martes, 17 de abril de 2012

Avance: 10 minutos de 'G. I. Joe, la venganza'


CINEMANÍA asiste a la proyección de un adelanto de la segunda película de los 'joes', bien cargada de acción y con las calvas de Dwayne Johnson y Bruce Willis. Por DANIEL DE PARTEARROYO

avance 10 minutos de g i joe la venganza
Si algo podemos sacar en claro de los juguetes de Hasbro ateniéndonos a su representación cinematográfica en Transformers, Battleship o G. I. Joe es que deben estar fabricados con materiales extraordinariamente inflamables y de fácil explosión. El ruido, la furia, la pirotecnia hipervitaminada y las coreografías de acción ajenas a la física terrestre parecen ser las constantes de sus películas, ya estén dirigidas por Michael Bay, Stephen Sommers, Peter Berg haciéndole un Super8 al director de Armageddon o, como en el caso de G. I. Joe, la venganza, por Jon M. Chu. Poco importa que la obra anterior del realizador estuviera centrada en el género musical (eso nos obligan a decir títulos como Step Up 2, Step Up 3D o Justin Bieber: Never Say Never), porque, recuperando lo mejor del espíritu mercenario e insensato de la serie B, aquí el director importa mucho menos que la pericia para concebir y engarzar espectaculares escenas de acción.
En ese sentido, en los 10 minutos que hemos podido ver, G. I. Joe, la venganza demuestra que cumple de sobra. La primera película (que siempre defenderé contra viento y marea como uno de los blockbusters de acción más virtuosos y divertidos de su año) ya hacía gala de una estructura consagrada a la acción y la sucesión continua de set pieces. La secuela juega hábilmente sus cartas de mayor presupuesto traducido en más explosiones y elevación en el nivel de espectacularidad de los enfrentamientos cuerpo a cuerpo, como esa secuencia a katanazos colgando de una montaña que ya se podía ver en el tráiler.

La principal escena montada que hemos visto es la operación de rescate del Comandante Cobra, que, como es normal, vuelve a ejercer de supervillano. Esta vez, la organización Cobra toma el control del Gobierno de EE UU (Zartan ocupa el lugar del Presidente) y amenaza al resto de potencias mundiales con un arma capaz de destruir metrópolis enteras en un segundo (el ejemplo elegido para demostrar su potencia es Londres, ¡adiós a los JJ OO!). Pero, aunque los malos siempre sean más interesantes, la chicha está en el equipo de los joes. Eliminada de un plumazo militar instigado por Cobra la mayor parte del cásting de la película anterior, sólo permance Channing Tatum para claramente dejar paso y protagonismo a dos auténticos titanes de la pólvora y la testosterona sintetizada: Dwayne Johnson y Bruce Willis.
La incorporación de La Roca y Willis parece la mejor decisión posible para potenciar los niveles de macarrismo y guasonería de la franquicia. Además, si está demostrado que en el cine de acción las calvas son lo que mejor funciona, contar con dos de las mejores es una jugada ganadora. Exijimos que Jason Statham incorpore la suya en la tercera película. Por otro lado, el apartado de curvas está controlado con Adrianne Palicki, rescatada de Friday Night Lights.
G. I. Joe 2
En definitiva, lo que parece proponer G. I. Joe, la venganza, como ya hizo su predecesora, es una explosiva retahila de escenas de acción, más disfrutables cuanto más locas e insensatas. Apuesta por la diversión directa, desnuda y sin mayor justificación que lo evidente. Al encontrarse encuadrada en un verano donde los blockbuster estrella El caballero oscuro. La leyenda renace y Prometheus vienen con el ceño fruncido y un halo de respetabilidad atribuido por defecto, el espíritu gamberro y dionisiaco de esta película basada en una línea de muñecos de acción paramilitares aspira a ser el mejor helado de serotonina que nos brinde satisfacción inmediata y sin consecuencias.
G. I. Joe, la venganza se estrena el 31 de agosto.

No hay comentarios: