubio en su lado más gracioso, olvídate de Y entonces llegó ella y rescata sus apariciones en Radio encubierta y Twister.

Robert De Niro en Ahora los padres son ellos (2010)

Está nominado por... El lado bueno de las cosas
¿Por qué nos parece la peor? Aquí, lo reconocemos, la cosa se nos ha puesto muy cuesta arriba. Porque De Niro lleva tantos años empeñándose en arruinar su reputación que quedarse con un solo trabajo lamentable resulta tan desolador como difícil. Pero ni Las aventuras de Rocky y Bullwinkle, ni El enviado, ni siquiera Manual de amor 3 (donde, al menos, el abuelete se daba el gusto de enrollarse con Monica Bellucci) pueden superar la vergüenza ajena de ver al hombre de Taxi Driver y Toro salvaje con el piloto automático puesto y sufriendo chistes sobre penes fláccidos. Ay, Robert, qué fácil es perdete el respeto a veces...

Alan Arkin en Santa Claus 3 (2006)

Está nominado por... Argo 
¿Por qué nos parece la peor? No, no estás alucinando: aunque parezca imposible, ¡Vaya Santa Claus! tuvo dos continuaciones. Y la tercera de ellas fue realizada, para más INRI, el mismo año que Pequeña Miss Sunshine, con lo que Arkin encarnó en el mismo año a uno de los mejores papeles de su carrera (el entrañable abuelete yonqui que le procuró el Oscar) y a posiblemente el peor, la del suegro de ese Tim Allen convertido en el barbudo navideño. Las palabras "pagadme pronto, que quiero irme de aquí" parecen escritas en la despejada frente de Arkin a lo largo de todo este filme. No le culpamos.

Christoph Waltz en Rex: Un policía diferente (serie)

Está nominado por... Django desencadenado
¿Por qué nos parece la peor? Hurgando en la filmografía del vienés más tarantiniano, hemos encontrado esta pequeña sorpresa. Porque, en 1996, y más concretamente en el episodio 6 de la tercera temporada, el futuro intérprete de Hans Landa y King Schulz tuvo que dar vida a un coleccionista de muñecas con más peligro aún que Waylon Smithers. Todos sabemos que, antes de hacer amistad con el genio de la gran mandíbula, Waltz tenía una carrera como actor en TV, y la verdad es que su registro de sujeto siniestro está aquí en plena forma... Pero saber que acabará cayendo en las fauces del perro policía le quita suspense a la cosa, y además el guión le da pocas oportunidades a nuestro hombre. Menos aún que el de Agua para elefantes, queremos decir.

Via:Cinemania