viernes, 16 de julio de 2010

‘The Twilight Saga: Breaking Dawn’, lo que cine no nos dejará ver de la novela. Mojigatos

Digo lo mismo que todas las fuentes que recogen esta noticia, que lo que viene a continuación es un campo de SPOILERS, SPOILERS, y más SPOILERS, así que si continuáis leyendo será bajo vuestra voluntad curiosa.

La guionista de ‘The Twilight Saga: Breaking Dawn’ (’La Saga Crepúsculo: Amanecer’), Melissa Rosenberg, ya montó el taco el mes pasado cuando soltó sin anestesia en una entrevista que el nacimiento de Renesmee, la vástaga de Edward y Bella, no se vería en la película, o al menos no de forma gráfica.

Eso para el que haya leído la novela supone una licencia brutal, porque el momentazo del parto es total. Digno de colocarle una ‘R’ calificadora tan grande como un lobo de esta franquicia.

Y ahí está el problema. Que la Summit Entertainment no está dispuesta a que le califiquen así el final de una saga maxitaquillera, y ver peligrar la pedazo de pasta astronómica que ya saben que van a recopilar por tener que reducir la cantidad de copias a distribuir por el planeta. Con el número de salas de proyección no se juega.

¿Por qué tanto miedo?. Pues porque Stephenie Meyer describe en la novela el parto traumático del bebé, con una rotura de la placenta y Bella vomitando sangre, siendo necesario que Edward imprima sus colmillos en la placenta para sacar inmediatamente al retoño antes de que muera.

Dijo Rosenberg que no cree que sea algo interesante esta escena, que no lo ve, y que se puede hacer el parto sin verlo, lo cual no quiere decir que la experiencia vaya a ser menos evocadora.

Es ahora cuando Melissa aclara que el parto estará en pantalla, pero no veremos los dientes en la placenta. ¿Y que más no saldrá?.

Eso sí, lo que dice la guionista que le mola más es escribir sobre la transformación de Bella en un vampiro, su transformación y sus poderes. Ver cómo Kristen Stewart personifica a Bella como un personaje incómodo, inquieto, que cuando se convierta en vampiro la hará cambiar completamente.

Pues vaya, para algo potente que podríamos haber catado en la franquicia, lo recortan por mojigatería. La pasta es la pasta. En fin, con tanta licencia cinematográfica, la saga literaria de Meyer se ha quedado en lo más superficial.

Tendremos que esperar poco para comprobar cómo se las han apañao con la adaptación en la primera parte del filme que debutará el 18 de noviembre de 2011. La segunda parte lo hará en el verano de 2012.

Texto:David Cárdenas
Vía:Tu blog de cine

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