Burns debutó en el mundo del cine dando vida a la protagonista femenina de la esencial 'La matanza de Texas' ('The Texas Chainsaw Massacre', Tobe Hooper, 1974), lo cual le permitió alcanzar el estatus de reina del grito. Tras participar en la televisiva 'Manson: Retrato de un asesino' ('Helter Skelter', Tom Gries, 1976) volvió a colaborar con Tobe Hooper en 'Trampa mortal' ('Eaten Alive', 1977).
En los años 80 únicamente rodó dos largometrajes, la poco conocida 'Kiss Daddy Goodbye' (Patrick Regan, 1981) y 'Asesinos del futuro' ('Future-Kill', 1985). Tras esta última se pasó casi dos décadas alejadas del mundo del cine, siendo su cameo en 'La matanza de Texas: La nueva generación' ('The Return of the Texas Chainsaw Massacre', Kim Henkel, 1994) la única excepción.
Su carrera se había reactivado durante los últimos años al participar en títulos como 'Butcher Boys' (Duane Graves y Justin Meeks, 2012), 'La matanza de Texas 3D' o 'Sacrament' (Shawn Ewert, 2014), habiendo finalizado recientemente el rodaje de 'In a Madman's World' (Josh Vargas, 2014), la que será finalmente su última película.
Descanse en paz.
Vía | Hollywood Reporter
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