Vamos con una de esas listas que esta vez no trata de recoger las mejores películas, sino determinados momentos en los que el teléfono —ese objeto sin el que muchos mortales ya no son capaces de vivir— de una forma u otra han contribuido a hacerlas inolvidables. Sin orden ni preferencia hay para todos los gustos y coberturas.
‘E.T. el extraterrestre’ (E.T. The Extraterrestrial’, Steven Spielberg, 1982)
Por supuesto el extraterrestre más entrañable de toda la historia del cine y su ansiada llamada de teléfono a su casa, su hogar, es algo que se queda grabado para siempre en tu memoria. Sin duda la llamada telefónica a mayor distancia que se ha hecho en una película. Por supuesto la respuesta y sus consecuencias se convierten en uno de los instantes más emotivos del cine.
‘Voces de muerte’ (‘Sorry, Wrong Number’, Anatole Litvak, 1948)
Una de las cumbres del Film Noir y del suspense, y probablemente la mejor película de Anatole Litvak. Una mujer inválida en su cama está continuamente hablando por teléfono y descubre un plan para ser asesinada. Barabara Stanwyck en una gran interpretación sin moverse de una cama. El final es lógicamente antológico.
‘Última llamada’ (‘Phone Booth’, Joel Schumacher, 2002)
Una de las mejores películas de Joel Schumacher adapta un guión de Larry Cohen en el que el un pobre desgraciado se ve unido a una cabina telefónica que no puede abandonar pues un francotirador le tiene en su punto de mira. El instante en el que confiesa ante un público estupefacto lo farsante y mentiroso que es adquiere mayor simbología por el teléfono.
‘Amores perros’ (Alejando González Iñárritu, 2000)
En la que sigue siendo la mejor película de Iñárritu, el actor Emilio Echevarría se marca una interpretación antológica como El Chivo, una especie de vagabundo que tiene una ocupación muy especial. El instante en el que renueva su aspecto por completo y le deja a su hija un mensaje en el contestador es todo un tour de force para todo buen actor que se precie. Y éste logra conmover al espectador.
‘Top Secret’ (id, Jerry Zucker, David Zucker, Jim Abrahams, 1984)
Esta película es lo que yo llamaría un placer culpable, con un humor muy malo en muchos de sus momentos, contiene unos cuantos chistes que siempre me parecieron muy buenos. Uno de ellos es el que se hace eco de la perspectiva en los planos cinematográficos, en este caso un teléfono es el protagonista del gag.
‘Crimen perfecto’ (‘Dial M For Murder’, Alfred Hitchcock, 1954)
Una de las obras maestras de Alfred Hitchcock, que además se filmó en 3D, contiene una muy famosa secuencia de un intento de asesinato. Grace Kelly, siempre tan guapa, contestando una fatídica llamada cuyo objetivo es su muerte. Poco sospecha quién está detrás de tal acción.
‘Dejad paso al mañana’ (‘Make Way For Tomorrow’, Leo McCarey, 1937)
En una de las películas más duras que ha parido el séptimo arte, y cuyo visionado es algo realmente duro de soportar por la temática, existen varios instantes en los que el teléfono hace acto de presencia, pero es justo resaltar aquel que tiene lugar en la partida de bridge. Una mujer deseosa de escuchar a su marido y los rostros de los que escuchan. Emoción contenida en grado sumo, y una hostia en toda la cara.
‘La cena de los idiotas’ (‘Le dîner de cons’, Francis veber, 1998)
La película más divertida de Francis Veber, que por supuesto tuvo su remake yanqui —un bodrio espantoso que estropea por completo la gracia de la premisa—, en la que destacan muchas escenas desternillantes. Personalmente me hace mucha gracia la mítica llamada de teléfono que hace el protagonista para satisfacer a su nuevo amigo. Para llorar de la risa.
‘Érase una vez en América’ (‘Once Upon a Time in America’, Sergio Leone, 1983)
En la obra maestra de Sergio Leone hay una llamada de teléfono cuya mayor virtud es la de unir temporalmente personajes y épocas. El recuerdo de una traición en forma de un sonido que es, a su vez, la llamada de la conciencia, la clave de todo el relato.
‘¡Qué bello es vivir’ (‘It’s a Wonderful Life’, Frank Capra, 1946)
El terrible cuento de Capra —confundido por muchos como un canto a la sensiblería— contiene un instante entre dramático y cómico. La escena de la llamada de teléfono de un antiguo novio de Mary (Donna Redd) mientras Goerge (James Stewart) está a su lado escuchando, pero sólo teniendo ojos para la mujer que tiene delante.
Por supuesto hay muchas más secuencias en las que un teléfono, o varios, forman parte importante de las mismas, pero para ese juego ya estáis vosotros.
Via:Blog de cine
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