Y es que este filme de ciencia-ficción (me encanta esta palabra) se le está dando bombo por tratarse del nuevo trabajo de los realizadores de ‘Alien vs Predator: Requiem’, Colin y Greg Strause, una de las peores secuelas de la Historia del Cine para un servidor que os escribe, y perteneciente a una franquicia que nunca debería haber existido. Es un sacrilegio para las sagas originales.
El largometraje se ha hecho con un presupuesto pequeño pero las ambiciones que se tienen con él son muy grandes.
Por lo pronto, con la historia no se la han jugado demasiado, bebe claramente del género: se cuenta cómo un grupo de personas se despiertan con una luces extrañas que descienden desde el cielo sobre la ciudad de Los Angeles que provienen de una fuerza extraterrestre que intenta devorar a toda la población de la faz de la Tierra. La humanidad tendrá que luchar por no ser engullidos e intentar encontrar un modo
La premisa no está mal, y el trailer deja buen sabor de boca. Pero esto es sólo el principio.
Los hermanos Strause juegan con la ventaja de haber utilizado su propia empresa de efectos visuales ‘Hydraulx’, la misma que proporcionó algunos de los que contiene ‘Avatar’, ‘Iron Man 2′ y ‘El curioso caso de Benjamin Button’, para dotar a esta cinta del empaque necesario para también engullirnos como espectadores. Veremos si el 12 de noviembre próximo se dejan comer en USA.
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