Son siniestros. Son implacables. Si recuerdas todo aquello de las Guerras Clon, sus orígenes dan mucha grima. Y tienen la peor puntería a este lado del planeta Tatooine. ¿De quiénes hablamos? Pues de quiénes va a ser: de los soldados de asalto imperiales, esas fuerzas de choque cuyas ominosas armaduras blancas son tan icónicas para Star Wars como la máscara de Darth Vader o el bikini metálico de la princesa Leia. Y, aunque el argumento de Star Wars: Episodio VII sigue siendo materia de rumores, podemos sospechar que volveremos a verlos en la nueva trilogía. La razón: estas fotos publicadas por la web Indie Revolver (vía Slashfilm) que nos muestran a unos stormtroopers nuevos, remozados y dispuestos a medirse tanto con los veteranos (Carrie Fisher, Harrison Ford, Mark Hamill) como con la nueva generación de John Boyega, Gwendoline Christie, Lupita Nyongo’o y compañía.
Además, otra imagen posteada en Twitter viene de una fuente fiable: la Legión 501, el grupo de fans que, con la venia de Lucasfilm, ejerce de guardia de honor en convenciones y eventos benéficos. Finalmente, desde la página especializada Making Star Wars se citan fuentes anónimas según las cuales los diseños son auténticos, y pertenecen a la película de J. J. Abrams. Y
no sólo eso: su arsenal se habrá remozado, incluyendo armas más
poderosas (lanzallamas, por ejemplo) y armaduras dotadas con camuflaje
mimético, en plan Depredador. En espera de una confirmación definitiva sobre si se trata de una filtración, un ejercicio de márketing viral o un fake más
grande que la Estrella de la Muerte, cabe preguntarse varias cosas:
¿significa esto que el Imperio resurgirá tras las muertes de Palpatine y
de Lord Vader? Y, sobre todo, ¿se cachondeará el populacho galáctico de
estos soldados, recordando la paliza que les dieron los Ewoks en El retorno del Jedi? Seguiremos informando…
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