Es un gustazo trabajar en una franquicia cinematográfica cuando la taquilla te sonríe.
El equipo de ‘The Twilight Saga: Breaking Dawn’ comenzará la producción dentro de muy poquito en Vancouver y Lousiana, con la filmación a la vez de las dos películas de cierre de la saga, y lo hará con el caramelito en la boca de la impresionante recaudación mundial de ‘La Saga Crepúsculo: Eclipse’: 654 millones de dólares después de invertir unos 68 M$. Rentabilidad máxima.
La Summit Entertaiment se está forrando. Aunque los sueldos estratosféricos del grupete Robert Pattinson-Kristen Stewart-Taylor Lautner ya se llevan un buen cacho de ese botaje.
Para compensar nóminas (que la de Michael Sheen o la de Bryce Dallas Howard tampoco ha tenido que ser pequeñita), se tira también de actores ‘BBB’ (buenos, bonitos y baratos) para engrosar repartos, y uno de ellos será Rami Malek, una de las estrellas de la miniserie de la HBO ‘Pacific’.
Malek interpretará a Benjamin, un vampiro de Egipto (ya tiene experiencia ‘egipcia’ gracias a ‘Noche en el museo 2′, hacía de Ahkmenrah) con el poder de controlar los cuatro elementos (tierra, fuego, aire y agua). Este miembro de una secta egipcia (de la que todavía queda por fichar a Amun, Kebi y Tia) y sus hermanos viajan a Forks en el cuarto libro de servir como testigos en nombre de los Culllen.
En la agenda para cerrar con fuegos artificiales la franquicia tiene marcada en rojo pasión el mismo mes de noviembre, tanto para 2011 como para 2012, para intentar hacer ese taquillazo histórico que todos sabemos que hará.
No quiero ni pensar en los nervios, las tensiones y los llantos que se verán cuando salgan los créditos finales de la última entrega. Fijo para muchos fans será un drama.
Vía ET Online
Vía:Tu blog de cine
Texto:David Cárdenas
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