El cuento de Pablo Berger ha sido seleccionado por la Academia para representar a España en la pugna por el Oscar. Veamos cuáles son las películas más potentes del resto de países que lucharán por ser una de las cinco candidatas finales. Por DANIEL DE PARTEARROYO
Amour (Michael Haneke) — AUSTRIA
No nos engañemos. La flamante ganadora de la Palma de Oro este año en Cannes parte como gran favorita, y es que, con la dura historia sobre la vejez, la enfermedad y el amor de Amour parece que Michael Haneke ha conseguido un consenso del que es dicíficl escapar. Su anterior película (también Palma de Oro), La cinta blanca, ya optó al Oscar (aunque representando a Alemania) en 2010, cuando perdió contra la argentina El secreto de sus ojos.
Intocable (Olivier Nakache & Éric Toledano) — FRANCIA
El gran éxito galo del año busca aderezar su título de segunda película francesa más taquillera de la historia con un Oscar. Lo cierto es que su historia humanista de amistad, superación y tolerancia (lee nuestra crítica) contiene muchos de los ingredientes que le gustan a la Academia, pero el detalle que puede marcar la diferencia es que Harvey Weinstein co-produce y anda detrás de la distribución en EE UU.
Cesare deve morire (Paolo & Vittorio Taviani) — ITALIA
No sería raro que el regreso de los hermanos Taviani a la primera línea añadiera el Oscar a su Oso de Oro conseguido en el Festival de Berlín. Los directores de Padre Padrone y La noche de San Lorenzo cuentan la preparación y representación de la obra de teatro Julio César de Shakespeare por parte de los prisioneros de la cárcel romana de Rebibbia.
Pietà (Kim Ki-duk) — COREA DEL SUR
La que puede ser la resurrección crítica de Kim Ki-duk (León de Oro en Venecia mediante) puede ser demasiado radical para la Academia con su mezcla de simbolismo religioso y sexo explícito, pero quién sabe si su dimensión melodramática en una extrema relación madre-hijo no logrará convencer a los académicos más reticentes.
No (Pablo Larraín) — CHILE
Una de las películas que más ha gustado en CINEMANÍA a su paso por el Festival de San Sebastián es la candidata chilena, que ganó el premio gordo de la Quincena de Realizadores en Cannes. Pablo Larraín cuenta uno de los acontecimientos determinantes de la historia reciente de su país: el referendum de 1988 en el que se decidió si el general Pinochet debía seguir en el poder.
Sangue do meu sangue (Joao Canijo) — PORTUGAL
Pese a lo polémico que pueda resultar que Portugal no decida enviar la portentosa Tabú, de Miguel Gomes, lo cierto es que la última película de Joao Canijo también es un rival de altura. Sangue do meu sangue, premio FIPRESCI en San Sebastián 2011, retoma un tema favorito del cine portugués reciente: la vida de una familia a las afueras de Lisboa.
Beyond the Hills (Cristian Mungiu) — RUMANÍA
Paisajes montañosos desolados, un convento femenino ortodoxo, ¿indicios de satanismo?, largos planos secuencia de insuperable pulso rumano. La nueva película de Cristian Mungiu (4 meses, 3 semanas y 2 días) "sólo" rascó Mejor guión en Cannes, pero todavía tiene mucho que decir.
Infancia clandestina (Benjamín Ávila) — ARGENTINA
Natalia Oreiro y Ernesto Alterio protagonizan este drama sobre los desaparecidos durante la dictadura argentina en el que se siguen las desventuras de un niño de 12 años, hijo de una pareja de militantes de los Montoneros, que vuelve a Argentina después de un periodo de exilio en Cuba. El propio director, Benjamín Ávila, es hijo de militantes y nieto de las conocidas como Abuelas de Plaza de Mayo.
À perdre la raison (Joachim Lafosse) — BÉLGICA
Presentada en la Quincena de Realizadores de Cannes, la nueva película del belga Jaochim Lafosse sobre la desgarradora historia real de una mujer que asesinó a sus cinco hijos dejó un reguero de buenas impresiones, así como el premio de Mejor actriz de la sección para Émilie Dequenne.
Rebelle (Kim Nguyen) — BRASIL
Otra película cuya actriz protagonista, Rachel Mwanza, intérprete no profesional, ha cosechado premios y elogios por allí por donde ha pasado (Oso de Plata en Berlín, Mejor actriz en Tribeca). Filmada en la República Democrática del Congo, cuenta cómo su protagonista de 14 años es secuestrada para convertirla en una niña soldado.
Just the Wind (Benedek Fliegauf) — HUNGRÍA
La ganadora del Gran Premio del Jurado en el Festival de Berlín representa a Hungría con la narración de un ominoso episodio de su historia reciente: los ataques y matanzas de gitanos que tuvieron lugar entre 2008 y 2009.
Life Without Principle (Johnnie To) — HONK KONG
Esta es una de las dos películas que el infatigable Johnnie To dirigió en 2011 y, aunque este año ya tiene otra terminada (Romancing in Thin Air), la elegida por Hong Kong ha sido este relato neonoir que traza una acertada parábola sobre la crisis financiera mundial con la historia de un criminal, un banquero y un policía envueltos en una situación catastrófica.
Después de Lucía (Michel Franco) — MÉXICO
La difícil relación entre un padre y su hija de 17 años que, además, sufre bullying en el instituto es el tema de este drama de Michel Franco que conquistó a Tim Roth y consiguió el premio de la sección Una cierta mirada del Festival de Cannes.
Caught in the Web (Chen Kaige) — CHINA
El director de Adiós a mi concubina es el representante de la Quinta generación de directores de china que este año ha sido elegido para competir por el Oscar. Alejándose de su preciosista e histórico estilo habitual, el cineasta cuenta con un reparto de estrellas (Wang Xueqi, Chen Hong, Yao Chen, Gao Yuanyuan, Mark Chao) para crear un relato fragmentario y con diversas perspectivas sobre la adicción y dependencia de internet entre la sociedad china.
Barbara (Christian Petzold) — ALEMANIA
Representante destacado del nuevo cine alemán que se conoce como la Escuela de Berlín, Christian Petzold se llevó el Oso de Plata de Mejor director en el pasado Festival de Berlín con este filme pegado a Nina Hoss, que interpreta a Barbara, una doctora que en 1980 es trasladada a un pequeño hospital cerca del Báltico como resultado de un expediente disciplinario.
The Deep (Baltasar Kormákur) — ISLANDIA
El director de películas como Contraband regresa a su Islandia natal para rodar este drama basado en hechos reales donde un pescador intenta sobrevivir en el océano helado después de que su barco se vuelque en la costa sur de la isla.
L'enfant d'en haut (Ursula Meier) — SUIZA
Un complejo turístico de alta montaña y dos hermanos cuya forma de subsistir consiste en robar a los clientes ricos le sirven a la cineasta Ursula Meier para trazar este preciso cuento moral.
Via:Cinemania
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